Animales que comen hormigas: los mirmecófagos

Los animales que comen hormigas usan sus garras para rasgar una abertura en el hormiguero y poner a trabajar su largo hocico, saliva pegajosa y lengua eficiente.

Oso hormiguero: lengua

Cuando pensamos en animales que comen hormigas lo primero que nos viene a la mente es el oso hormiguero. Sin embargo, otras muchas especies se nutren de estos insectos: aves, arácnidos, lagartos, sapos, y otros artrópodos como los escarabajos y otras hormigas. Sigue leyendo y conoce más sobre estos curiosos organismos.

¿Las hormigas son un buen alimento?

Resulta sorprendente conocer que las hormigas son un alimento muy nutritivo:

  • Estudios han mostrado que, en relación con su volumen, los insectos presentan un 32 % más de proteínas que la carne.
  • Son una fuente de fibra: las estructuras rígidas de sus cuerpos aportan fibra y micronutrientes que promueven la movilidad digestiva y fortalecen la regeneración del tejido y de la microbiota intestinal.

Por ello, no es de extrañar que muchos animales hayan hecho de estos invertebrados su manjar predilecto.

La mirmecofagia

Traducido del griego, la palabra mirmecofagia significa literalmente “comer hormigas”. Sin embargo, aunque las termitas no son hormigas, esta denominación se extiende a los comedores de termitas. Esto se debe a que los hábitos de vida entre los animales que comen hormigas y los que se alimentan de termitas son similares. Pero, más importante, las adaptaciones requeridas para su consumo de hormigas y termitas son análogas.

Hormiguero en ambiente natural.
Las hormigas y termitas son una importante fuente de proteínas de fácil acceso.

Un ejemplo de evolución convergente

En los mamíferos, las especies mirmecófagas han desarrollado una serie de adaptaciones que les facilitan la captura de las hormigas. Resulta interesante conocer que animales de diferentes grupos taxonómicos han desarrollado estas adaptaciones, incluso a pesar de no estar relacionados de manera directa. Esto se ve, por lo menos, en cinco grupos o linajes independientes:

La familia de los equidnas (monotremas):

Son conocidos por ser los únicos mamíferos que ponen huevos. Los equidnas son similares en apariencia a los erizos, salvando las distancias, ya que presentan púas de gran tamaño. Habitan en las islas de Nueva Guinea, Salawati, Australia, Tasmania y otras islas menores próximas a las costas de estas.

La familia de los mirmecóbidos (dasiuromorfos):

Esta familia posee una especie única, el numbat (Myrmecobius fasciatus). Este mamífero hormiguero marsupial se encuentra solo en algunas zonas remotas del suroeste australiano. Es el animal estatal de Australia Occidental.

La familia de los mánidos (folidotos):

Este es un orden de mamíferos placentarios cubiertos de grande escamas, conocidos popularmente como pangolines. El orden contiene ocho especies vivas y habitan en las regiones tropicales de África y Asia.

La familia de los oricteropódidos (tubulidentados):

También posee una sola especie viviente, el cerdo hormiguero (Orycteropus afer). Estos son mamíferos placentarios muy primitivos, parientes de los tenrecs, elefantes y damanes. Están ampliamente distribuidos por el África subsahariana.

El suborden de los vermilinguos (pilosos):

Son los conocidos como osos hormigueros. Son nativos de América Central y del norte y centro de Sudamérica; incluye dos familias, Cyclopedidae (1 especie) y Myrmecophagidae (3 especies):

  • Hormiguero pigmeo o sedoso (Cyclopes didactylus)
  • Oso hormiguero (Tamandua mexicana)
  • El Oso melero u oso hormiguero amazónico (Tamandua tetradactyla)
  • Oso hormiguero gigante (Myrmecophaga tridactyla)

Adaptaciones de los animales que comen hormigas

Todas las especies mirmecófagas muestran una serie de adaptaciones que les facilitan la captura de hormigas y termitas:

  • La primera es la reducción o la pérdida de los dientes como consecuencia de la adopción de una dieta a base de presas blandas.
  • La segunda es la adaptación bucal, basada en el alargamiento del hocico y de una lengua delgada y pegajosa. Esta adaptación incluye la presencia de grandes glándulas salivales.
  • Adicionalmente, presentan unas garras fuertes que les sirven para excavar los hormigueros y termiteros.

La lengua, esencial en los mirmecófagos

Si consideramos que un oso hormiguero gigante debe ingerir unas 35000 hormigas o termitas cada día, podemos imaginar que debe tener una estrategia altamente efectiva. Así es, pues su lengua tiene una organización muy peculiar de tejidos musculares y neurovasculares, que difiere del patrón habitual de los demás mamíferos.

Estas características le permite un manejo extraordinario de su lengua, de hecho, puede moverla muy rápidamente, hasta 160 veces por minuto. Además, está cubierta con miles de pequeños ganchos llamados papilas filiformes, las cuales le sirven para mantener a los insectos unidos con grandes cantidades de saliva.

Un ejemplar de equidna en la naturaleza.

¿Están amenazados por su forma de vida los animales que comen hormigas?

Indudablemente. Una de las principales amenazas que enfrentan los animales que comen hormigas, es la pérdida de sus hábitats y el declive en la población de estos importantísimos insectos en la cadena trófica. Normalmente, esta pérdida de biodiversidad surge a causa de incendios y deforestación.

Nota final

Los animales que comen hormigas son un ejemplo de diferentes linajes que logran las mismas adaptaciones morfológicas y funcionales a través de distintas vías evolutivas. Este hallazgo no es del todo sorprendente, pues se conoce que los mamíferos primitivos fueron al principio insectívoros.

Bibliografía

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