Los anfibios anuros pasan por un ciclo de vida complejo que los lleva a transformarse por completo para llegar a su fase adulta. En otras palabras, sufren un proceso de metamorfosis, en el que cambian su aspecto de larva y se transforman en las típicas ranas o sapos. Aun así, antes de ello experimentan una forma de renacuajos en la que viven, comen y se comportan diferente a los anuros adultos.
A pesar de su importancia, se les pone poca atención a las larvas de ranas y sapos, pues apenas pasan unas semanas en esta etapa. Debido a su fugacidad, gran parte de su dieta, su comportamiento y sus características son pasados por alto. Por ello, en este articulo te mostramos más sobre su biología. Sigue leyendo y conoce quiénes son, qué comen y algunos datos más sobre los renacuajos.
¿Qué son los renacuajos?
Los renacuajos representan una parte del ciclo de vida de los anfibios anuros. El aspecto de las larvas es muy similar al de un pez pequeño y su cola larga y branquias externas les dan una apariencia distintiva. Dicho estadio es único en los anfibios sin cola (anuros), ya que su grupo hermano (caudados) presenta larvas más parecidas a los adultos.
En otras palabras, estos renacuajos son los que eclosionan después de la incubación del huevo y permanecen en este estado entre 1 y 3 meses en promedio. Durante este tiempo pasan por la metamorfosis, que es una transformación completa desde su aspecto de “pez” hasta la forma de rana o sapo. Dicho proceso es progresivo, por lo que cada estructura va apareciendo poco a poco.
Se podría decir que este ciclo resume años de evolución en unos meses, pues este cambio se asemeja el paso de los seres vivos del agua a la tierra. Si quieres verlo de una forma más simple, el proceso de metamorfosis es similar al que tuvieron que llevar a cabo los peces para dar lugar al resto de vertebrados. Es una de las cualidades más fascinantes de los anfibios.
Esto último es solo una analogía, pues la metamorfosis y la evolución son procesos muy diferentes. El último se expresa tras miles de años de especiación.
¿Qué comen los renacuajos?
El objetivo principal de los renacuajos es crecer lo más rápido posible para alcanzar los requisitos de su metamorfosis. Por esta razón, su dieta debe contener alimentos que sean abundantes dentro del agua. Esto explica por qué son organismos herbívoros, pues las plantas suelen ser unos de los recursos más fáciles de encontrar. Aunado a ello, también pueden alimentarse de sedimento o filtrando el agua al nadar.
Aunque se ha dicho que los renacuajos prefieren comer plantas, la forma en la que lo hacen depende mucho de la estructura de su boca. De hecho, pueden presentar un tipo de dientes muy simples denominados queratodontes, que les sirven para roer las piedras o triturar su comida. Asimismo, dependiendo la dureza que tengan estos “dientes” las larvas son capaces de comer restos animales u otros renacuajos.
Es posible que esto último te cause intriga, pues arriba se mencionaba que eran herbívoros. Sin embargo, en casos extraños los renacuajos son más oportunistas y comen lo que esté disponible en su medio. Al final, lo que más les urge es crecer, puesto que en el agua pueden ser víctimas de muchos depredadores.
Cuanto antes se convierta en rana o sapo, antes estará fuera de su etapa más delicada el renacuajo.
¿Qué hago si tengo un renacuajo en cautiverio?
Debido a que las ranas y algunos sapos se han convertido en mascotas populares, es probable que en algún momento pienses en reproducirlos. Por lo cual, te preguntarás qué comen los renacuajos en cautiverio o cuáles son las medidas necesarias para cuidarlos.
Antes que nada, no está de más recordar que la ley de algunos países no permite la colecta de huevos, renacuajos o ejemplares de ciertas ranas y sapos. Esto significa que debes tener cuidado con la compra, la venta y la captura de especies protegidas que no estén permitidas en tu localidad. Aunado a ello, ten en mente que son seres vivos y no objetos de prueba, así que asegúrate de que tendrán lo necesario para sobrevivir.
Comida de los renacuajos en cautiverio
Una vez los renacuajos están instalados y acoplados a su hábitat artificial, deberás alimentarlos con algún tipo de vegetación. Tienen especial predilección por el género Elodea, aunque si logras conseguir algas de otro tipo para complementar sería mucho mejor. La lechuga y la espinaca frescas sirven bastante bien, solo recuerda lavarlas muy bien para evitar enfermedades.
También es posible usar pellets comerciales para peces cuya composición sea en su mayoría algas como espirulina. Evítalos si las características del alimento procesado no se cumplen, ya que muchas variantes utilizan materia de origen animal, lo que puede perjudicarlos. Todo lo anterior va muy ligado a los hábitos herbívoros de los renacuajos, pues como recordarás esta es su principal forma de alimentarse.
¿Cuántas veces al día comen los renacuajos?
En cuanto a cantidad, no existe una regla. Esto se debe a que dependerá mucho de la disponibilidad de nutrientes que tenga cada especie en su hábitat natural. Sin embargo, la recomendación general es que se aporten de 2 a 3 comidas al día en muy poca cantidad. De esta forma, lograrás observar cuanta materia se queda sin consumir y podrás ajustar la dosis para reducir los desperdicios.
Aunque de manera normal se suela triturar el alimentos esto no es necesario, pero te permite tener un mejor control sobre las cantidades. Conforme crezcan y aparezcan sus extremidades, los renacuajos comenzarán a consumir carne, por lo que puedes continuar con los pellets o empezar con una dieta insectívora. En esta etapa es mejor que uses larvas, lombrices u algunos microartrópodos que complementen su nutrición.
En su fase adulta, todas las ranas y sapos son insectívoros.
Si ves un grupo de renacuajos en un arroyo puede que te sientas tentado a llevártelos a casa. Sin embargo, su cuidado no es un juego ni debe tomarse a la ligera, puesto que se habla de un ser vivo, no de un juguete. Todas las especies encierran una belleza particular dentro de sí que se puede apreciar desde el ambiente natural.
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