Los dragones barbudos son pequeños y simpáticos lagartos que han recobrado gran popularidad como mascotas en las últimas décadas. En la actualidad, estos reptiles son los representantes más reconocidos del género de las Pogonas. A continuación, conoceremos más sobre el dragón barbudo, sus características físicas y comportamiento.
Dragón barbudo: taxonomía y características físicas
Por lo general, utilizamos el término “dragón barbudo” para denominar a diversas especies del género de las Pogonas. La especie más popular como mascota en la gran mayoría de los países, es la Pogona vitticeps. Por ello, nos centraremos en las características de este representante de los dragones barbudos.
Los dragones barbudos son lagartos de talla pequeña, que suelen medir entre 50cm y 60 cm en la edad adulta. El peso corporal promedio de estas especies ronda los 400 a 450 gramos. Su cabeza es de forma triangular y posee numerosas escamas espinosas a su alrededor, las cuales también recubren todo su cuerpo.
Cuando el animal se siente amenazado o asustado, infla las escamas de su cabeza y estas toman un color negro. Esta es una de sus habilidades más destacadas, aunque no sea una buena señal al tenerlos como mascota. Un dragón barbudo que se siente cómodo en su hogar no tiene porque adoptar este mecanismo defensivo.
Dimorfismo sexual
Los dragones barbudos poseen un evidente dimorfismo sexual, lo que facilita diferenciar los machos de las hembras. Los machos son los únicos ejemplares que muestran poros femorales en el interior de sus bultos.
Ambos sexos pueden tener diferentes tonalidades en su cuerpo, siendo las más comunes el verde, el rojizo, el gris, el castaño y el anaranjado. Además, debemos destacar que el color del dragón barbudo puede variar según la temperatura de su entorno y su estado de ánimo.
Carácter y comportamiento de los dragones barbudos
El éxito de estos pequeños reptiles como mascotas se debe no solo a su peculiar belleza, sino también a su adorable carácter. Los dragones barbudos suelen ser muy dóciles y equilibrados, destacando la alta sociabilidad de su temperamento.
Por todo ello, el dragón barbudo suele ser una de las especies más recomendadas para cuidadores principiantes. Por su docilidad y pequeño tamaño, resultan más fáciles de manipular y cuidar que los reptiles de gran tamaño y temperamento complejo, como las iguanas.
Otra ventaja de adoptar a un dragón barbudo como mascota es que la población de este reptil es considerada estable en la naturaleza. Es decir, los dragones barbudos no se encuentran entre las especies en peligro de extinción.
Siempre hay que recordar la importancia de llevar a cabo una adopción responsable. No se recomienda adquirir mascotas de cualquier especie a particulares no homologados o a través de Internet. Lo ideal es buscar vendedores o criaderos homologados o centros de rescate de animales exóticos, a la hora de adoptar a tu reptil.
Hábitat natural
Los dragones barbudos son especies originarias del suroeste de Australia, más precisamente de las sabanas y desiertos de esta región. También pueden ser encontradas naturalmente en los estados de Nueva Gales del Sur.
Al adoptar a un dragón barbudo como mascota, será esencial proporcionar un ambiente propicio a su desarrollo físico y cognitivo. Estos pequeños reptiles se sienten cómodos en sustratos terrosos o arenosos y disfrutan de tener ramas y pequeños troncos secos, así como piedras a su disposición.
Necesitaremos poner especial atención a la temperatura y humedad de su terrario y de su entorno. Como están habituados a climas cálidos y secos, las temperaturas promedio de su ambiente deben estar entre 30º y 36ºC durante el día, bajando a 21º o 23ºC por las noches. A su vez, la humedad jamás debe estar por encima del 50%.
Alimentación y salud del dragón barbudo
En estado silvestre, los dragones barbudos son animales omnívoros que suelen mantener una dieta variada. La variedad de alimentos consumidas en su alimentación suele variar según la disponibilidad de comida en su hábitat y la época del año.
Por ello, será muy importante ofrecer una nutrición completa y equilibrada a tu dragón barbudo, basada en sus requerimientos nutricionales.
Junto a frutas y verduras, necesitaremos incluir pequeños animales, como insectos y caracoles en su dieta. En las tiendas para mascotas especializadas en reptiles, podemos encontrar una buena variedad de dichos alimentos.
Otro cuidado esencial para los dragones barbudos como mascotas será una adecuada medicina preventiva. Estos pequeños lagartos son especialmente vulnerables a ectoparásitos, en especial a los ácaros. Por ello, la higienización de su terrario y del hogar deberá ser muy cuidadosa.