Cada vez son más las personas que tienen mascotas en las ciudades, y por ello los espacios verdes se convierten en los lugares elegidos para el paseo diario. Claro que para poder llevarlo sin preocuparnos, debe cumplir con ciertos requisitos. En este artículo te contaremos cuáles son las características de un buen parque para llevar a tu perro.
¿Cómo elegir el parque para llevar a tu perro?
El sitio más apropiado no es aquel que nos quede más cerca de casa, sino el que ofrezca seguridad y permita el disfrute del animal (y también el nuestro).
La principal característica de un parque para llevar a tu perro ha de ser la siguiente: que tenga espacio suficiente para que pueda correr y jugar a su gusto. Pero, por supuesto, esto no es suficiente, ya que además se espera que tenga:
1. Cercado
El cerco perimetral del espacio para perros del parque debe tener la altura suficiente para que ningún animal pueda saltar por encima y escapar. También tiene que contar con una puerta de acceso y salida, la cual cierre correctamente (mejor si posee un sistema para que cierre sola).
2. Limpieza
Es verdad que la limpieza depende más que nada de los dueños, pero también es fundamental que el parque al que lleves a tu perro cuente con dispensadores de bolsas para recoger los deshechos y, por supuesto, con cestos de basura para arrojarlas.
A su vez, el ayuntamiento o encargado del parque ha de garantizar una buena limpieza del recinto, usando productos desinfectantes y retirando los deshechos de las papeleras a diario. De esta manera se evita el contagio y la proliferación de enfermedades, insectos y mal olor.
3. Espacio
Si llevamos a nuestro perro al parque, es porque probablemente no tenemos lugar en casa para que juegue y corra como corresponde. Por lo tanto, elige aquel recinto que ofrezca grandes dimensiones y donde, aunque haya diez mascotas juntas, cada una tenga su espacio libre.
No hace falta que el parque tenga decenas de metros para los perros, pero sí que estos se encuentren cómodos y puedan correr para liberar sus energías acumuladas durante el día.
4. Bebederos
El agua potable sirve tanto para que ellos beban como para limpiar la zona antes de irnos. Ten cuidado de que los bebederos estén limpios y no contengan agua estancada. Si eso sucede, tira el agua. Evitarás así el contagio de muchas enfermedades.
5. Zona para dueños
La idea de llevar al perro al parque no es solo para que él se divierta y socialice, sino para que el dueño también disfrute de este rato. Y eso se puede lograr si en los alrededores del área canina hay asientos cómodos, senderos delimitados y sitios con sombra donde descansar y hablar con otras personas que también paseen a sus mascotas allí.
6. Vigilancia
Cada vez son más los parques para perros que cuentan con una o varias personas (según el espacio y la afluencia de animales) encargadas de cuidarlos mientras están jugando y socializando.
Su tarea básicamente reside en limpiar la zona y, al mismo tiempo, vigilar que nadie quiera llevarse un animal que no es suyo. Los robos de perros de raza –sobre todo los pequeños como el caniche o el Yorkshire– en estos parques era un problema en ciertas ciudades.
Que haya vigilancia en el parque canino no quiere decir que te puedas ‘dar el lujo’ de desatender a tu perro. No olvides que una mascota es nuestra responsabilidad estemos donde estemos.
7. Ubicación
Si bien hemos dicho al principio que la ubicación no era lo más importante, lo cierto es que un buen parque para llevar a tu perro debe quedar relativamente cerca de nuestro hogar. Por supuesto que esto no es lo único necesario, aunque sí valorado.
Si cumple con estos requisitos, entonces podemos afirmar que se trata de un excelente parque para llevar a tu perro. ¿Tienes uno con todas estas características? ¿A qué esperas para disfrutarlo con tu mascota?
Bibliografía
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- José, M., & Terán, R. (2014). “Los perros como catalizadores de socialización y de cambio en espacios públicos” (“Dogs as catalysts for socialization and change in public places”). Rev. Reflexiones.