Todo sobre el tiburón blanco

El tiburón blanco presenta un agudo sentido del olfato, capaz de detectar una gota de sangre en 100 litros de agua. Aunque existe registro de ataques a humanos, se cree que se debe a la confusión con sus presas.

Tiburón blanco salta hacia la superficie.

En la actualidad, existe un temible depredador que se encuentra en la cima de las cadenas alimentarias marinas. Se trata de nada más y nada menos que del tiburón blanco: el rey de los océanos. Un pez de gran tamaño, fuerza y agilidad para nadar con gran rapidez. Además, tiene numerosos dientes aserrados como herramienta de ataque, para completar sus habilidades de cazador.

Su nombre científico es Carcharodon carcharias y pertenece a la familia Lamnidae, junto a otras cuatro especies de tiburones llamados marrajos. Si bien presenta fama de agresivo y atacar a los humanos, esto no es del todo cierto. Para desmitificar algunas creencias, te aclaramos los detalles sobre su biología y comportamiento. ¡Entérate de los últimos descubrimientos sobre su estilo de vida!

¿Dónde vive el tiburón blanco?

Ficha taxonómica sobre el tiburón blanco.

Como nos dice la lógica y lo afirmamos en los párrafos anteriores, esta especie habita en los océanos. De hecho, presenta un amplio rango geográfico, ya que se ubica desde los 60° de latitud norte hasta los 60° de latitud sur.

Se encuentra tanto en océanos templados como en los tropicales, en zonas costeras, estuarios y mar abierto, hasta una profundidad de 1200 metros. Con todo, tiene preferencia por las aguas templadas continentales.

Asimismo, realiza movimientos de grandes distancias entre los océanos. Un ejemplo de ello, son los recorridos que realiza en el Pacífico Oriental, desde la costa de California hasta el oeste de la península de Baja California y las islas Hawái, como lo mencionan en la revista Marine Biology.

Características físicas de Carcharodon carcharias

Tiburón blanco muestra sus dientes.
El tiburón blanco (Carcharodon carcharias) puede tener hasta 300 dientes, que son afilados, aserrados y triangulares. Créditos: RamonCarretero/iStockphoto.

El Carcharodon carcharias es un animal con un cuerpo aerodinámico, ideal para permitir desplazamientos a gran velocidad. Además, sus aletas (una caudal, dos dorsales y pectorales) contribuyen con sus movimientos.

Su boca es grande y puede medir hasta 120 centímetros y está dotada de numerosos dientes aserrados y triangulares. Por su parte, su hocico es estrecho y algo puntiagudo.

Los tiburones blancos cuentan con hasta 300 dientes en sus bocas, dispuestos en varias filas. Además, pueden reemplazarlos durante toda su vida.

Aunque el nombre de tiburón blanco haga pensar que se trata de una criatura con este color de cuerpo, lo cierto es que no es blanco en su totalidad, solo en la región ventral. Por su parte, la zona dorsal es gris y puede variar desde una tonalidad más oscura hasta una clara.

Un aspecto que destaca en este rey de los océanos es su tamaño, que difiere entre los sexos. Así, la hembra es la más grande y alcanza hasta los 6 metros de longitud, mientras que el macho apenas cuenta con 4 metros. La mayoría pesa entre 680 y 1800 kilogramos, aunque hay ejemplares que pueden superar las dos toneladas de peso.

Carcharodon carcharias es uno de los tiburones más grandes del mundo. Entre los escualos que lo superan en tamaño se encuentran el inofensivo tiburón ballena (Rhincodon typus) y el tiburón peregrino (Cetorhinus maximus).

Comportamiento

Por lo general, son animales solitarios. Aunque en ciertas ocasiones pueden estar en parejas o pequeños grupos, en los que se cree que existe alguna forma de jerarquía de dominancia.

Son peces inteligentes, ágiles y pueden realizar saltos impresionantes en la superficie del agua. Además, viven alrededor de 30 años en estado salvaje. Sin embargo, algunas investigaciones hacen referencia a la longevidad extrema del tiburón blanco, pudiéndose extender su esperanza de vida más allá de las tres décadas.

¿Qué come?

El tiburón blanco o Carcharodon carcharias salta fuera del agua para atrapar a una foca.
La dieta del tiburón blanco incluye focas, leones marinos y delfines. Crédito: USO/iStockphoto.

Este ejemplar es un gran depredador que ocupa la cima de las cadenas alimenticias de los océanos. Está dotado de un sentido del olfato muy agudo y la capacidad de detectar a sus presas gracias al campo eléctrico que posee su cuerpo, como el presente en el latido del corazón o en las branquias.

