Pastor alemán negro: todo lo que no sabías de esta raza

La primera imagen que nos llega al cerebro al hablar del pastor alemán es la de un perro fuerte y atento, con un pelaje negro y pardo. Pues bien, vamos a descubrirte a una variante de esta maravillosa raza: el pastor alemán negro. Si quieres descubrir más sobre él, no te pierdas el siguiente artículo.

Historia del pastor alemán negro

El origen de estos animales, como ya habrás imaginado, está ligado a la historia del pastor alemán. Hay que decir que la trayectoria de esta raza es relativamente corta, ya que los primeros registros de la variante datan de finales del siglo XIX, de 1899 concretamente.

El carácter y las características de esta raza los hizo los candidatos idóneos para ser utilizados como perros de pastoreo y guardianes en las zonas montañosas de Alemania. Con el paso de los años se ‘oficializó’ la raza, cuyo uso se extendió en la Segunda Guerra Mundial. En la actualidad, desempeñan labores de apoyo a las fuerzas de seguridad, así como para dar soporte a personas con discapacidad.

La diferencia está en los genes

Pero, ¿cuál es la historia biológica del pastor alemán negro? Como no podía ser de otra manera, la genética y la herencia son las claves de este enigma, concretamente lo que en biología se conoce como gen recesivo. Las porciones de ADN que explican esta variación cromática en su mayoría son las siguientes:

• Agouti: conocido como A-Locus, este gen controla la distribución del pigmento negro y del rojo/amarillo/crema. El alelo recesivo que nos interesa (la variante del gen) se conoce como “a”.
• Gen extensión: se conoce como E-locus y tiene 3 variantes posibles.

Dicho de forma rápida y sencilla, un pastor alemán negro tendrá ambos alelos recesivos (a) para el gen agouti (a/a). El E-locus también tiene al menos una copia específica, pero no es de tanto interés e indagar en cuestiones genéticas resulta bastante complejo. De todo este ámbito, nos interesa saber que ambos padres deben ser negros (recesivos en el gen Agouti) para dar lugar a un cachorro de este color.

Todos los pastores alemanes presentan genes que codifican para tonalidades negras, de ahí que este tono esté presente en su pelaje. De todas maneras, aunque nazcan negros, los ejemplares de las variantes normales pierden este color completo a los 8 meses de edad. Por otro lado, los pastores negros permanecen  así durante toda su vida.

Por esta razón, un cachorro de pastor alemán que nazca marrón o blanco nunca se volverá negro completamente en su etapa adulta. Debido a su exclusividad, los ejemplares que nos atañen suelen ser bastante caros. 

Características generales

A nivel general, se puede decir que estos animales siguen el canon típico de la raza de pastor alemán. Poseen una forma general robusta y alargada, con una espalda de gran firmeza y musculatura. Son animales relativamente grandes, con un peso que varía entre los 30-47 kilogramos para los machos y 25-35 kilos en las hembras.

Su altura máxima ronda los 65 centímetros en los machos y 60 centímetros en el caso de las hembras, lo que los hace ligeramente más grandes que los pastores alemanes comunes. La cabeza, proporcionada con respecto al cuerpo, tiene forma de cuña y alberga unos ojos almendrados de tamaño medio. Las orejas, características de esta raza, son puntiagudas, erectas y siempre están hacia adelante.

Como ya hemos comentado, el pelo de estos animales es de color negro uniforme, con algunas excepciones. El manto suele estar compuesto por pelo corto, si bien es verdad que existen algunas variantes (poco comunes) de pelo largo. Su capa de manto es doble en todos los casos, como ocurre en el pastor alemán normal.

Diferencias con el pastor alemán común

Aunque el pastor alemán negro siga cumpliendo los estándares típicos del pastor alemán al uso, reporta ciertas diferencias físicas esenciales con respecto a él. Las más importantes son las siguientes:

1. El pastor alemán típico presenta una espalda negra y un tono crema en la cabeza y los laterales, terminando con un blanco tintado en la barriga. Por otro lado, la variante que aquí nos atañe es completamente negra.
2. Aunque ambos canes son musculosos y atléticos, los pastores animales negros suelen tener una espalda algo más recta que los normales.
3. Como hemos dicho en líneas previas, el pastor alemán negro tiende a ser un poco más grande.
4. Ambos perros tienen una doble capa de pelo. De todas formas, el pastor alemán negro puede presentar vellos un poco más largos y densos que su predecesor. Además, también es común que porte faldillas y pelos más largos en el lomo, las orejas o la cola.

Comportamiento y cuidados del pastor alemán negro

Su tamaño y su porte puede llevarnos a error, con la falsa idea de que se trata de una raza agresiva. Pero la realidad es que nos encontramos ante un animal tranquilo, extremadamente equilibrado y nada agresivo. Por lo general, es bastante sociable y no tiene miedo de conocer gente nueva.

Destaca también su sentido de la lealtad. Esto, combinado con una capacidad para estar siempre alerta, los convierte en excelentes perros guardianes y protectores. Pero para que podamos disfrutar de nuestro perro al máximo nivel, es importante comprometernos con él y darle una educación de calidad desde una edad temprana.

Es muy importante que el can socialice con otras personas, perros y animales. Es especialmente vital entre la semana 6 y 8, momento en el que se forja su capacidad de interacción con el medio. 

Ejercicio físico

En cuanto a los cuidados, quizá el más crucial sea el ejercicio físico diario. Debido a su naturaleza trabajadora, es aconsejable que los paseos diarios sean largos. Si tenemos oportunidad, dejarlos correr al aire libre les sentará muy bien. Al igual que con el resto de razas, debemos llevar un control sobre su dieta y cuidar su pelaje mediante el cepillado.

De media, un pastor alemán deberá realizar de 1 a 3 horas de ejercicio físico moderado para estar tranquilo dentro de casa. Por ello, se hará necesario sacarlo a pasear mínimo 3 veces al día y dejar que corra y juegue a placer en esos momentos.

Alimentación

Como en cualquier perro de gran tamaño, es muy relevante que el pastor alemán negro reciba la cantidad de calorías que requiere para crecer. Por ello, se recomienda darles a los cachorros de esta variante un total de 4 comidas al día. En la edad adulta, estos canes requieren 1,19 gramos de proteína y 0,59 gramos de grasa por cada 0,5 kilos de peso (1 libra). Ten en cuenta los siguientes valores:

• Machos: necesitan consumir de 2000 a 3000 calorías diarias cuando son cachorros y unas 1800 calorías cuando son adultos.
• Hembras: de 1700 a 2500 calorías diarias de cachorros y unas 500 calorías cuando son adultas.

Salud

Aunque presente una tonalidad diferente a la variante original, cabe destacar que el pastor alemán negro no tiene propensión a padecer ninguna condición de salud específica de él. De todas formas, sí que hereda ciertos padecimientos de la raza primigenia de la que proviene.

El pastor alemán negro es propenso a contraer enfermedades como el moquillo o a sufrir la temida displasia de cadera. También se reporta cierta proclividad a experimentar glaucoma, dermatitis y displasia de codo. Por eso, es importante que realicemos las revisiones veterinarias convenientes. De esta manera, tanto nosotros como él disfrutaremos de una vida saludable y en compañía.

Se recomienda llevar a este can al veterinario mínimo 2 veces al año en su estadio adulto aunque todo esté aparentemente bien. 

El pastor alemán negro es un can precioso fruto de una distribución genética específica. Es tan leal y enérgico como los ejemplares de los que proviene, así que no te arrepentirás si te haces con uno de ellos.