¿Cuáles son las causas de la estomatitis en perros?

La estomatitis está causada por una reacción exagerada del sistema inmunológico a un irritante, una infección o una lesión bucal. Provoca mucho dolor y sufrimiento al animal.

Un perro con estomatitis.

La estomatitis es una patología de naturaleza inflamatoria que afecta a la salud bucal de los perros. Por extraño que pueda parecer, esta enfermedad se presenta con más frecuencia en gatos que en perros. Aun así, es un padecimiento del que se debe tener cuidado, pues sus complicaciones podrían ser riesgosas.

De hecho, a veces los tutores de canes pueden confundir la estomatitis con la gingivitis, ya que ambas entidades pueden presentarse de manera similar. Aquí te contamos todo lo que debes saber sobre la estomatitis canina.

¿Qué rasgos caracterizan a la estomatitis en perros?

Un rasgo a destacar es que la estomatitis no afecta los tejidos de soporte que unen el diente a la cavidad de la mandíbula del perro. Estos son, por ejemplo, los huesos alveolares, porciones del hueso maxilar que rodean y contienen los alveolos dentarios. Tampoco afecta a los ligamentos periodontales.

En general, la estomatitis daña a las estructuras blandas y carnosas. Por ejemplo, la faringe, la mucosa oral, el interior de las mejillas y la lengua, aunque también puede afectar a las encías. Típicamente, la estomatitis se manifiesta con la formación de úlceras dolorosas y persistentes.

Un perro abre la boca de la sorpresa.

¿Qué causa la estomatitis?

La estomatitis provoca la inflamación general de las mucosas bucales, lo cual puede o no incluir las encías y la lengua. Aunque aún se desconoce el origen de dicha patología, varias situaciones pueden propiciar su aparición, entre las cuales se encuentran:

  • Laceraciones bucales: las heridas en la boca pueden propiciar la entrada de bacterias y generar una inflamación generalizada de la mucosa bucal.
  • Enfermedad periodontal: esta patología afecta de manera crónica a la estabilidad tanto de la encía como de la mucosa bucal, lo que podría propiciar la aparición de la estomatitis.
  • Infecciones bucales: varios hongos y bacterias pueden invadir la mucosa bucal y generar una estomatitis. Por lo común, esto sucede debido a problemas inmunitarios en los canes.
  • Carencias nutricionales: la falta de vitaminas o nutrientes podría propiciar la presencia de patologías inflamatorias o infecciosas en la mucosa bucal. Esto hace más probable que aparezca la estomatitis.
  • Enfermedades genéticas: aunque aún se desconoce cómo los genes podrían inducir la presencia de la estomatitis, se ha observado que ciertas razas son más propensas a padecerla.
  • Neoplasias: varios tipos de tumores son capaces de generar inflamación generalizada en distintas regiones de la boca, lo cual también podría derivar en estomatitis crónica.
  • Cuerpos extraños en la boca: en la boca de los perros existen varios pliegues de piel que no son tan evidentes. Sin embargo, son lo bastante grandes como para que algunos objetos pequeños se atoren entre ellos, lo que propicia infecciones, laceraciones y en casos graves estomatitis.
  • Mala higiene bucal: la placa dental de los perros se conforma de colonias bacterianas capaces de provocar infecciones. Si no se cuida la higiene bucal, estas bacterias podrían ser capaces de ocasionar casos de estomatitis crónica.

La estomatitis puede ser un padecimiento primario

Las enfermedades primarias son aquellas que aparecen sin causa aparente. En la estomatitis generalizada primaria se ve afectada la mucosa bucal y muchas veces los márgenes de la lengua y la mucosa que circunda a los dientes. Sin embargo, no se detecta una causa específica.

La estomatitis como padecimiento primario se asocia con una respuesta inmune exagerada del huésped ante los microbios orales que forman la placa dental. Es más común que la estomatitis generalizada se produzca como consecuencia a una variedad de otras enfermedades, es decir, como un padecimiento secundario.

La estomatitis en perros como una condición secundaria

Muchas condiciones médicas pueden conducir a la aparición de estomatitis en canes, que se definen como causas subyacentes. Estas son algunas de las afecciones que pueden causar estomatitis en perros:

  • Trastornos autoinmunes.
  • Infecciones bacterianas, parasitarias o micóticas.
  • Contacto con sustancias cáusticas o reacción a ciertos medicamentos.
  • Deficiencias hormonales.
  • Otras enfermedades como diabetes, linfoma, enfermedad renal, osteomielitis y síndrome hipereosinofílico.

Los síntomas de la estomatitis

Como mencionamos antes, algunos síntomas de la estomatitis son muy similares a los que presenta la gingivitis. Por lo general, la única forma de lograr un diagnóstico definitivo y correcto es mediante un examen veterinario.

