Características de los peces japoneses

La acuicultura es una técnica ancestral que tiene sus orígenes en Asia y gracias a ella se ha podido domesticar por primera vez a varias especies de peces. En un principio este método era utilizado con fines de producción y consumo, pero pronto cambió para criar organismos con colores hermosos. Gracias a esto, algunos peces japoneses son famosos, pues sus espléndidas características llaman la atención.

Aunque los peces a los que se les denomina japoneses no son originarios de Japón, se conocen así porque en este país se comenzó su uso ornamental. En otras palabras, el cruce selectivo para obtener los colores típicos de estos organismos ocurrió gracias a los japoneses. Sigue leyendo y conoce más acerca de las características de estos hermosos peces.

Características de los peces japoneses

Los peces japoneses se han convertido en la insignia de dicho país, pues se les suele reconocer por la cantidad de variedades que presentan. Estos animales fueron utilizados como alimento en sus inicios, pues en esta región eran escasos los recursos de origen animal. Conforme pasó el tiempo, algunos criadores se dieron cuenta de sus colores hermosos y comenzaron a cruzarlos de manera selectiva.

En específico, los peces que son denominados como japoneses son la carpa koi y el pez dorado. Ambos organismos pertenecen al mismo grupo de animales (Cyprinidae), los cuales están muy relacionados con la carpa común (Cyprinus carpio). Estos ejemplares comparten características distintivas que confirman su parentesco. Algunas de ellas son las siguientes:

1. Gran resistencia al ambiente: este grupo exhibe una gran resistencia a diferentes temperaturas, condiciones y parámetros químicos del agua. Por esta razón, los peces japoneses suelen ser tomados como una excelente mascota o un organismo para producción.
2. Cuerpo oval alargado: por lo común, estos peces exhiben un cuerpo ovalado que se alarga conforme crecen. En el caso del pez koi se observa un poco más ancho, mientras que los ejemplares del pez dorado son más planos.
3. Cuerpo de tallas grandas: los ejemplares pueden alcanzar medidas de hasta 80 o 90 centímetros de longitud. Esta característica no se suele tomar en cuenta, pues el crecimiento de cada individuo depende del tamaño que tenga su acuario o estanque.
4. Colores brillosos y diversos: gracias a la domesticación y el cruce selectivo, existe una gran diversidad de colores y formas en los peces japoneses.
5. Escamas muy evidentes: al igual que sucede con la carpa común, las formas ornamentales de los peces japoneses exhiben escamas que son muy evidentes. Esta característica confirma la similitud física que tienen con sus parientes más cercanos (carpas).

Como se mencionaba al principio, Japón no es el país originario de los peces koi ni del pez dorado. A pesar de esto, se les denomina “japoneses” porque en este lugar se crearon las principales variantes que existen en el mundo.

El pez koi (Cyprinus carpio koi)

Estos ejemplares son una variedad de la carpa común, la cual tiene su origen en Asia y Europa. En un principio, la carpa era criada como un alimento para la población, puesto que era fácil criarla y mantenerla. Por su parte, los japoneses aprovechaban los cultivos de arroz para producir estos peces, pues las zonas inundadas servían a modo de estanques.

Conforme pasó el tiempo, los agricultores se dieron cuenta de que algunos peces tenían una coloración más brillante, lo cual los convertía en presa fácil de depredadores. Por esta razón, comenzaron a retirarlos y apartarlos del resto, puesto que de otra forma perdían sus suministros. En algún punto, los colores del animal comenzaron a llamar la atención, por lo que se inició la cría selectiva para transformarlo en el pez koi.

Características y variedades del pez koi

El pez koi es un organismo bastante largo y pesado, pues suele sobrepasar los 60 centímetros de longitud con una masa de 40 kilogramos. Estos rasgos provocan que sea muy difícil tenerlo en acuarios reducidos, por lo que se suelen utilizar estanques al aire libre para criarlos. Gracias a que resisten bien a diferentes temperaturas y condiciones del agua, no es necesario un cuidado minucioso de su hábitat.

En cuanto a su coloración, los diversos cruces selectivos han propiciado que aparezcan muchas variantes, por lo que existen diversos tipos de peces koi en la actualidad. Entre los más comunes tenemos a los siguientes:

• Kawarimon: son ejemplares con colores no metálicos que tienen patrones diferentes. Pueden exhibir un solo tono o más de uno, por lo que tienen una enorme variedad.
• Bekko: los individuos de este tipo presentan una piel de color rojo, blanco o naranja con varias manchas negras.
• Goshiki: estos ejemplares tienen un cuerpo blanco con un patrón de “rejilla” color negro, lo cual hace que las escamas sean negras en su centro, pero blancas en el borde. Aunado a esto, presentan varias manchas rojas-anaranjadas que brillan bastante.
• Koromo: son producto del cruce de peces koi tipo asagi y kohaku, por lo que mantienen el cuerpo blanco, pero con manchas rojas o negras y escamas bastante evidentes.
• Shusui: exhiben una combinación de colores rojos, azules, negros y blancos, los cuales resaltan su dorso con tonalidades obscuras. Los patrones del color son un poco diferentes entre cada ejemplar, pero suelen respetar la presencia de una cabeza blanca con manchones de colores en el resto del cuerpo.
• Asagi: estos peces cuentan con un patrón de tonos azules y grises en la espalda, mientras que su cabeza tiene una mancha blanca por arriba. Además, tanto las aletas como parte del cuerpo presentan la típica coloración naranja del koi, pero con diferentes patrones o en forma de manchones. Las escamas de este tipo de koi son más evidentes de lo normal.
• Gin-Rin: estos organismos tienen una piel con brillantes colores plateados y dorados, por lo que su forma es myy llamativa.
• Showa: estos individuos exhiben un patrón de manchas grandes color rojo, blanco y negro por todo el cuerpo.
• Tancho: estos ejemplares son bastante peculiares, pues no presentan tantos colores. Se caracterizan por tener una única mancha naranja-rojiza en la cabeza, la cual no suele extenderse al dorso. Por su parte, el cuerpo exhibe una tonalidad plateada o gris uniforme en su totalidad.
• Kohaku: este tipo de koi presenta un cuerpo blanco con manchas rojas muy bien definidas, las cuales suelen tener contornos uniformes y atractivos.

