Dormir a un gato por las noches: consejos prácticos

El gato doméstico es un animal con tendencias nocturnas, que suele tener problemas para dormir por las noches. ¡Descubre cómo remediarlo aquí!
Dormir a un gato por las noches: consejos prácticos
Cesar Paul Gonzalez Gonzalez

Escrito y verificado por el biólogo Cesar Paul Gonzalez Gonzalez.

Última actualización: 10 agosto, 2023

El gato doméstico es bastante propenso a volverse más activo durante las noches, por lo que es normal que sus tutores tengan problemas para hacerlo dormir. En realidad, este comportamiento es un vestigio de su conducta salvaje. Sin embargo, es posible reducirlo o evitarlo por completo si se siguen ciertas pautas y recomendaciones.

Al igual que los humanos, los felinos domésticos también necesitan satisfacer sus necesidades de sueño. Para ello, es esencial que mantengan en «equilibrio» su horario de siestas, pues de esto depende su descanso, bienestar y salud. ¿Quieres saber cómo ayudar a tu gato a dormir en las noches? ¡Sigue leyendo!

Los gatos son animales nocturnos

Los gatos domésticos (Felis silvestris catus) son en realidad un linaje domesticado del gato salvaje (Felis silvestris). Por esta razón, es normal que aún presenten ciertas conductas «salvajes» que son comunes o frecuentes en su antecesor.

De acuerdo con el portal Animal Diversity, los gatos salvajes se caracterizan por presentar hábitos crepusculares o nocturnos, debido a que la oscuridad facilita su cacería. A raíz de las necesidades de la especie, ambos linajes —doméstico y salvaje— desarrollaron adaptaciones que mejoran su percepción en ambientes poco iluminados, como por ejemplo:

  • Tapetum lucidum: es un tejido que recubre la parte posterior del ojo. Tiene la capacidad de «reflejar» la luz, para mejorar la percepción lumínica. Esta adaptación es la que causa el brillo de los ojos de los gatos en la oscuridad.
  • Lentes multifocales: hace referencia a modificaciones en los ojos que permiten enfocar de manera simultánea objetos lejanos y cercanos.
  • Predominancia de bastones sobre conos (células fotorreceptoras): los bastones y los conos son células sensitivas de los ojos que detectan la iluminación del entorno y los colores, respectivamente. Los gatos aprovechan la predominancia de bastones sobre conos para ver mejor en entornos con poca luz; aunque, a cambio, tienen una visión cromática pobre.
Un gato recostado.
A causa de su naturaleza depredadora, los ojos de los gatos les permiten percibir movimientos en la oscuridad. Crédito: Master1305/Freepik.


¿Es bueno que los gatos no duerman en la noche?

En vista de lo anterior, es normal preguntarse si es mejor que los gatos domésticos estén activos en la noche, pues todo parece indicar que están mejor adaptados a los hábitos nocturnos. Sin embargo, esto está lejos de ser lo ideal para ellos. Sobre todo, porque no necesitan cazar por su cuenta ni viven en un entorno salvaje.

La domesticación ha logrado eliminar ciertos rasgos y conductas de los ancestros salvajes del gato. Gracias a esto —y a la convivencia con los humanos—los felinos domésticos han logrado adaptarse a tener una vida diurna sin perjuicios para su salud.

Un estudio publicado en el Journal of Veterinary Behavior menciona que los patrones de actividad de los gatos domésticos cambian según los cuidados y las actividades que tengan.

Si los tutores interactúan con sus mascotas durante el día, estas tienden a mantener un patrón diurno.

La capacidad que tienen los gatos para modificar su horario, sugiere que ya no tienen la necesidad de ser nocturnos cuando están al cuidado de los humanos. A pesar de que su organismo goza de varias adaptaciones a la oscuridad, esto no es impedimento para que tengan una vida diurna.

Consejos para hacer dormir a un gato en las noches

No todos los gatos suelen mantenerse despiertos durante la noche, pero es un problema más común de lo que se podría creer. Por ello, existen varias estrategias útiles que ayudan a regular sus ciclos de sueño para lograr que se sincronicen a los del humano. Los siguientes consejos pueden ayudar bastante durante el proceso.

1. Establece horarios y hábitos

Al gato le encanta formar hábitos, así que se puede aprovechar esto para acostumbrarlo a dormir en la noche. Para ello, es necesario establecer un horario que incluya casi todos los eventos del día, como la hora de comida, la hora de juego o la hora de cepillado, y cumplirlo lo mejor posible.

Este nuevo horario debe agrupar la mayor parte de las actividades durante el día, con el objetivo de habituar al felino a un patrón de vida diurno.

