¿Cómo fortalecer el sistema inmunológico de un gato?

No existe un fórmula milagrosa para la inmunidad de un gato, pero sí puedes hacer muchas cosas para mejorarla

Gato disfrutando del jardín

Los felinos son animales que se estresan con facilidad. Por ello, cuando se estresan pueden desarrollar problemas de salud. De hecho, hay enfermedades de las que ya son portadores que pueden manifestarse debido al estrés, pues este perjudica directamente al sistema inmunológico de un gato.

El sistema inmunológico consiste en un conjunto de órganos, como podrían ser el timo, los ganglios linfáticos, la médula ósea, el bazo o hígado. Estos generan o almacenan células inmunitarias como los glóbulos blancos, anticuerpos y otras sustancias que frenan la proliferación de bacterias y virus; además, retienen y eliminan sustancias tóxicas.

Por consiguiente, hacer que el sistema inmunológico de un gato se mantenga sano es esencial para la vida de este.

Cuando la inmunidad falla o se encuentra deprimida, como ocurre con algunas enfermedades víricas, el gato enferma y puede llegar a morir.

Enfermedades que afectan al sistema inmunológico de un gato

Algunas patologías de los felinos causan daños, de forma directa, sobre el sistema inmunológico, mientras que otras se ven agravadas cuando, por otras razones, la inmunidad del gato se reduce.

Virus de la inmunodeficiencia felina

El virus de la inmunodeficiencia felina o FIV es una enfermedad causada por un virus de la familia de los retrovirus. No se conoce cómo afecta el virus al sistema inmunológico de un gato, solo que varía el ratio de dos tipos de linfocitos, los linfocitos CD4+ y los CD8+.

Tras la infección se presenta una fase en la que el gato muestra síntomas comunes a cualquier infección vírica, como fiebre, vómitos o diarrea. Tras este periodo, el gato puede mantenerse como portador, sin dar señales de sintomatología, hasta por cuatro años.

Pasado este tiempo, comienzan a aparecer síntomas muy similares al SIDA en humanos y, si el animal sobrevive, irá padeciendo infecciones secundarias multiorgánicas hasta su muerte.

Sistema inmunológico de un gato debilitado

Virus de la leucemia felina

El virus de la leucemia felina o FeLV provoca la aparición de neoplasias o tumores y suprime la actividad de la médula ósea y del sistema inmunitario en general. Esto disminuye enormemente la capacidad defensiva de la inmunidad del gato.

La sintomatología de esta enfermedad es extremadamente variada, pero todos los pacientes desarrollan cáncer de distintos tipos.

Peritonitis infecciosa felina

La peritonitis infecciosa felina está provocada por un coronavirus felino (CoVF). Este virus se aloja y afecta principalmente al intestino, lo cual provoca diarreas y otros síntomas derivados.

No obstante, por alguna razón aún desconocida, el virus parece mutar y entrar en algunas células propias del sistema inmune, como los macrófagos y los monocitos. Estos reparten el virus por todo el cuerpo y crean una enfermedad sistémica que acaba con la vida del gato en menos de un mes o en 24 horas.

Consejos para fortalecer el sistema inmunológico de un gato

A pesar de las patologías que afectan directamente al sistema inmunológico de un gato, existen algunos factores que podemos controlar para evitar que la inmunidad de nuestro felino se degrade.

Ofrécele una comida de alta calidad y poco procesada

Lo ideal sería alimentar al gato con carne cruda o comida cocinada en casa. Sin embargo, a veces el precio de esta dieta y el tiempo que requieren no nos facilita la tarea. Por ello, también puedes alimentar a tu gato con comida enlatada de buena calidad y bien procesada.

Para ello, debes observar que los ingredientes sean conocidos y que no lleven aditivos ni conservantes.

Recuerda que el aspecto del alimento no tiene importancia, ya que la industria puede crear un ultraprocesado que tenga forma de trocito de carne sin serlo.

Por otro lado, debes observar en los componentes analíticos que esta tenga un buen porcentaje de antioxidantes, aminoácidos y omega-3.

Gato comiendo carne

Usa complementos alimenticios para el sistema inmunológico de un gato

Si el gato ya padece alguna enfermedad o está mayor, quizá le vendría bien tomar complementos de la dieta. En el mercado existen multitud de estos suplementos según las necesidades del gato. Además, en ciertas épocas del año, como el invierno, su uso podría ser muy positivo.

No sobrevacunes a tu gato

Si tu gato no sale a la calle y no está en contacto con otros animales, quizá la vacunación no sea tan necesaria, aunque esto debe determinarlo un veterinario. En muchas ocasiones, los gatos desarrollan tumores en la zona donde se inyectó la vacuna. De todas formas, aunque no lo vacunes, es importante que visites al veterinario, al menos una vez al año.

Evita que tu gato padezca obesidad

Al igual que en los humanos, la obesidad puede causar estragos sobre la salud y el sistema inmunológico de un gato. Bríndale un entorno enriquecido y estimulante, donde pueda jugar y mantenerse activo. Incluso, puedes plantearte tener más de un gato.

No lo sobrealimentes y lleva un control riguroso de su peso corporal.

Reduce el estrés y las situaciones que puedan provocarlo

Como comentamos al principio del artículo, el estrés es el peor compañero del gato. Los felinos son animales extremadamente sensibles que, aunque no lo parezca, pasan gran parte del día en alerta. 

Los cambios en el hogar, el exceso de manipulación, los ruidos fuertes, la ausencia del tutor, así como otros factores, pueden provocar estrés en el gato. Este estado hará que la salud del animal empeore e, incluso, se desarrollen enfermedades que antes estaban latentes.

Bibliografía

Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.

  • August, J. (2008). Medicina Interna Felina. Etiopatogenia de la cistitis idiopática felina.
  • Ayala, I., Talone, T., Castillo, C., Gerardi, G., & Hernández, J. (1998). El síndrome de inmunodeficiencia adquirida del gato causado por el FIV (Feline Immunodeficiency Virus). Archivos de medicina veterinaria, 30(1), 5-12.
  • Carmona, A. B. (2004). Infección por FeLV en el gato. Pequeños Animales, 9(48), 18-31.
  • Prieto, M., & Acuña, A. (2012). Actualización de la Peritonitis Infecciosa Felina. Hospitales Veterinarios, 4(3), 75-82.
Scroll al inicio