Falangero de cola anillada: hábitat, distribución y comportamiento

Seguramente el marsupial por excelencia sea el canguro, pero también existen otras muchas especies dentro de esta infraclase, como el falangero de cola anillada. Este mamífero pequeño está relacionado con el resto de integrantes de la familia Pseudocheiridae. Todos ellos residen en Oceanía, normalmente, en Australia o Nueva Guinea.

Sin embargo, existen numerosos aspectos que son poco conocidos con respecto al falangero de cola anillada. ¿Sabías, por ejemplo, que se encuentra únicamente en el continente australiano? Este y muchos más detalles serán explicados a continuación.

Hábitat y distribución del falangero de cola anillada

De manera casi exclusiva, Pseudocheirus peregrinus reside en bosques, selvas, jardines próximos a urbanizaciones o zonas con matorrales densos. Normalmente, estos marsupiales eligen sitios con vegetación profunda, ya que construyen sus nidos aprovechando los apoyos de la naturaleza.

Por ejemplo, pueden utilizar huecos de árboles o diferentes ramas. Asimismo, se ha observado que un nido puede estar ocupado por varios individuos.

Además de su hábitat, también es importante conocer la distribución y localización de los falangeros de cola anillada. Si se observa un mapa del mundo, este animal puede localizarse en distintos estados de Australia, como Nueva Gales del Sur, Queensland, Victoria o Australia Meridional.

Comportamiento del falangero de cola anillada

En relación a su comportamiento, se han observado una serie de patrones únicos e interesantes en la especie. A continuación, se expondrán algunos de ellos, para poder apreciar la singularidad que muestra Pseudocheirus peregrinus.

1. Son animales territoriales

La territorialidad es una competencia mediante la cual los animales defienden su espacio. Esta conducta está presente en distintos tipos de vertebrados, independientemente de si son animales salvajes o domésticos.

Al igual que otras especies de animales, el falangero de cola anillada marca su territorio a través de la señalización. Esta técnica consiste en la liberación de marcadores físicos, como la orina u otras secreciones. P. peregrinus prefiere la emisión de secreciones olorosas como señal de aviso.

Además, la territorialidad sirve como forma de aviso a miembros de su propia especie. Se han registrado numerosas peleas entre individuos del falangero de cola anillada debido a la posesión de áreas concretas.

2. Estos marsupiales son trepadoresexcelentes

Aunque P. peregrinus pertenece a los marsupiales, suele ser confundido por su tamaño con los gatos. Pese a que en cierta forma recuerde a ellos, ambas especies son totalmente diferentes. Por ejemplo, un rasgo que se debe tener en cuenta para diferenciarlos es la tonalidad de su pelaje.

Este marsupial es bastante cambiante según la zona del cuerpo que se observe. Por ejemplo, en la cabeza y el vientre es de color gris con manchas blancas, mientras que en las extremidades y la cola es de un tono anaranjado.

Eso sí, su cola prensil —que utilizan como una quinta extremidad— los diferencia sin problema de otros animales. Además, gracias a que sus patas traseras son sindáctilas, estos marsupiales manipulan mejor las ramas y se agarran firmemente a ellas. La fusión de sus dedos los convierte en excelentes trepadores, ya que rara vez pisan el suelo.

Otro detalle sobre este animal es que los ejemplares suelen vivir en pequeños grupos.

3. El falangero de cola anillada es un animal nocturno

Este herbívoro es un animal cuyo pico de actividad se incrementa durante la noche y su actividad es arbórea. Por ello, invierte estas horas en la búsqueda de alimentos, preferentemente hojas, flores y frutos. En concreto, las hojas proceden de plantas autóctonas de la zona.

Además, son animales coprófagos que se alimentan de sus excrementos, al igual que los conejos o mamíferos de gran tamaño, como los elefantes. En la mayoría de los casos, la coprofagia es un comportamiento puntual que repercute positivamente en la salud de los animales. Este proceso les permite aprovechar al máximo los nutrientes ingeridos.

4. Los machos cuidan de las crías

Aunque los falangeros comparten numerosos comportamientos, también muestran rasgos propios. Por ejemplo, P. peregrinus se diferencia de sus congéneres en el cuidado de las crías.

Mientras que el resto de los machos de su género no se encargan de las crías, esto no ocurre en el falangero de cola anillada. Según parece, durante el tiempo en que las madres se alimentan, los machos cargan a las crías en su espalda y las protegen. 

5. Su esperanza de vida es corta debido a las numerosas amenazas

Aunque en algunos casos se han registrado individuos en estado salvaje que alcanzan los 6 años, normalmente no sobreviven más de 3 años. Desde el momento de su nacimiento, se estima que la mitad de la descendencia no supera el primer año de vida. Por desgracia, los falangeros están expuestos a numerosas amenazas, como las siguientes:

• Depredación: los gatos y los perros son un serio problema para esta especie. Aquellos falangeros que viven próximos a núcleos urbanos están en constante peligro.
• Deforestación: la pérdida de hábitat los empujó a acercarse a los núcleos urbanos y exponerse a nuevos peligros.
• Factor humano: al igual que los animales influyen a la hora de cazar a estos ejemplares, el falangero de cola anillada también puede ser atropellado por vehículos.

El falangero de cola anillada: un marsupial bello

En definitiva, el falangero de cola anillada es un pequeño marsupial que habita en los bosques australianos. Sin embargo, la presión humana ha provocado su desplazamiento a zonas próximas a urbanizaciones y pueblos.

A su vez, esto ha expuesto a la especie a nuevos peligros a los que no está habituada, como nuevos depredadores. Por ello, es necesario que protejamos al falangero de cola anillada, que aunque aún está en riesgo bajo, forma una parte esencial de la gran biodiversidad australiana.