Al pensar en una especie ruidosa quizás muchos de nosotros imaginamos un animal gigante y pesado. No obstante, algunos animales diminutos como los insectos pueden emitir sonidos muy potentes. ¿Quién no ha perdido una noche de sueño gracias al molesto ruido de un mosquito? Pero los mosquitos no son los insectos más ruidosos, en realidad. Hay otros ejemplares considerados como el insecto más ruidoso del mundo.
La cigarra, el insecto más ruidoso del planeta
El famoso canto de la cigarra es tan característico y peculiar que ha inspirado diversas canciones, poemas, novelas y hasta creencias populares. No es por casualidad que la cigarra sea el insecto más ruidoso del mundo: su sonido puede superar los 120 dB y alcanzar un nivel de vibración de hasta 86 Hz.
El canto de la cigarra es tan potente que los seres humanos –que no poseen una audición tan desarrollada como otras especies– pueden percibirlo a más de 500 metros de distancia.
El cuerpo de las cigarras posee una estructura llamada aparato estridulatorio, en los costados de su primer porción abdominal. En este aparato encontramos las timbales, membranas quitinosas, que actúan de forma similar a una caja de resonancia.
Gracias a estas características tan particulares, el sonido que la cigarra emite se torna muy potente y puede expandirse a lo largo de varios kilómetros.
¿Y por qué cantan las cigarras? Antiguamente era común asociar el sonido de este insecto con los días cálidos. En la actualidad, hay quien escucha el canto de una cigarra y afirma que “mañana hará calor”.
En realidad, las cigarras macho son las que cantan durante el período de reproducción para atraer a las hembras. Se trata de un método natural para comunicar su presencia, convocar a las hembras y alejar otros machos de su territorio.
Como la época de la reproducción de las cigarras empieza en primavera, cuando retornan los días cálidos después del invierno, la sabiduría popular ha asociado su canto con la llegada del calor.
Los 5 animales más ruidosos de la naturaleza
Sin lugar a dudas, la cigarra es el insecto más ruidoso del mundo, pero también existen otros animales que logran emitir vibraciones y sonidos muy potentes. A continuación, analizamos cuáles son los animales más ruidosos de nuestro planeta:
Micronecta Scholtzi
El Micronecta scholtzi o ‘chinche de agua es un minúsculo insecto acuático, y es que su cuerpo mide solo dos milímetros, pero el sonido que emite puede alcanzar los 99 decibelios. Por ello, es considerado como el animal y el insecto más ruidoso en proporción a su tamaño.
Igual que las cigarras, estos chinches ‘cantan’ para atraer a las hembras durante la fase de apareamiento. La vibración resulta de un proceso conocido como estridulación, donde el macho ‘frota’ su pene contra el abdomen.
Increíblemente, con un pene de solo 50 micrómetros, el Micronecta emite un sonido muy potente. No obstante, difícilmente los seres humanos perciben su sonido, ya que más del 90% de su potencia se pierde al pasar del agua al aire.
Los cachalotes (Physeter macrocephalus)
El potente canto de las ballenas domina a los océanos de nuestro planeta, por lo que siempre figuran entre los animales más comunicativos y ‘escandalosos’. No obstante, los cachalotes destacan particularmente por emitir el sonido más intenso de todo el reino animal. Se trata de una especie de chasquido muy fuerte y corto, que dura entre 15 y 30 milisegundos, pero alcanza hasta 230 dB.
El camarón pistola tigre (Alpheus bellulus)
El camarón pistola tigre es una pequeña especie originaria del Mediterráneo que emite un sonido ‘explosivo’ de hasta 200 dB. Además, usa sus poderosas pinzas para formar una burbuja que actúa como un aislamiento acústico.
Realmente, los individuos de esta especie modifican la presión acústica de su entorno para potenciar su propio sonido. Se trata de un método muy peculiar de ‘atacar’ y matar a sus presas con ondas de choque que alcanzan los 100 km/h.
El murciélago pescador (Noctilio leporinus)
Todos los murciélagos emiten ondas de sonido para orientarse en su hábitat (un método conocido como ecolocalización). Pero los murcielagos pescadores emiten una vibración extremadamente potente, que puede alcanzar los 140 dB. Como el sonido del murciélago supera los 20Hz resulta imperceptible para los oídos humanos. Por ello, solemos considerar los murciélagos como animales silenciosos.
Kákapu (Strigops)
Los kákapu son reconocidos como las únicas especies de loro que no pueden volar. Su canto de apareamiento es tan potente que puede superar los 130 dB y extenderse por más de cinco kilómetros. Desafortunadamente, se encuentra entre las especies con mayor riesgo de extinción del planeta.