El raquitismo en gatos es una patología que afecta la estabilidad ósea. Esta enfermedad proviene de un déficit nutricional, que termina provocando la descalcificación de los huesos del animal. Si no se trata, el raquitismo deriva en el ablandamiento de los huesos y malformaciones.
Actualmente, esta condición ya no es una enfermedad tan común, gracias a los cuidados en la alimentación de las mascotas. Aun así, es necesario poner atención a posibles señales de alerta que nos ayuden a prevenir y mantener la salud del animal de la casa. Conoce más a fondo el raquitismo felino y sus características en este artículo.
¿Qué es el raquitismo felino?
Se conoce como raquitismo a la patología que ablanda los huesos y provoca malformaciones oseas. Esto surge como consecuencia de un déficit de vitamina D, fosforo o incluso por herencia. La falta de este micronutriente le impide al intestino absorber el calcio de los alimentos, lo cual desemboca en la falta de mineralización del hueso y del cartílago en crecimiento.
La vitamina D es una prohormona que permite el aprovechamiento del calcio. Al encontrarse reducida, interrumpe el metabolismo que permite calcificar el hueso. Este problema se presenta más en gatos pequeños que en los adultos.
¿Cuáles son las causas del raquitismo en gatos?
La causa principal del raquitismo en gatos es la falta de vitamina D en el organismo del animal. Esto se genera a partir de una cadena de sucesos, con un desenlace en el que el metabolismo del felino no es capaz de “endurecer” —calcificar— los huesos.
En primer lugar, esto provoca que exista un mal aprovechamiento del calcio en el intestino. Puesto que el cuerpo detecta una falta grave de calcio, el organismo se ve obligado a sacarlo de su gran reservorio: los huesos. Dicho de otra forma, el organismo necesita el calcio pero no lo puede obtener del alimento, así que el sistema óseo se encarga de cubrir la demanda.
Aunque sus causas pueden ser varias, podemos agruparlas en 3 principales:
- Deficiencia nutricional: falta de vitamina D en la dieta del felino.
- Heredable: resistencia a la vitamina D o interrupción de su metabolismo.
- Derivado de otra enfermedad: como consecuencia de patologías alternas que provoquen el déficit de la vitamina, como por ejemplo parasitismo, inflamación intestinal, etc.
Tipos de raquitismo
De forma simple, se puede clasificar el raquitismo en 3 tipos:
- Raquitismo carencial: que se refiere a un déficit de la Vitamina D, por causas externas al organismo.
- Raquitismo primario: incluye enfermedades congénitas, en las que existe resistencia a metabolitos de la vitamina D.
- Raquitismo secundario: se refiere a que el raquitismo es un efecto secundario de otra enfermedad, como insuficiencia renal, problemas oncológicos, déficit hipofosfatémico hereditario, etc.
Síntomas del raquitismo en gatos
Aunque es poco conocido, es necesario aclarar que el calcio no solo se usa para fortalecer los huesos, sino que también es un elemento común dentro de las células. En el entorno celular, este mineral es de ayuda para la contracción muscular, la coagulación, el funcionamiento del sistema nervioso, la síntesis de enzimas y otras muchas cosas más.
Debido a esto, la sintomatología del raquitismo puede ser diversa. Aun así, se pueden encontrar varios de los siguientes signos clínicos en félidos:
- Huesos de las extremidades deformados.
- Debilidad física.
- Agrandamiento o reducción del tamaño de los huesos.
- Caminar del felino comprometido (cojeo).
- Emplantillamiento: una deformación de las patas, garra de oso.
- Incurvación de las diáfisis o miembros en X.
Diagnóstico de la enfermedad
En cuanto al diagnostico, es necesario que lo haga un profesional veterinario. Aunque los síntomas pueden ser concisos, se requiere que el medico valore la gravedad de la enfermedad. Por ello, se realizara un examen físico para detectar las malformaciones o alteraciones que presente. Además, todo esto se puede complementar con exámenes radiográficos y sanguíneos, para comprender el estado de la salud del felino.
Diagnóstico radiográfico
Por medio de este examen, se realiza la toma de fotografías a los huesos. Con esto se pretende detectar cualquier manifestación de la enfermedad, desde la reducción de los huesos, pasando por el engrosamientos o malformaciones, hasta el agrandamiento del cartílago de crecimiento.
Este estudio se aprecia mejor en el cúbito y en el radio, a nivel de las epífisis.
Bioquímica sanguínea
En cuanto a la toma de sangre, los criterios para determinar el raquitismo son los siguientes:
- La calcemia es baja.
- El fosforo es alto y la relación “Calcio/fosforo” es bastante menor que 1.
- La fosfatasa alcalina es alta.
- Existe anemia —el 80 % de los casos la presentan—.
- La concentración de vitamina D o de sus metabolitos es baja.
Tratamiento del raquitismo en los gatos
El tratamiento suele ser sencillo y eficaz y busca resarcir la falta de vitamina D en el sistema. Para ello, se utilizan suplementos alimenticios que mejoren los niveles de ambos compuestos —tanto de la vitamina como del calcio—. Además, el metabolismo de la vitamina D necesita de rayos solares para su procesamiento, por lo que también es necesario la exposición al sol.
Es probable que el veterinario recomiende realizar un proceso adicional de desparasitación. Con esto, se busca eliminar cualquier otro factor que esté ocasionando el problema nutricional. También se debe considerar el tratamiento del dolor y de las malformaciones oseas, ya que son problemas derivados del raquitismo.
Recuerda que cualquier medicamento o tratamiento solo debe ser proporcionado por un profesional. Ellos son los únicos capacitados para darle la atención adecuada a tu mascota.
Debes poner atención a la alimentación de tu mascota en todo momento. A pesar de que el raquitismo ya no es una enfermedad común, no querrás provocar una visita innecesaria al veterinario. Cuídalos, cuídate y prevén toda enfermedad en tu entorno doméstico.
Bibliografía
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