7 animales con caparazón

La naturaleza ha inspirado a los humanos para crear muchos de sus implementos o diseños —y las armaduras son un gran ejemplo de ello—. Así como los animales con caparazón utilizan estructuras externas duras para disuadir a sus depredadores, las armaduras para humanos fueron creadas con fines de seguridad y protección. 

En la naturaleza, toda adaptación tiene un motor subyacente: la persistencia en el tiempo y la reproducción. Si quieres saber más sobre algunas fuentes de esa inspiración en lo que a defensa se refiere, aquí puedes conocer 7 animales con caparazón y sus características. 

Animales con caparazón: el exoesqueleto

El exoesqueleto es un esqueleto externo que cubre, sostiene y protege el cuerpo de aquellos seres que lo poseen. Por ello, todo animal con una capa dura que resguarda a los tejidos blandos tendrá un caparazón, independientemente de su forma o composición química. 

Los animales con exoesqueleto disfrutan de muchos beneficios gracias a él. El más evidente es la protección contra los depredadores, pero también funciona como soporte para su respiración, como sostén para su aparato muscular y como barrera contra la desecación en algunos de ellos.

Además, este caparazón no solo cubre la superficie del cuerpo. Cuentan biólogos expertos que también se extiende interiormente, penetra los extremos del tubo digestivo y en los insectos tapiza las tráqueas. Es imposible separar a un ser vivo funcional de su exoesqueleto de forma artificial sin acabar con su vida. 

Conchas y escamas

Por otra parte, todos los animales tienen diferentes tipos de coberturas en su cuerpo y las conchas y las escamas también cuentan como caparazón. Los animales como los caracoles poseen conchas y tanto los reptiles como los peces tienen escamas, una capa de piel dura parecida a tus uñas, las cuales los protegen de los depredadores y del clima.

7 Animales con caparazón

El exoesqueleto se puede encontrar en todos los animales artrópodos y grupos relacionados. Sin embargo, no es exclusivo de estos. Conoce aquí 7 animales con caparazón.

1. El armadillo

Su caparazón no es a prueba de balas, pues si un animal alcanza al armadillo, puede romper su estructura protectora con facilidad, según expertos de National Geographic. De todas formas, este caparazón sí lo protege de arbustos espinosos, que a la vez le sirven de refugio ante depredadores.

El caparazón de los armadillos está formado por unas placas óseas llamadas osteodermos, los cuales crecen en la piel y están levemente conectados, para permitir flexibilidad. La familia a la que pertenecen estos animales (Dasypodidae) cuenta con 9 géneros distintos, que a su vez engloban 7 especies diferentes.

Algunos armadillos practican la poliembrionía. De un solo óvulo fecundado, pueden salir varias crías, genéticamente idénticas entre ellas.

2. El pangolín

Este peculiar animal es confundido frecuentemente como un reptil, pero en realidad es un mamífero lleno de escamas. Las afiladas escamas de su cola le sirven al pangolín para atacar. Si la amenaza persiste y se siente en peligro, se enrolla como una bola, para dejar expuestas solo sus resistentes escamas. 

También se le conoce como oso hormiguero escamoso, y según WWF, el pangolín está siendo cazado cada vez más por su carne y los fantasiosos ‘poderes curativos’ de sus escamas, principalmente en Asia y África. Por ello, algunas especies de pangolín se encuentran en peligro crítico en la actualidad.

3. Las tortugas

Las tortugas son reptiles que presentan un cuerpo encerrado en un caparazón —en la parte superior— y un plastrón —en la parte inferior—, unas estructuras unidas entre sí a lo largo del cuerpo, formando una especie de caja.

El caparazón de los quelonios está compuesto por hueso y cartílago, y a diferencia de lo que puedes ver en algunas caricaturas, las tortugas no pueden salir de su caparazón. Esta estructura de protección está fusionada con el resto de su cuerpo, afirman estudios.

El estado del caparazón es uno de los mejores indicativos de salud de cualquier tortuga.

4. El escarabajo sagrado

Dentro de los animales con caparazón, puedes encontrar este singular escarabajo con una gran historia. También se conoce como ‘escarabajo pelotero’ —por su capacidad para arrastrar heces en forma de bola— y en el antiguo Egipto se consideraba como sagrado. Era el símbolo del renacer y de la vida eterna, afirman expertos. 

En la parte superior de su cuerpo, este invertebrado cuenta con unas protuberancias puntiagudas, las cuales se dice que representan los rayos del sol. Su alimentación también es muy particular, pues estos escarabajos se nutren del estiércol del ganado.

5. Los caracoles

Afirman estudios que la concha o caparazón de los caracoles es una de las partes más importantes e indispensables de su anatomía. Es una estructura dura y firme, que aloja el conjunto de sus órganos internos, le permite al invertebrado conservar su humedad, lo protege contra depredadores y le sirve de hogar para descansar mientras hiberna.

6. Los cangrejos

Si entendemos como ‘caparazón’ todo revestimiento que recubre los tejidos blandos, los crustáceos son verdaderos caballeros andantes sin ninguna fisura en su armadura. Los cangrejos son duros y presentan un exoesqueleto de quitina, que los mantiene a salvo frente los ataques de depredadores —tanto marinos como terrestres—

7. Los escorpiones: animales con un caparazón inesperado

A pequeña escala, pocas cosas son más intimidantes que un escorpión, con su aguijón listo para la batalla y su exoesqueleto duro como método de defensa principal. Estos arácnidos lo tienen todo: atacan y se protegen a partes iguales. De todas formas, no siempre son máquinas de matar.

Como todos los invertebrados con exoesqueletos, en ciertos puntos los escorpiones se retiran a sus refugios, pues tienen que pasar por un proceso de muda. Esto significa que deben deshacerse de su caparazón por completo y dejar paso al que crece bajo él, con el fin de aumentar de tamaño. En esta etapa, son seres blandos y muy delicados.

Como puedes ver, los caparazones son útiles e indispensables para aquellos animales que los poseen. Varios de los seres vivos aquí citados son víctimas de la caza debido a sus caparazones. Apreciarlos y respetarlos es también indispensables para protegerlos: por desgracia, su armadura no los ha salvado de los ataques del hombre.