Para qué engañarnos, nuestros perros nos quieren mucho, pero en cuanto nos ven con algo en la mano relacionado con su higiene, salen corriendo. Si tu perro no se deja lavar los dientes, mira estos consejos prácticos que pueden ayudarte a conseguirlo.
Consejos si el perro no se deja lavar los dientes
Escoge el momento
Ya sabemos que los perros muchas veces necesitan que los engañemos para conseguir lo que queremos de ellos. Si tu perro no se deja lavar los dientes espera un momento en el que esté tranquilo, quizá en tu regazo, y comienza a acariciarle cerca de su boca.
Luego podrías comenzar a examinar sus dientes, para más tarde intentar darle con una gasa previamente humedecida con pasta de dientes. En esta posición será mucho más fácil.
Escoge cómo
Hay dos formas en las que puedes cepillar los dientes de tu perro. Una es con una gasa y otra con un cepillo. Lo mejor para comenzar, y especialmente si el perro no se deja lavar los dientes, es el método de la gasa.
La gasa crea menos presión y puede resultar más cómoda. Hay que decir que es menos efectiva que el cepillo, pero para empezar a adentrar a tu mascota en el mundo de la higiene dental será suficiente.
Si te decides por un cepillo, elige uno que sea de cerdas suaves y que tenga forma anatómica para que se adapte a la forma de los dientes de tu mascota. Así sea más fácil para él aceptar el hecho de que la limpieza de dientes va a comenzar a formar parte de su vida.
La pasta
El siguiente paso es la pasta. Quizá tu perro no se deja lavar los dientes porque el olor o el sabor de la pasta de dientes que has comprado es demasiado fuerte. Recuerda que nunca debes usar dentífricos para personas con tu perro. En las tiendas veterinarias hay una gran variedad, algunos incluso sin olor o sabor para que los acepte con mayor facilidad.
La forma
Ten cuidado con la manera y la intensidad con la que limpias los dientes de tu perro, sobre todo si es una de las primeras veces que lo haces. Intenta ser suave y no dejes de hablarle de forma leve y de acariciarlo mientras lo haces; tu mascota se sentirá relajada y la próxima vez estará más dispuesta a dejarse lavar los dientes de nuevo.
Dale un premio
Cuando los perros se niegan a hacer algo es porque lo relacionan con una cuestión negativa. Cuando hayas terminado de cepillar los dientes de tu perro no te olvides premiarlo.
Dale una de sus golosinas preferidas o un trozo de comida que le encante. De esta manera, asociará el proceso con algo positivo y podría incluso ser él mismo quien venga la próxima vez a buscarte con el cepillo en la boca.
Mímalo
Además de un premio físico, un perro necesita tu reconocimiento para sentirse bien y saber que tiene tu aprobación. Dale mimos y palabras de aliento diciéndole que es un buen chico, lo bien que se ha portado y cuánto lo quieres. Seguro que tu perro te lo agradecerá y la próxima estará más dispuesto a mostrarte los dientes, en el buen sentido claro.
Ya ves que con paciencia y un poco de psicología perruna puedes conseguir cualquier cosa de tu mascota. El esfuerzo, la constancia y el cariño son las claves.