10 curiosidades del pez betta

El pez betta o luchador de Siam (Betta splendens) es un pez de agua dulce nativo del Sudeste Asiático que se ha popularizado como animal de compañía en las últimas décadas, debido a sus colores bellos y su temperamento llamativo. ¿Quieres conocer 10 curiosidades del pez betta? Si es así, sigue leyendo.

El término “pez betta” hace referencia a 73 especies dentro del género Betta —familia Osphronemidae, orden Perciformes— en su sentido más amplio, pero solo el Betta splendens se mantiene en cautiverio de forma común en casi todas las regiones del mundo. Una vez aclarado el terreno taxonómico, veamos algunos de los rasgos más llamativos de este bellísimo pez.

1. El pez betta habita de forma natural en los arrozales

¿Alguna vez te has preguntado por qué el pez betta es tan resistente y se recomienda para acuariófilos principiantes? Su fortaleza no ha sido adquirida en el ámbito doméstico, pues esta especie se ha acostumbrado evolutivamente durante siglos a habitar fuentes de agua estancadas, con mucho barro y abundante vegetación.

Debido a sus necesidades fisiológicas, los peces betta han habitado históricamente los arrozales de Sudeste Asiático, incluyendo la península de Malaca, Tailandia, Camboya y algunas partes de Vietnam. Su estrecha relación con los campos de cultivo semiacuáticos permitió el descubrimiento de esta especie y su posterior domesticación.

2. En la naturaleza, sus colores son mucho más apagados

Si entras en una tienda de peces, verás que hay bettas de todos los colores: azules, rojos, blancos, naranjas, mosaicos y muchas tonalidades más. Todas estas variedades son fruto de la cría selectiva a lo largo de los años, pero los ejemplares salvajes tienen unos colores mucho más apagados.

Estos peces de 6 a 8 centímetros de longitud presentan una coloración basal verde, marrón y gris en su ambiente natural. Además, sus aletas son mucho más cortas que las de los ejemplares domesticados. Los colores más vívidos han sido seleccionados y aislados a lo largo de los años, fijándose en variedades diferentes.

3. Los reyes de la genética

Tal y como indica el portal Betta Source, existen alrededor de 26 000 combinaciones genéticas que modelan los colores de los bettas en cautiverio. Estos peces presentan 4 capas básicas de coloración —iridiscente, negra, roja y amarilla—, lo cual da mucho juego a la hora de realizar cruces selectivos y aislar caracteres.

A día de hoy, se reconocen unas 37 variedades de Betta splendens, todas ellas con rasgos y coloraciones únicas. Te presentamos algunas de ellas:

• VeilTail (VT): es el tipo más común y extendido en los acuarios. Se caracteriza por tener unas aletas muy elongadas y una cola amplia y caída, en forma de velo.
• CrownTail (CT): se distingue del resto por presentar aletas con muy poco tejido entre las espinas. Esto le otorga una apariencia muy “puntiaguda” y característica.
• Dragón: este tipo de pez betta presenta unas escamas muy engrosadas y un cuerpo achatado, con una coloración metálica y un fondo rojo.
• Marble: esta variante muestra una coloración en mosaico, con manchas de distintos colores sobre un fondo claro. Es una de las más aclamadas entre los acuaristas expertos.

4. El pez más antiguamente domesticado

Quizá junto con el goldfish (Carassius auratus), el betta es uno de los peces que más historia han recorrido con el ser humano. Tal y como indica el New York Times, se estima que estos animales se domesticaron hace 1000 años como mínimo, pero hasta el siglo XIX no se hicieron populares fuera del continente asiático.

5. Una agresividad inusitada

Los bettas son unos de los peces más agresivos que existen. Es bien conocido entre los que tienen acuarios que juntar a dos machos de esta especie es una receta para el desastre, pues tardarán poco en luchar hasta la muerte. De hecho, se criaron en primera instancia por su agresividad, con el fin de exhibir peleas similares a las de gallos.

No solo los machos son agresivos entre ellos, pues también suelen acosar a las hembras de forma constante. Por su parte, las hembras se deben mantener en acuarios muy amplios y en grupos de mínimo 3 ejemplares, ya que si solo se aloja una pareja una adoptará el rol dominante y maltratará a la otra.

En general, lo mejor es mantener a este pez separado de cualquier ser vivo, sea de su propia especie u otra.

6. Los machos construyen nidos de espuma

El cortejo de esta especie es fascinante. Una de las curiosidades más llamativas del pez betta es que los machos crean nidos de espuma con ayuda de su aparato bucal, con intención de impresionar a las hembras y fomentar la reproducción. En estos nidos se colocan los huevos fertilizados, aunque los machos los fabrican incluso si no hay ninguna hembra presente en el acuario.

7. Estos peces tienen un órgano muy especial

Otra de las curiosidades del pez betta es que es un animal capaz de vivir en aguas con muy poco oxígeno, a diferencia de la mayoría de especies de peces. Esto lo consigue con ayuda del órgano laberinto, un accesorio respiratorio suprabranquial exclusivo de unos pocos actinopterigios.

Este órgano le permite al pez integrar pequeñas cantidades de oxígeno directamente del ambiente en su sistema vascular, sin que este tenga que pasar por las branquias. De todas formas, cabe destacar que estos animales siguen realizando respiración branquial y fuera del agua fallecen —igual que el resto de peces—.

8. Son animales resistentes, pero no invencibles

Por desgracia, muchas personas creen que estos peces pueden vivir en vasos de agua o acuarios de menos de un litro de volumen debido a su resistencia. Un betta sobrevive en estas condiciones por un tiempo, pero no significa que esté bien. En cuestión de meses acabará desarrollando infecciones fúngicas y podredumbre de las aletas por la mala calidad de agua.

Idealmente, un betta adulto requiere un acuario de 15 a 20 litros para estar a gusto. El tanque debe contener también un sistema de filtrado adecuado y un calentador, pues el agua tiene que permanecer de forma constante en unos 24 ºC.

9. El betta es el animal acuático nacional de Tailandia

Más allá de su fama en el mundo de la acuariofila, este pez es muy apreciado por los locales en su región de origen. Se trata de uno de los animales nacionales de Tailandia, cuyo título ostenta desde el año 2018. Se ha elegido a esta especie como estandarte de la fauna acuática local debido a la historia que tiene con el ser humano y su profundo significado cultural.

10. A pesar de su popularidad, está en peligro

Aunque pueda parecer extraño, el betta se encuentra en la categoría “Vulnerable (VU)“ de la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN). Algunas de sus amenazas más claras son las siguientes:

1. Antropización del entorno y destrucción de los ecosistemas.
2. Redireccionamiento y secado de las fuentes de agua.
3. Introducción de material genético en las poblaciones salvajes al soltar ejemplares criados en cautiverio.
4. Polución de las aguas.

Como puedes ver, las curiosidades del pez betta son casi infinitas. Hemos citado 10 de sus rasgos más llamativos, pero aún queda muchísimo por descubrir sobre esta fascinante especie. Preservar sus ecosistemas es el primer paso para seguir conociéndola y disfrutando de su compañía, tanto en los hogares del mundo como en su ambiente natural.