¿Por qué mi perra gruñe o muerde a sus cachorros?

Albergar una camada de cachorros en casa es tan emocionante como trabajoso. Si además es la primera vez que te enfrentas al milagro de la vida en canes, es muy posible que encuentres comportamientos que no entiendes, como que la perra gruñe o muerde a sus cachorros sin previo aviso.

Aunque las hembras de perro doméstico tienen un gran instinto maternal, pueden presentar problemas de comportamiento en este ámbito, como cualquier madre. Si quieres comprender mejor esta conducta y ponerle solución, aquí tienes todo lo que necesitas saber, así que no te lo pierdas.

El instinto maternal de las perras

El instinto maternal está presente en todas las especies que proporcionan cuidados parentales a sus crías. En el caso de las perras, el rasgo más distintivo es lo protectora que es la hembra con sus cachorros: los mantiene siempre a su lado y no suele dejar que nadie se les acerque.

Además, los cachorros son totalmente dependientes de la madre hasta las 2 semanas de edad, que es cuando empiezan a desarrollar sus sentidos. Hasta este momento, la perra los mantendrá calientes, les dará de mamar y les lamerá para acicalarlos y estimular su sistema digestivo, pues de otra forma no harían sus deposiciones.

En la naturaleza, la madre tendría que centrarse en los cachorros más fuertes, dejando a los más débiles de lado para economizar sus esfuerzos de crianza.

Durante la tercera y cuarta semana de vida de los cachorros, estos se vuelven más independientes y comienza el periodo de destete. Cuando sean capaces de moverse por sí solos y comer sólido, su progenitora será la guía para aprender a socializar y buscar comida.

¿Por qué mi perra gruñe o muerde a sus cachorros?

El instinto maternal no es algo inevitable ni obligatorio: en todas las especies hay madres que rechazan a sus crías. Aunque no es lo habitual en el caso de las perras, sí podrías encontrarte con que la tuya gruñe o muerde a sus cachorros, o incluso, que intenta comérselos o matarlos.

Si bien esto parece una idea horrible a priori, en la naturaleza no es tan inusual, pues sacar adelante a una camada de cachorros es algo difícil y costoso para la madre.

Si tu perra muestra esta agresividad hacia sus cachorros, debes encontrar la causa subyacente y solucionarla. En los siguientes apartados tienes las razones más comunes por las que la madre podría comportarse así.

1. Es primeriza

Una perra que ha parido por primera vez en su vida puede no entender qué le está pasando por mucho instinto maternal que tenga. Es relativamente común ver que las madres primerizas rechazan a los cachorros o incluso les agreden.

Si los perritos han nacido por cesárea, puede que su madre no entienda de dónde han salido y los rechace, pues no ha seguido el proceso natural de cortar el cordón umbilical y limpiarlos.

En un primer momento, salvo que intente matarlos, no es preocupante que la hembra rechace a sus crías. Al cabo de unos días puede ir asumiendo la situación y hacerse cargo de ellas sin problema.

2. Dolor o enfermedad

Es fácil identificar si la perra está siendo agresiva con los cachorros por algún problema de salud. En estos casos, el rechazo suele ocurrir cuando se acercan, intentan mamar o la tocan. Siempre que el comportamiento de cuidados maternales se vea alterado, hay que descartar posibles patologías asociadas al parto. Las más comunes son las siguientes:

• Mastitis: la bajada de defensas que sufre la madre después del parto puede ocasionar una infección en las mamas. Cuando los cachorros intentan alimentarse, le producen dolor físico a la perra y esta podría mostrarse agresiva.
• Piómetra: esta misma bajada de defensas también puede producir una infección en el útero y acumular pus.
• Preeclampsia o eclampsia: esta enfermedad consiste en una bajada de calcio previa al parto o durante la lactancia. Produce convulsiones, fiebre fuerte y movimientos descoordinados. Debido a este malestar, la perra podría descuidar a sus cachorros.

3. Instinto y educación de la perra

El instinto maternal no es más que una serie de directrices genéticas para garantizar en cierta medida la perpetuidad de la especie. Esto supone que la perra tendrá ciertos comportamientos que no necesita aprender, pero puede ser que simplemente no tenga instinto maternal.

Por otro lado, una hembra que se haya criado en una casa con humanos carece de las enseñanzas de otras perras de su manada. Lo único que tiene para atender a sus cachorros es su instinto y este podría ser insuficiente.

4. Tienen un olor diferente

Una de las razones por las que nunca se debe interferir durante el parto de una perra, es porque en este momento forman un lazo especial con ellos a través de su olfato. Por ello, si una persona toca a las crías con su mano desnuda, dejará en su cuerpo rastros de su “olor”, lo que ocasionará que la madre lo detecte como un “intruso” y le gruña.

5. Es momento del destete

La edad a la que los cachorros pueden ser separados de su madre es después de los dos meses de vida. Si por alguna razón este proceso no se lleva a cabo y la madre continúa amamantando a sus crías, es normal que llegue un punto en donde se muestre agresiva y les ladre a sus cachorros cuando intenten acercarse a sus mamas.

Este es un comportamiento natural que le indica a los cachorros que ya deben comenzar a valerse por sí mismos. Sin embargo, no es común observarlo porque en la mayoría de los casos las personas separan a los pequeños de su madre antes de que suceda.

6. Intenta educar a sus cachorros

Este motivo es un poco diferentes de los anteriores, pero también puede ser una de las razones por las que una perra puede morder o gruñir a sus cachorros. Como se mencionaba más arriba, la madre es la encargada de enseñarle a los perros a sociabilizar durante sus primeras semanas de edad. Por esta razón, es posible que, en un intento por corregir sus comportamientos, les gruña o les ladre a sus crías.

Contrario a las razones anteriores, en este caso la madre solo increpa a sus crías como una advertencia, por lo que no se detecta ningún tipo de rechazo hacia ellas. De hecho, después de evidenciar este comportamiento, continúa cuidando a sus pequeños sin mayor problema.

¿Qué hago si mi perra gruñe o muerde a sus cachorros?

Si la vida de los cachorros está en peligro, lo primero será separarlos de la madre. En este caso, deberás encargarte de los cuidados de los pequeños hasta que se solucione el problema.

Por otro lado, si la perra gruñe o muerde a sus cachorros por simple rechazo y no llega a hacerles nada, puedes intentar asistirla para que los acepte con la ayuda de un profesional. No obstante, es un proceso delicado y no siempre es recomendable.

La perra también necesitará asistencia psicológica, pues puede que el parto haya sido un suceso traumático para ella.

Por último, es imprescindible que durante todo el proceso de gestación, parto y lactancia se haga un seguimiento veterinario. Un problema de salud en estas etapas no solo puede provocar un comportamiento agresivo hacia las crías, sino comprometer la vida de la madre.