Se puede entender que un perro se vuelva loco cuando ve a una perra en celo. Pero de ahí a montar todo lo que se le cruza en su camino, va un trecho. Y es que los peludos parecen vivir obsesionados por la monta sin importar si es un cojín, un muñeco, una almohada o incluso nuestra pierna. ¿Por qué esa obsesión? ¿Se puede evitar?
En este artículo contestaremos a esas y otras preguntas. Además, te contamos de dónde viene esta “fea” costumbre que tienen nuestros perros.
Empiezan a montar desde cachorros
Como sabes, los cachorros, cuando nacen, deben pasar al menos dos meses con su mamá y sus hermanos. Desde ese mismo momento, utilizan este gesto como modo de comunicación.
Montan a sus hermanos para comunicarse o jugar con ellos. No obstante, esta es una conducta que debería ir desapareciendo con los años. No obstante, se podría dar el caso ante situaciones puntuales de extrema alegría.
Por otro lado, en ocasiones, esta puede ser una conducta compulsiva en un perro adulto que denotaría una postura dominante. Si lo hace con tus piernas, por ejemplo, como comentamos al principio, puede que el animal quiera ser superior a ti.
En estos caso habrá que hacerle entender cuál es tu posición y su posición en el seno familiar.
Casos no comunes de monta
Aunque es raro, puede pasar que haya perros que no se interesen en perritas pero estén obsesionados con montar objetos o tus piernas.
También podría darse el caso de que haya perras que no quieran dejarse montar por diversos problemas hormonales.
No se han conocido casos de perros que hayan mostrado interés en congéneres del mismo sexo, aunque podría darse la situación de que un can suba sobre otro como forma de decir “yo soy el líder”.
Para los perros, ser parte de una manada es necesario. Pero muchos también quieren ser líder de esta, por lo que una buena educación al respecto evitará estos problemas en casa y con otros canes.
Cómo evitar que tu perro quiera montar a todas horas
Para evitar que tu perro viva obsesionado con la monta, hay varias cosas que se pueden hacer. Son las siguientes:
- Esterilizar a tu perro. La esterilización es una manera de tranquilizar a tu perro en este aspecto, pero debes saber que no es una garantía 100% segura. No es un consejo con el que estamos de acuerdo y pensamos que cada persona debe decidir si quiere o no esterilizar a su peludo, pero se ha demostrado que los canes que han sido castrados han reducido enormemente, casi del todo, sus deseos sexuales.
- Habla con tu veterinario. La esterilización no es la única medida médica que tienes disponible. A veces el perro simplemente podría estar estresado o tener el hábito. El veterinario es quien mejor podrá decirte de dónde viene la causa y qué es lo mejor que se puede hacer para erradicar el problema.
- Entrenamiento. Hay diversos tipos de entrenamiento que pueden ser útiles para evitar que tu perro quiera montar todo el tiempo. Decir “NO” en un tono fuerte y firme, aun cuando tu can crea que estás enojado, es útil para que pare su conducta. No esperes a que lo haga durante un rato, sencillamente di NO en cuanto lo veas.
- Sepárate de él. Por muy gracioso que te pueda parecer que tu perro monte tu pierna, no debes permitirlo. Sepárate de él y di NO en cuanto veas que ha comenzado a hacerlo.
Si sigues estos consejos, con paciencia y cariño podrás conseguir modificar la conducta de tu mascota y pronto dejará de montar objetos. Recuerda también que la esterilización debe ser el último recurso.