El pez dorado (Carassius auratus)

Los peces dorados tienen una historia diferente, pues al llegar a Japón ya eran peces ornamentales. Previo a la segunda guerra mundial, China mantenía relaciones comerciales estrechas con este país, por lo que era normal que llegaran animales de este tipo. Gracias a esto, muy rápido fueron aceptados por la realeza y la elite de la sociedad, lo cual volvió a la especie popular en la época.

Una vez empezó la segunda guerra mundial, Japón pasó por un periodo de aislamiento, por lo que el comercio se encontraba muy reducido. Esto ocasionó una escasez de peces dorados, lo que propició que aparecieran los primeros criadores en el país. Asimismo, esto permitió que se crearan nuevas variedades únicas en la nación.

A pesar de que China fue el país en donde se domesticó y se originó el pez dorado, la aparición de diferentes variedades fue gracias a Japón. Estos peces se volvieron populares al lograr criar de manera sencilla a la especie, lo que redujo bastante sus costos en el mercado. De esta forma, cuando el comercio se restableció, los peces dorados se volvieron aún más famosos gracias a los japoneses.

Características y variedades de peces dorados

El pez dorado es un organismo que suele ser bastante pequeño, pues su tamaño normal se encuentra entre los 15 y 20 centímetros. A pesar de esto, estos animales pueden alcanzar tamaños más impactantes, pues en hábitats de mayor tamaño logran exhibir tallas de máximo 90 centímetros de longitud.

El cuerpo de este pez es bastante parecido al de una carpa, con la diferencia de que sus aletas están más alargadas y presentan coloraciones fascinantes. Sin embargo, esto depende de la variedad de la que se hable, pues existen distinciones remarcables entre cada una de ellas. A continuación, se listan algunas variedades comunes del pez dorado:

• Burbuja: se caracteriza por llevar dos sacos grandes debajo de sus ojos, los cuales son vesículas con líquidos que parecen burbujas. Además estos peces no exhiben aleta dorsal, pero su cola suele estar un poco más alargada que la de otras variedades.
• Celestial: estos ejemplares se caracterizan por la forma y posición de sus ojos, los cuales parecen protuberancias al lado de su rostro. La coloración de estos organismos puede variar entre amarillo, naranja, rojo y blanco.
• Eggfish: presentan un cuerpo bastante ovalado y sin aleta dorsal, lo que realza su forma peculiar.
• Cometa: es similar a la variedad común, pero con la diferencia de que su cuerpo rojo anaranjado presenta manchas y aletas blancas. Además, sus aletas son más grandes, por lo que simulan una especie de “cola de cometa”.
• Oranda: este tipo de pez dorado se caracteriza por presentar una ornamenta en la cabeza que le da una apariencia redondeada.
• Ryukin: estos organismos presentan unas aletas bien desarrolladas, por lo que se observan casi a forma de velo. Aunado a esto, su dorso parece tener una especie de “joroba” que le otorga un aspecto peculiar.
• Jikin: estos individuos exhiben una cola sin bifurcación, lo cual también se conoce como cola de pavo real. Este tipo de pez dorado presenta una coloración blanca con manchas rojas en algunas partes del cuerpo, lo cual resalta sus escamas.
• Cola de abanico: esta variedad se caracteriza por presentar una aleta caudal (cola) con forma de abanico, mientras que sus demás aletas tienen un crecimiento normal. Por otro lado, su cuerpo parece más redondo que el de otras variedades, con coloraciones intensas de rojo, blanco o naranja.

La invasión de los peces japoneses

Aunque son hermosos, los peces japoneses tienen una gran capacidad para resistir ambientes diversos, lo cual los transforma en potenciales especies invasores. De hecho, el pez dorado ya es considerado una amenaza para la naturaleza, pues su liberación accidental o intencional en otros hábitats ya conforma un problema ecológico.

Recuerda que este tipo de peces no deben ser liberados bajo ningún motivo, pues aunque puedan sobrevivir en el ambiente, esto ocasiona serios problemas a las especies nativas. Si por algún motivo ya no puedes tener a tu mascota contigo, intenta darla en adopción a alguien que pueda cuidarla. La vida de estos pequeños animales depende por completo de sus dueños, por lo que trata siempre de ver por su bienestar.