Asimismo, se sabe que los tiburones son cazadores estratégicos e independientes. Sin embargo, permanecen cerca unos de otros, para aprovechar las presas que capturan sus congéneres.

La alimentación del tiburón blanco puede variar de acuerdo con su edad. Así, en estadios juveniles, esta especie prefiere los calamares y las rayas, incluso puede consumir tiburones más pequeños. Por su parte, cuando es adulto, su dieta está compuesta por las siguientes especies marinas:

  • Focas
  • Delfines
  • Leones marinos
  • Cadáveres de ballenas
Otros animales de los que se alimenta son las tortugas, los peces y las aves marinas.

Un estudio publicado en la revista Reviews in Fish Biology and Fisheries detalla que las presas más comunes del tiburón blanco en el Mediterráneo son las mencionadas a continuación:

  • Tortugas bobas (Caretta caretta).
  • Peces, como los atunes (Thunnus spp.) o los espada (Xiphias gladius).
  • Cetáceos, entre ellos el delfín nariz de botella (Tursiops truncatus) y el delfín listado (Stenella coeruleoalba).

¿Es peligroso?

A pesar de que se han registrado ataques de tiburón a los seres humanos —que pueden llegan a ser fatales—, se piensa que no es un comportamiento realizado de manera intencional. Este animal es curioso, lo que puede explicar parte de la estadística.

Asimismo, se cree que tiende a confundir al hombre con algunas de sus presas, por lo que es común que ejecute una única mordida y luego se retire. De todas maneras, recordemos su gran tamaño, la cantidad de dientes en su boca y la fuerza y agilidad que presenta. En consecuencia, un solo ataque que comprometa algún órgano importante puede resultar fatal para la víctima.

En lugares como Australia, se estima que existen hasta un 60 % de encuentros fatales entre estos tiburones y los seres humanos, mientras que en otras localidades, las cifras tienden a ser menores.

Reproducción

Hay poca información sobre el comportamiento de los tiburones, con relación a su reproducción. Entre los datos desconocidos tenemos al proceso de apareamiento y la época en que ocurre. Se considera que existe agresión entre los individuos masculinos, gracias a las cicatrices observadas en su cuerpo. También se sabe que los machos muerden a las hembras durante la cópula.

Se trata de animales vivíparos aplacentarios, con fecundación interna. Sus crías, a temprana edad, se nutren de un líquido secretado por la madre. Luego, llevan a cabo la alimentación de huevos dentro del útero materno (oofagia).

El tiempo de gestación es largo y dura alrededor de 12 meses.

Tras este período, pueden nacer desde 2 hasta 10 crías vivas, que miden un poco más de 1 metro de longitud. Asimismo, no existe cuidado por parte de los padres, ya que los tiburones son independientes desde su nacimiento.

Los tiburones alcanzan la madurez sexual a diferentes edades en los sexos. En los machos, cuando tienen alrededor de 10 años y miden entre 3.5 a 4 metros. Por su parte, en las hembras es más tardía, pues ocurre después de los 12 años, con un tamaño de 4.5 a 5 metros de longitud.

Estado de conservación de Carcharodon carcharias

Son numerosas las especies de tiburones en peligro de extinción. Carcharodon carcharias —a pesar de ser un depredador muy ágil y temidose clasifica como «vulnerable», desde el año 1996, en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, por sus siglas en inglés). Esto se debe a que desde los últimos 159 años su población ha sufrido reducciones de hasta un 30 o casi un 50 %.

En su mayoría, el tiburón experimenta captura incidental en pesquerías costeras de todo del mundo, pero también puede ser víctima de pesquerías pelágicas de alta mar. Asimismo, algunas partes de su cuerpo tienen gran valor en el mercado, como son las aletas y la mandíbula.

En el año 2002 se incluyó en los apéndices I y II de la Convención sobre Especies Migratorias (CMS). Por su parte, en el 2004, se anexó al apéndice II de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas (CITES).

Un depredador valioso para el ecosistema marino

Aunque parezcan animales poco importantes para el entorno, lo cierto es que, gracias a ellos, se controlan las poblaciones de especies que les sirven de presas. Por lo tanto, son cruciales para mantener el equilibrio ecológico en el ecosistema marino.

En este sentido, es imprescindible continuar con los planes de protección para esta especie en estado «vulnerable» de extinción. Además, es esencial continuar con los estudios sobre su biología, para rellenar los vacíos que se tienen en lo que se refiere a su reproducción y su desarrollo. Los datos recabados contribuyen a fortalecer las estrategias de conservación de este rey de los océanos: el tiburón blanco.

Bibliografía

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