Causas de la hipersalivación en perros

La hipersalivación es el flujo continuo y excesivo de saliva en la boca del perro. Puede tener muchas causas diferentes y normalmente se acompaña de otros síntomas.

Hipersalivación en perros.

Todos los perros babean, especialmente los braquicéfalos (como los boxers o bulldogs), pero también algunas razas grandes como los sabuesos, san bernardos, mastines o golden retriever, que acumulan la saliva por la forma anatómica de su boca.

Sin embargo, algunas situaciones o patologías pueden provocar un babeo excesivo, conocido como hipersalivación o ptialismo en perros. Las causas de este suceso pueden ser muy variadas y algunas no son preocupantes, pero cuando está acompañado de otros síntomas o su duración se alarga más de unas pocas horas, es aconsejable acudir a un veterinario para realizar un diagnóstico del animal.

Causas de hipersalivación en perros

A continuación, te enumeramos diversas causas que pueden producir hipersalivación en perros.

Un perro salivando de excitación.

Excitación

Una nueva situación que pueda ocasionar nerviosismo, como la llegada de un nuevo perro en la familia o la excitación ante un plato de comida o juguete, pueden provocar salivación en los perros.

Esta situación no es preocupante, pues con una buena habituación y trabajo de autocontrol se puede evitar o disminuir esta respuesta. La salivación puede ser una señal que indique simplemente que el perro está estresado o nervioso.

Deshidratación y vómitos

La hipersalivación en perros puede venir acompañada de jadeos y es común que ocurra después de un ejercicio intenso. El babeo desaparece en este caso tras la ingesta de agua. También es habitual que el perro babee cuando tiene náuseas, justo antes de vomitar.

Cuerpo extraño en la boca

La hipersalivación puede aparecer como respuesta a un cuerpo extraño en la cavidad oral. El babeo, sumado al nerviosismo del animal, señales de dolor y la imposibilidad de cerrar la boca dan pistas de un cuerpo extraño presente en las encías, lengua, esófago o incluso faringe.

Los signos clínicos más comunes durante las obstrucciones esofágicas incluyen salivación, disfagia o dificultad para comer y regurgitación. Además pueden producirse arcadas, letargo, inquietud y anorexia.

Si no somos capaces de retirar los cuerpos extraños o su extracción resulta peligrosa, hay que acudir al veterinario, ya que podrían acabar por desencadenar una infección. Las heridas o úlceras en la cavidad bucal del perro también pueden hacerlo babear.

Intoxicación

Una gran cantidad de las sustancias que resultan tóxicas para los canes provocan hipersalivación como respuesta. Si sospechamos de la ingesta de algún veneno, medicamento o insecticida se hace esencial acudir al veterinario de urgencias más cercano.

En función del tóxico, la cantidad que haya entrado en el cuerpo del animal, el tamaño del perro y la rapidez de la actuación del tutor , el paciente canino puede requerir fluidoterapia o la administración de un fármaco que actúe de antídoto. Resulta muy útil, si es posible, llevar al veterinario una muestra o etiqueta de la sustancia que el perro haya ingerido.

Enfermedades infecciosas

Una enfermedad infecciosa puede generar un exceso de salivación en el perro, especialmente si añadido al babeo hay mal olor y sarro en la boca. La gingivitis o inflamación de las encías es uno de los motivos más comunes de la hipersalivación en perros. El animal siente dolor en las encías y evita comer y tragar, lo que se traduce en una acumulación de saliva en la boca.

Otras enfermedades

Las enfermedades digestivas, neurológicas, alergias, los tumores en la boca o patologías como la torsión de estómago pueden provocar un babeo excesivo y continuado. Este síntoma suele ir acompañado de otros relacionados con la enfermedad y lo mejor siempre es acudir a un profesional para descubrir el motivo subyacente concreto.

El signo más distintivo de la rabia es la hipersalivación, por suerte esta enfermedad está muy controlada y ha sido erradicada de la mayor parte de los países europeos gracias a la vacunación.

¿Cuándo acudir al veterinario?

La saliva es constantemente producida y secretada dentro de la cavidad oral por las glándulas salivales. La producción de la cantidad de saliva es controlada por ciertas neuronas del tronco encefálico, es decir, ocurre gracias al sistema nervioso.

Los estímulos que normalmente activan la producción de saliva son las sensaciones gustativas y olfativas, pero también pueden provocar su activación la toma de una toxina, las lesiones que afectan al sistema nervioso, la cavidad bucal o el digestivo como hemos descrito.

Saliva cayendo de la boca de un perro.

En general, la hipersalivación puede estar ocasionada por muchos factores y su gravedad viene normalmente acompañada por otros síntomas a los que debemos estar atentos. Cuando la salivación de la mascota es excesiva, continua o tiene mal olor, es posible que presente algún problema de salud.

Bibliografía

Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.

  • Barkyn.es
  • Hospital Veterinario Glòries
  • Soyunperro.com. Hipersalivación en perros.
  • Emergencias gastrointestinales en perros y gatos. Revista CES Medicina Veterinaria y Zootecnia / Volumen 5 / Número 2 / Julio – Diciembre de 2010 / ISSN 1900-9607.
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