La civilización egipcia era politeísta, ya que creía en una gran cantidad de dioses. Estas deidades eran retratadas en los templos a través de jeroglíficos y se les atribuían diferentes poderes. En este artículo te contaremos curiosidades sobre algunos de los animales sagrados del Antiguo Egipto.
¿Cuáles eran los animales sagrados del Antiguo Egipto?
Muchas especies eran consideradas deidades y con ciertas habilidades, por lo que se las veneraba y construían templos en su honor. Estos son cinco animales sagrados del Antiguo Egipto:
1. Cocodrilo
Es uno de los habitantes del río Nilo más famosos, y también conocidos desde tiempos remotos. El cocodrilo –foto que abre este artículo– representaba al dios Sobek y era reverenciado por los hombres; muchos ejemplares incluso eran momificados. Esta deidad estaba relacionada a la fertilidad, así como también al poder del faraón.
Para algunos egipcios, morir en las fauces de un gran reptil era todo un honor. Algunos los tenían de ‘mascotas’ en las casas, e incluso en la actualidad los pescadores realizan diferentes rituales antes de zarpar con sus barcos para no encontrarse con uno.
2. Halcón
Este ave representa al dios Horus y es otro de los animales sagrados del Antiguo Egipto, entre los más famosos. Se lo considera el creador de la civilización, relacionado al cielo, a la guerra y a la caza, y era hijo de Isis y Osiris.
De Horus surge la leyenda del ojo –símbolo popular– con características mágicas, purificadoras y sanadoras. La historia indica que durante una pelea con Seth –su tío, responsable de la muerte de su padre– perdió el ojo izquierdo, el cual fue sustituido por uno con cualidades mágicas.
En la vida natural, el halcón se encuentra entre las más rápidas del planeta gracias a sus finas alas. La especie conocida como halcón peregrino puede alcanzar los 360 km/h en vuelo en picado.
3. Gato
Sin duda uno de los animales sagrados del Antiguo Egipto, ya que se lo consideraba un nexo entre la tierra y el cielo. Los faraones los enterraban con honores cuando morían y se decía que eran seres muy espirituales.
En la mitología egipcia, la diosa Bastet era una gata que se encargaba de proteger y lograr la armonía en los hogares y templos de los malos espíritus. También actuaba en favor de las embarazadas, los bebés recién nacidos y los enfermos.
4. Chacal
Este animal se asocia con Anubis, el dios de las necrópolis y el protector de los embalsamientos. Esta deidad era la encargada de acompañar a los difuntos para que pesen su corazón antes de ingresar al cielo en el juicio de Osiris. En uno de los platos de la balanza se colocaba el órgano que representaba la moralidad, y en el otro la pluma de Maat, símbolo de la verdad y la justicia.
El chacal en la vida real es un depredador de la familia de los canis –junto a los perros y lobos– que se localiza en el mismo nivel de la cadena alimentaria que los coyotes. Puede correr a más de 15 km/h gracias a sus largas patas y es más activo durante el crepúsculo.
5. Escarabajo
El último de los animales sagrados de Antiguo Egipto de esta lista está relacionado al dios Jepri, del sol al amanecer, como una de las manifestaciones de Ra (el ‘padre’ de todos los dioses). El escarabajo aparece no solo en los templos y papiros, sino también en las joyas egipcias.
La leyenda tiene que ver con el escarabajo pelotero, que cuando amanece hace rodar una bola de estiércol con sus patas. Los egipcios relacionaron esa esfera con el sol por el momento del día en que comienza la actividad del insecto. Y de esa manera lo representan con un círculo sobre su cabeza.
Por supuesto que esta civilización tenía muchos más animales sagrados, entre ellos la vaca (diosa Hator), el león, el escorpión (diosa Serket), la serpiente, el toro (dios Apis) y el hipopótamo (diosa Taweret).