9 tipos de cocodrilos

Los cocodrilos son los reptiles más grandes que existen en el presente. Aunque parezcan lagartos gigantescos, no están relacionados estrechamente con ellos. En realidad son arcosaurios, un antiguo grupo de reptiles al que también pertenecen las aves.

Aunque en el pasado ocuparon nichos muy diferentes, los tipos de cocodrilos actuales son depredadores dominantes que acechan en el agua y confían en su poderosísima mordida para cazar. Si quieres aprender más sobre estos imponentes animales, ¡sigue leyendo!

Características y hábitat de los cocodrilos

Los cocodrilos son superficialmente similares a un lagarto, aunque más grandes, musculosos e imponentes. Sus patas son cortas, el cuerpo alargado y la cola, que está aplanada lateralmente, es larga y muy poderosa.

La cabeza es uno de los aspectos más característicos de estos organismos. Suele ocupar en torno a un séptimo de la longitud del animal. Es larga, aplanada dorsoventralmente y está repleta de dientes afilados. Más allá cráneo, su piel es otro de los rasgos definitorios. Está muy fuertemente acorazada, formada por escamas de queratina y osteodermos —placas de huesos—.

La mayoría de especies de cocodrilo viven cerca de los trópicos, ya que necesitan temperaturas altas para mantener su metabolismo activo —son ectotermos—. Todos los cocodrílidos están ligados a medios acuáticos, especialmente de agua dulce. Ocupan pantanos, lagos, ríos, estuarios, terrenos inundables y otros humedales similares, siempre que cuenten con abundancia de vegetación y de presas.

Tipos de cocodrilos

Hoy en día, se han descrito 24 especies de crocodilios, que se dividen en 3 familias claramente diferenciadas. A continuación, te explicaremos sus rasgos principales.

Cocodrilos verdaderos (Familia Crocodylidae)

Esta es la familia más amplia, con 14 especies pertenecientes a 3 géneros. Solo 2 de las especies de esta familia están fuera del género Crocodylus. Los cocodrilos verdaderos están distribuidos por todo el mundo.

Estos gigantescos reptiles pueden diferenciarse del resto por su cabeza triangular, que va estrechándose hacia la punta del hocico. Además, sus dientes inferiores y superiores son visibles cuando cierran la boca. Algunas especies representativas de cocodrilo verdadero son las siguientes:

• Cocodrilo de agua salada (Crocodylus porosus): el reptil más grande del mundo, ya que puede alcanzar hasta 7 metros de longitud y 1000 kilos de peso. Es más territorial y agresivo que sus parientes, lo que lo convierte en uno de los más peligrosos. Los cocodrilos de agua salada aparecen en el Sudeste Asiático y el norte de Australia. Habitan en aguas dulces y salobres, pero también pueden salir a mar abierto.
• Cocodrilo del Nilo (Crocodylus niloticus): de tamaño nada despreciable, este es el cocodrilo más grande de África. Se extiende por la cuenca del Nilo y gran parte de África subsahariana. Su dieta es extremadamente variada, pues incluye a cualquier animal que se cruce en su camino.
• Cocodrilo hociquifino africano (Mecistops cataphractus): otra de las especies africanas, esta vez mucho más desconocida, pequeña y de distribución más limitada. Aparece en el oeste y centro de África. Destaca por su hocico fino, que indica una dieta piscívora, aunque también consume crustáceos, insectos, ranas y serpientes.
• Cocodrilo enano (Osteolaemus tetraspis): la distribución de esta especie solapa en gran medida con la anterior. Sin embargo, su aspecto es radicalmente diferente. Este es uno de cocodrilos más pequeños, con una longitud aproximada de 1,5 metros. Es nocturno, solitario y destaca por su corto hocico.

Caimanes y aligátores (Familia Alligatoridae)

Los aligatóridos representan 8 especies distintas, repartidas en 4 géneros diferentes. Pueden diferenciarse de otros tipos de cocodrilos por su hocico ancho y romo, que recuerda a una pala.

Cuando estos animales cierran las mandíbulas, solo pueden observarse sus dientes superiores. Los caimanes y sus parientes son principalmente sudamericanos, aunque una especie habita en Norteamérica y otra en China. Entre las especies más representativas de esta familia, se pueden destacar las siguientes:

• Aligátor americano (Alligator mississippiensis): este es el único caimán de los Estados Unidos. Aparece en Texas, Luisiana, Misisipi, Alabama, Georgia, Florida, Carolina del Sur y del Norte. Aunque este animal estuvo gravemente amenazado por la sobreexplotación humana, los planes de conservación han permitido que se recupere muy exitosamente.
• Aligátor chino (Alligator sinensis): es la única especie de aligatórido fuera de América. Su rango está muy reducido, pues solo aparece en la provincia china de Anhui. Además, existen poquísimos individuos silvestres. Por lo tanto, está considerado “en peligro crítico” por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN).
• Caimán de Cuvier (Paleosuchus palpebrosus): es el más pequeño de todos los crocodilios, ya que solo alcanza poco más de un metro. Está ampliamente distribuido por la cuenca del amazonas y tiene un semblante muy característico. Sus cejas marcadas y mirada intensa le dan aspecto de cría maligna de cocodrilo.

Gaviales (Familia Gavialidae)

Los gaviales son el grupo más peculiar, reconocible y poco numeroso de estos reptiles. Sus hocicos son muy estrechos y elongados, casi tubulares. Los dientes son largos y cilíndricos. Junto con la forma del cráneo, indican una dieta piscívora. Tan solo hay 2 especies dentro de esta familia:

• Gavial (Gavialis gangeticus): es el cocodrilo más acuático. Anteriormente tenía una distribución amplia, pero ahora solo aparece en pocos ríos de India y Nepal. Su aspecto es muy distintivo, con un cráneo y hocico extremadamente delgados. Los machos generan una masa bulbosa al final del hocico.
• Falso gavial (Tomistoma schlegelii): antiguamente se creía que el falso gavial se parecía a G. gangeticus debido a un fenómeno de convergencia evolutiva. Sin embargo, estudios filogenéticos moleculares indican que ambos tipos de cocodrilos pertenecen a la misma familia.

Los cocodrilos y todos sus parientes son animales realmente fascinantes. Aunque actualmente son escasos, fueron las formas de vida dominantes antes de que los dinosaurios aparecieran. Hoy en día siguen siendo muy competentes y sirven como testigo de la vida pasada. Debemos conservarlos a toda costa.