El síndrome del schnauzer

El síndrome del schnauzer miniatura también es conocido como eritrodermia pustular estéril o dermatitis superficial necrótica supurativa. Se trata de una enfermedad exclusiva de esta raza perruna, y que describiremos a continuación.

Si tienes un schnauzer, ten esto en cuenta

El schnauzer miniatura es una de las razas de perro más codiciadas al tratarse de animales de pequeño tamaño y de carácter tranquilo, perfectos para la vida en la ciudad. Además, hay que poner de relieve la predisposición de otras pequeñas razas –como los bulldog francés– a visitar a menudo al veterinario, mientras los schnauzer suelen gozar de buena salud.

Pero sí es cierto que tienden a desarrollar enfermedades de origen genético, como son algunas patologías de la piel –como la que vamos a describir a continuación–, enfermedades renales, atrofia de la retina o hipotiroidismo, entre otras.

Para poder prevenirlas, es necesario conocerlas y mantener un adecuado control de los síntomas mediante las visitas periódicas a nuestra clínica de confianza. De esta manera, podremos garantizarle a nuestra mascota la salud y calidad de vida suficientes.

El síndrome del schnauzer: breve descripción

Hablamos de una enfermedad calificada como rara. Cursa con una afección severa de la piel y las vísceras que se da exclusivamente en los perros de la raza schnauzer miniatura. Sin embargo, un síndrome similar ha sido descrito en otras razas perrunas. Pero así como en los schnauzer se relacionó el primer caso descrito en la historia con el uso de champús de hierbas, en el resto de razas no se ha apreciado ninguna conexión similar.

La enfermedad se ha descrito exclusivamente en individuos adultos y no se ha detectado una mayor incidencia en ningún sexo.

Etiología

El agente causal de esta enfermedad es aún desconocido, pero se sospecha de una reacción adversa a distintos alérgenos o inmunógenos absorbidos durante el uso de productos para la higiene u otros productos químicos similares.

Sintomatología del síndrome del schnauzer

• Síntomas generales: es común que aparezca fiebre acompañada de depresión y letargo.
• Síntomas cutáneos: alopecia y eritema, normalmente en el tronco, aunque se han descrito casos en los que la cabeza o las extremidades estaban afectadas.

Destaca la aparición de manchas más oscuras y edematosas, a veces con tendencia a supurar. Pueden aparecer pústulas y ampollas, por la elevada temperatura de la zona afectada. Y en las zonas donde el eritema se agrava puede aparecer erosión de la piel, ulceración y necrosis.

Estas áreas afectadas se muestran muy dolorosas al tacto.

Evolución de la enfermedad

Al principio las lesiones son localizadas, pero rápidamente se generaliza y pasa a afectar a los órganos internos. En los análisis sanguíneos se aprecian signos de inflamación y niveles muy bajos de albúmina. También pueden aparecer señales de daño cardiaco, pulmonar y hepático, lo cual podría ser indicativo de un fallo sistémico próximo.

La mayor parte de los perros afectados tienen un mal pronóstico y mueren al poco tiempo.

Diagnóstico del síndrome del schnauzer

El diagnóstico será mediante recopilación de los signos clínicos mencionados, y las pruebas de laboratorio pertinentes. Dentro de estas pruebas destaca la biopsia de las lesiones cutáneas, para luego proceder a su análisis microscópico.

El diagnóstico diferencial se hará con otras patologías cutáneas, algunas incluso de origen tóxico. La más similar es la conocida como síndrome de Sweet o dermatosis neutrofílica estéril. Ambas son bastante similares y, en ocasiones, se han considerado fenómenos relacionados.