Por supuesto, esta recomendación requiere mucho compromiso y no surte efecto de inmediato, pero es quizás la mejor manera de hacer que el gato se duerma rápido por las noches.

2. Evita regaños, golpes o gritos

Es importante enfatizar que ninguna respuesta negativa como regaños, golpes o gritos está justificada. Lejos de ayudarle al gato, solo le provoca estrés y podría propiciar comportamientos agresivos.

Recuerda que el condicionamiento positivo es una de las mejores herramientas que se tiene para educar a las mascotas, tal como lo menciona un artículo publicado en el Journal of Feline Medicine and Surgery.

3. No obligues al gato a mantenerse despierto durante el día

Contrario a lo que se piensa, el ciclo del sueño en los gatos es policíclico, es decir, se compone de varias «siestas» que duran cerca de 104 minutos. En total, se suele considerar que duermen alrededor de 16 horas, pero no de manera continua, sino en descansos cortos distribuidos a lo largo del día.

Debido a que los gatos dependen mucho de las «siestas» para descansar, el simple hecho de mantenerlos despiertos durante el día no causará que duerman mejor por la noche. Al contrario, se sentirán cansados y no podrán dormir más de lo que suelen durar sus siestas.

Lo más probable es que el gato se siga despertando a mitad de la noche como siempre, solo que ahora cansado, molesto e incluso agresivo.

Durante los primeros días no se percibirán mayores afectaciones que el cambio de conducta. No obstante, la «deuda de sueño» afectará también su salud y su bienestar a largo plazo.

4. Dale tiempo de calidad durante el día

La falta de atención o la poca interacción con sus tutores es una de las razones más habituales por las que el gato no puede dormir en las noches. Al no tener la estimulación que necesita durante el día, ocupa parte del horario nocturno para exigirle cariños a su familia.

Para remediarlo, es crucial que los tutores se comprometan a jugar e interactuar más con su gato durante el día, para que en las noches se pueda enfocar a dormir. Además, se debe evitar incentivar las conductas nocturnas, por lo que, siempre y cuando no corra riesgo, es mejor ignorar sus maullidos y sus exigencias en horas inadecuadas.

5. Haz que escuche música relajante antes de dormir

De la misma manera que ocurre en los humanos, la música relajante es capaz de disminuir los niveles de estrés en los felinos domésticos. Por esta razón, puede ser una excelente herramienta si se busca que el gato duerma en las noches sin problema.

Según un estudio publicado en Journal of Feline Medicine and Surgery, algunos temas de música clásica han demostrado tranquilizar un poco a los felinos domésticos. Sin embargo, esto solo es un medio alternativo para calmarlos, pues no asegura que el gato se dormirá rápido en las noches.

Un gato recostado sobre un piano.
La música puede ayudar al gato a relajarse y conciliar mejor el sueño. Crédito: Norbert Oriskó/Pixabay.



6. Ofrécele comida antes de dormir

De acuerdo con The Mobile Society for the Prevention of Cruelty to Animals, los gatos tienden a sentirse somnolientos después de una comida abundante. Por esta razón, recomiendan darles su última ración del día algunos minutos antes de ir a dormir. Esta práctica puede servir de incentivo para dejar su horario nocturno.

7. Acude a revisión con un veterinario

En algunas ocasiones, el gato es incapaz de dormir en las noches debido a que tiene algún padecimiento que le impide conciliar el sueño. La organización Cats Protection precisa que los cambios en el ciclo del sueño felino pueden denotar la presencia de padecimientos dolorosos, como la artritis.

Además, en caso de que el felino se encuentre sano y aun así no pueda dormir por las noches, el veterinario también puede recetar el uso de fármacos o feromonas relajantes. Es preciso destacar que esto queda a discreción del profesional y depende mucho de los hallazgos clínicos.

La importancia de que los gatos duerman en la noche

Aunque parezca complicado, es posible educar a un gato para dormir de noche. Los desvelos son perjudiciales para ambos, así que es mejor corregirlo cuanto antes, para evitar problemas en el futuro.

Es claro que lograr este propósito requiere mucha paciencia y compromiso. Además, la hiperactividad de un felino no debe dar lugar a constantes peleas o disgustos, capaces de dañar la relación con la mascota.

Como te puedes dar cuenta, el simple hecho de que los gatos no duerman por las noches puede causar diferentes conflictos en casa. Si bien es cierto que en la mayoría de los casos no es un tema de riesgo inminente, siempre es mejor optar por armonizar la interacción entre la familia. Recuerda que están juntos para ofrecerse experiencias gratificantes.

 


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