Conoce a los perros spitz

Con orejas puntiagudas y cola enrollada, los perros spitz son canes de gran atractivo debido a su pelaje. En este artículo te contaremos más sobre este grupo canino, con una similitud innegable con los lobos.

Características generales de los perros spitz

Según la Federación Cinológica Internacional (FCI por sus siglas), los perros spitz tienen su origen en Alemania y son descendientes directos de los lobos. Todas las subrazas de este grupo son similares entre sí: solo se diferencian en cuanto al tamaño y el color del pelaje.

Podemos, por ejemplo, destacar que la cabeza de los perros spitz presenta un hocico alargado, trufa y ojos negros, y orejas triangulares erguidas. El pelo está formado por dos capas, una interna y otra externa, y la cola es enrollada hacia arriba y descansa en la espalda.

En cuanto al comportamiento, los spitz son perros alegres, muy apegados a sus dueños y dinámicos; se llevan bien con otras mascotas y con los niños. Aunque pueden ser guardianes porque ladran bastante, no son canes de protección.

Razas de perros spitz

Dentro de esta familia podemos destacar a sus razas más características. Merece la pena destacar que el grupo de perros spitz está dividido en tres secciones: europeos, asiáticos y nórdicos. Algunos de ellos son:

1. Gran spitz alemán

Podría decirse que es el ‘padre’ de todos los perros spitz, ya que de él descienden las demás razas. Se cree que apareció en la Edad de Piedra en Europa Central y que, por ende, es el can más antiguo.

El pelaje del gran sptiz alemán –foto que abre este artículo– puede variar de color, aunque generalmente es dorado, beige o blanco. Y, como los demás, presenta doble capa de pelo. Puede pesar unos 20 kilos y medir hasta 55 centímetros.

2. Spitz alemán lobo

También conocido como keeshond, es un perro mediano que se caracteriza por su pelaje bien lustroso y grueso, compuesto por dos o tres colores: marrón, negro y blanco o gris. Puede medir unos 50 centímetros y pesar alrededor de 30 kilos.

Se originó en tierras árticas de los Países Bajos, pero se hizo ‘famoso’ en Alemania durante el siglo XVIII. Durante la Revolución Francesa fue bautizado como lo conocemos ahora y desde siempre ha sido considerado como un gran perro de compañía.

3. Pomerania

Probablemente, es el más famoso de los perros spitz y está dentro de la categoría de los canes toy debido a su pequeño tamaño. Los antepasados del pomerania eran perros de Laponia e Islandia, que llegaron a Polonia acarreando trineos.

De cabeza triangular, con notable aspecto de zorro, orejas pequeñas triangulares y cola curvada sobre el lomo, este perro presenta doble capa de pelo y puede sufrir un poco de calor en verano. Es un can bastante activo que se adapta a la vida urbana o de campo.

4. Spitz japonés

Este perro originario de Japón es bastante similar al samoyedo ruso, principalmente por su pelaje completamente blanco, su cola curvada y sus orejas puntiagudas.

El spitz japonés es muy inteligente, leal y atento con sus amos, y excelente mascota. Se adapta sin problemas al entorno familiar y se lleva bien con otros perros si es socializado desde cachorro. Necesita poco ejercicio, pero le gusta mucho correr (es perfecto para la práctica de agility).

5. Spitz finlandés

Es uno de los perros spitz menos ‘esponjosos’, aunque cumple con varias características típicas del grupo (la cola curvada hacia arriba, el hocico alargado y las orejas triangulares). Es de color marrón claro o rojizo.

El spitz finlandés fue criado para cazar roedores y ardillas, y se sigue utilizando como perro de caza en la actualidad. Es algo testarudo, curioso y juguetón; puede ser agresivo con otros canes y necesita un largo paseo por día.

Otros perros spitz son el alemán mediano, el alemán pequeño, el volpino italiano, el eurasier, el hokkaido, el cazador de alces noruego y el lunderhund.

Fuente de la imagen principal | https://www.grosspitz.fi