¿Qué comen los salmones?
Los salmones son animales vertebrados pertenecientes a la familia Salmonidae, un grupo que también involucra a las truchas y a otros peces aptos para el consumo humano. Son de gran importancia en la gastronomía por su alto contenido en grasas saludables (en especial el omega-3). De igual manera forman parte de la dieta básica de varios animales, pero ¿qué comen los salmones?
Estos peces tienen la habilidad de vivir tanto en aguas dulces como saladas, lo que les hace ser especies anádromas. Gracias a su destreza y adaptabilidad, los salmones varían su menú según la naturaleza del hábitat en el que se encuentren. Sigue leyendo para conocer la dieta y otros detalles de estos increíbles nadadores.
Características del salmón
Los salmones son peces de tamaño variable, aunque la envergadura de la especie más grande (Oncorhynchus tshawytscha) es de 1,5 metros y tiene un peso que supera los 30 kilogramos. Un aspecto característico de los miembros de este grupo es la presencia de una aleta adiposa ubicada entre la dorsal y la caudal.
Sus cuerpos son alargados y elegantes, con escamas redondeadas en la parte superior de la línea lateral. De forma general, cuando están en el mar estos peces tienen una coloración grisácea plateada con cierta tonalidad azulada, pero la más llamativa es la de su carne, que llega a ser rosácea o naranja (salmón) si tienen una alimentación adecuada.
Estos peces nacen en agua dulce y al crecer migran hacia el mar, donde pueden pasar 1 o 2 años antes de realizar el recorrido inverso a su sitio de origen con el fin de reproducirse y poner sus huevos (desovar). Para cumplir esta travesía, poseen una aleta caudal fuerte y flexible con la que se impulsan dando saltos de hasta más de 3 metros río arriba.
Previo al paso del mar, los salmones juveniles o alevines atraviesan una etapa que se conoce como esguinado.
¿Qué comen los peces salmones?
Como ya hemos mencionado, la dieta de los salmones varía dependiendo del medio en el que se encuentren y de su tamaño corporal. Estos peces son animales carnívoros y consumen lo que consiguen a su paso, por lo que también se les considera generalistas y oportunistas. Veamos algunos detalles de su alimentación en las siguientes líneas.
Dieta del salmón en agua dulce
La nutrición de los salmones en los ríos se produce cuando estos apenas son prealevines o alevines vehiculados, que es el nombre que se les da a los ejemplares nada más eclosionar del huevo. Durante esta etapa (que puede durar hasta 8 semanas), estos pequeñines no necesitan ingerir otra comida más allá de los nutrientes del huevo (vitelo).
Una vez han completado esta fase, los salmones se convierten en alevines y pueden empezar la búsqueda activa de los alimentos. En esta etapa, consumen insectos acuáticos (en especial sus larvas) y terrestres que caen a la superficie.
¿Qué comen los salmones en el mar?
Tras el proceso de adaptación los salmones llegan al mar, donde el abanico de alimentos aumenta. Debido a que tienen más nutrientes disponibles, pueden crecer en tamaño, aumentar su peso y completar su desarrollo morfológico.
Nada más llegar al mar su dieta se basa en zooplancton y crustáceos (entre ellos anfípodos), cuyos pigmentos le otorgan al pez ese tono salmón a su carne. A medida que aumenta de peso y tamaño, también incrementa el número de presas que va capturando.
Entre los peces preferidos por el salmón tenemos a la sardina, el arenque y el capelán. Además, puede consumir moluscos como los calamares.
Como ejemplo tenemos al salmón Coho (Oncorhynchus kisutch), que se alimenta en especial de insectos cuando se encuentra en su fase juvenil en ambientes de agua dulce. Por su parte, en el mar su tendencia se inclina a depredar sobre peces como el arenque y los calamares.
La dieta del salmón en espacios marinos es muy variable y depende de la disponibilidad de presas en el entorno y de su tamaño.
Alimentación de los salmones durante la migración
Una vez los salmónidos ganan peso y tamaño en el mar y se encuentran listos para el proceso reproductivo, emprenden un viaje de vuelta de muchos kilómetros a sus lugares de nacimiento. Durante este recorrido, estos peces no se alimentan y solo cuentan con sus reservas de energía, acumuladas en el cuerpo en el transcurso de los años en aguas marinas.
Debido a la intensa travesía de retorno, muchos salmones pierden la vida después de cumplir su objetivo (reproducirse y poner huevos). Solo unos pocos tienen la fuerza suficiente para regresar al mar y vivir otro ciclo, lo cual también depende de la especie.
¿Qué comen los salmones en cautiverio?
Los salmones son objeto de producción a escala mundial (haciendo uso de las técnicas de la acuicultura) por su gran aporte de nutrientes para los seres humanos. Un factor importante en esta industria es la alimentación y mediante ella se busca maximizar el crecimiento de los peces sin sacrificar la calidad de su carne.
La nutrición de los salmónidos en cautiverio está basada en proteínas de origen animal. En específico se emplean harinas y aceites de pescado provenientes de peces, como la sardina y el jurel.
Con este tipo de dieta artificial la carne se torna blanca. Sin embargo, se emplean colorantes edibles para cambiarle el tono al característico salmón.
¿Qué animales se alimentan del salmón?
Si bien ya hemos resuelto qué comen los salmones, es interesante conocer quién se los come a ellos, ya que con su alto valor nutricional no pasan desapercibidos en la naturaleza. Estos enérgicos peces se encuentran en la dieta base de varios animales depredadores (y que no precisamente viven en el agua).
Unos de los mamíferos que más aprovechan las migraciones de los salmones son los osos pardos, quienes se abalanzan sobre ellos con el fin de darse un banquete y así acumular grasa para pasar el invierno. Otros depredadores terrestres de los salmónidos son las nutrias, las águilas y los halcones, mientras que en el mar tenemos a los tiburones y las orcas.
Para finalizar, podemos decir que los salmones poseen una dieta carnívora de preferencia. Durante su interesante y agitada vida devoran todo lo que esté a su paso, empezando por insectos (y sus larvas) cuando están en los ríos y finalizando su menú marino con crustáceos, moluscos y otros peces más pequeños que ellos.
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