Son conocidas por sus grandes ojos, sus cabezas muy emplumadas y sus hábitos nocturnos. Estas aves rapaces no poseen plumas que parezcan orejas (esa es la diferencia con los búhos) y tienen un sonido chirriante más que particular. En este artículo te contamos sobre algunos tipos de lechuzas que habitan el planeta.
¿Qué tipos de lechuzas existen?
Están agrupadas en varias familias –titónidos es la más famosa– y las podemos encontrar en casi todo el mundo. Se alimentan mayormente de ratones, aunque también consumen insectos pequeños, lagartijas y murciélagos. Conoce algunos de los tipos de lechuzas más representativos a continuación:
1. Lechuza tenebrosa
A esta especie se la puede hallar en el sureste de Australia y Nueva Guinea, concretamente en las regiones montañosas o costeras y en las selvas tropicales. Es de hábitos nocturnos, duerme durante el día en cuevas, entre follaje o en los huecos de los árboles.
La lechuza tenebrosa –imagen que encabeza este artículo– mide unos 45 centímetros de largo y pesa 1 200 gramos (las hembras son un poco más grandes y pesadas). El plumaje es gris oscuro con blanco moteado, presenta un disco facial en forma de corazón, ojos oscuros y patas emplumadas.
2. Lechuza común
También se la conoce como ‘lechuza de los campanarios’ y es una de las aves más distribuidas del mundo, a excepción de Canadá, Groenlandia, África Sahariana, y norte y centro de Asia. Mide unos 35 centímetros, pero cuando vuela puede alcanzar los 95 centímetros de envergadura.
La cara de la lechuza común tiene forma de corazón en color blanco, al igual que el pecho; las alas y espalda son marrones en diferentes tonalidades. Para cazar –roedores, insectos, anfibios o reptiles– mueve la cabeza de forma casi imperceptible y al identificar una presa se lanza hacia ella, con un gran porcentaje de efectividad para atraparla.
3. Lechuza boreal
También conocida como lechuza de Tengmalm, habita en el centro de Norteamérica y en Europa, concretamente en los Alpes, los Pirineos y los Balcanes. Se trata de un ave de montaña que vive en bosques de coníferas y nunca se aleja de la zona de cría. Puede anidar en cotas altas, en agujeros de los árboles o en nidos abandonados; allí pone hasta 10 huevos, entre febrero y junio.
En cuanto a sus características, la lechuza boreal es de tamaño pequeño –no más de 30 centímetros de alto y 200 gramos de peso– y posee una cabeza grande. Sus ojos son negros con amarillo, y las plumas marrones y blancas. Es muy activa por las noches, su vuelo es corto y directo con aleteos veloces, y se alimenta de musarañas, ratones y ratas de agua.
4. Lechuza campestre
Aunque se trata de un ave nocturna, es uno de los tipos de lechuzas con mayor actividad diurna. Se la puede ver en el noroeste de Norteamérica, sur de Sudamérica, Europa, norte de África, y norte y sur de Asia, principalmente en áreas abiertas, marismas y costas; además, migra en invierno hacia áreas más templadas.
El plumaje de la lechuza campestre es marrón, gris y blanco, sus ojos son amarillos y negros, y las alas están surcadas por una franja clara y las puntas negras. Nidifica en el suelo, la hierba o las marismas y pone hasta ocho huevos, de color blanco, con 48 horas de diferencia entre cada uno. La hembra incuba por poco más de un mes y el macho monta guardia, además de aportar el alimento (topillos y roedores).
5. Lechuza maorí
La última entre los tipos de lechuzas habita en Oceanía, sobre todo en Nueva Zelanda: prefiere los hábitats arbolados, los bosques tropicales densos, los herbazales y hasta los campos agrícolas.
Es de hábitos nocturnos y caza al anochecer y amanecer: aves, insectos, saltamontes, polillas y wetas. Mide unos 30 centímetros, tiene una cola larga y todo su cuerpo es pardo con motas más claras, mientras que los ojos son anaranjados.