Para entender en qué momento se hace necesaria una visita a la clínica veterinaria, es importante estar atentos a la aparición de alguno de los siguientes síntomas:

  • Aparición de úlceras en mejillas, encías o lengua que a veces exudan pus.
  • Mal aliento, acompañado de sangrado de las encías y babeo excesivo.
  • Lesiones enrojecidas e inflamadas.

Además, es frecuente observar desgana o dificultad para comer con una pérdida de peso asociada. Las lesiones bucales con frecuencia provocan que el perro muestre renuencia a realizar su acicalamiento o a ser tocado en el hocico.

Diagnóstico de la estomatitis en los perros

Debido a la gran similitud que tiene la estomatitis con la gingivitis, la principal herramienta de diagnóstico es el historial médico del perro. Con esto, se descartan la presencia de enfermedades secundarias o reacciones adversas a ciertos fármacos. Sin embargo, no es suficiente para tener un diagnóstico certero.

Además del historial clínico, el veterinario debe realizar una exploración física para revisar los daños en la mucosa bucal. Asimismo, podría ser necesario la toma de rayos X para verificar la gravedad de la patología. Según lo que considere el profesional, también es posible hacer cultivos o biopsias de la mucosa bucal, con el objetivo de confirmar la presencia de patógenos infecciosos.

Diferentes tipos de estomatitis

Una vez que se ha esclarecido el diagnóstico, es importante clasificar qué tipo de estomatitis presenta el can. De esta forma, el tratamiento puede ser direccionado a eliminar las causas que originan el padecimiento y mejorar la calidad de vida de la mascota. Según el origen de la estomatitis, esta se clasifica de la siguiente forma:

  • Estomatitis ulcerativa: suele ser resultado de una respuesta inmunitaria exagerada a las bacterias. Por lo común es crónica, aunque en casos más graves también recibe el nombre de estomatitis ulcerativa necrosante.
  • Gingivoestomatitis ulcerativa inmunomediada: provocada por la enfermedad periodontal. Aparte de la presencia de estomatitis, esta patología se caracteriza por aparecer con síntomas de gingivitis e inflamación generalizada de las mucosas bucales.
  • Gingivoestomatitis linfoplasmocitaria: es bastante rara en perros, por lo que se desconoce las causas que provocan su aparición. Es posible que esté relacionada con un problema inmunológico, aunque existen pocas bases que lo sustenten.

¿Existe razas o etapas de crecimiento canino más afectadas por la estomatitis?

Es importante tener en cuenta que cualquier raza puede desarrollar estomatitis. Sin embargo, algunas razas caninas tienen cierta predisposición a condiciones médicas que a menudo incluyen la estomatitis como efecto secundario.

Así, por ejemplo, la osteomielitis es más común en algunas razas, especialmente los canes spaniel, galgos, labradores, malteses y schnauzer miniatura.

Por otro lado, el síndrome hipereosinofílico es común en los malamutes de Alaska y los perros de aguas de cavalier king charles. También está más presente en pastores alemanes, galgos italianos, rottweilers y perros esquimales siberianos.

Aunque a cualquier edad un perro está expuesto a este padecimiento bucal, en los cachorros la inflamación puede estar asociada a que los dientes se apiñan en la boca.

¿Cómo es el tratamiento esta enfermedad?

El tratamiento de la estomatitis en perros suele ser difícil y en otras ocasiones la afección puede desaparecer por sí sola una vez que se trata la causa subyacente. Este es el ejemplo de los casos de infección o exposición a sustancias químicas cáusticas.

También es frecuente que se realicen diferentes lavados con soluciones desinfectantes en la boca, con el objetivo de reducir la cantidad de placa y los patógenos. Asimismo, el uso de antibióticos y antimicóticos podría ser necesario, aunque esto depende por completo de las indicaciones del profesional.

En general, los veterinarios intentarán conservar los dientes, sin embargo, a menudo tienen que extraerlos. Esto se hace con el fin de reducir el dolor y mejorar la calidad de vida del animal. Asimismo, es posible que el especialista recomiende utilizar la terapia fotodinámica para restablecer la integridad de la mucosa, aunque todo depende del caso y la situación del can.

Los tratamientos con drogas inmunosupresoras o esteroides pueden reducir la inflamación, pero tienen efectos secundarios, sobre todo con tratamientos a largo plazo. Por esta razón, suelen ser de las últimas opciones que proponen los profesionales.

Un caso de estomatitis canina.

Recomendación final

La higiene dental diaria y las limpiezas profesionales periódicas pueden retrasar la progresión de la estomatitis en los perros, pero a menudo esto no es suficiente para prevenir el dolor. Además, es necesario conocer que los perros a los que se les extraen los dientes pueden necesitar una dieta de alimentos blandos.

Como siempre, la prevención es la mejor estrategia para proteger a tu perro de esta dolorosa enfermedad y de otras muchas afecciones bucales. Así que no dejes de acudir a revisiones frecuentes con tu veterinario para confirmar que todo se encuentra bien. Además, considera revisar bien el hocico de tu perro. Ante cualquier anomalía, no dudes en contactar pronto con un profesional.

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