El enriquecimiento ambiental en hurones es muy importante para el bienestar de esta mascota. Y es que aunque esta especie es doméstica y lleva con nosotros más de 2 000 años, el comportamiento de esta sigue siendo el de un animal salvaje.
Enriquecimiento estructural
Aunque puedes pensar que con tener una jaula es suficiente, los hurones son animales muy exigentes en ese aspecto. Es necesario que pasen al menos dos horas explorando entornos fuera de su habitáculo.
Para ello, podemos tenerlos en el exterior con un arnés o muy vigilados, pues existe el riesgo de que se metan en algún agujero y no consigamos dar con ellos, con el consiguiente riesgo tanto para nuestra mascota como para la naturaleza.
O bien podemos tener una habitación acondicionada para que nuestro hurón explore sin peligro. Se deben proteger los cables y evitar huecos a los que el hurón pueda acceder y nosotros no.
Tubos y escondites, la mejor opción
Lo ideal será disponer de dispositivos de enriquecimiento ambiental en hurones, como por ejemplo redes de tubos de plástico desmontables. Estos pueden desmontarse para poder recuperar a nuestra mascota si tenemos que devolverla a su jaula.
A los hurones les encanta excavar, y las piscinas de bolas de plástico pueden ser una gran opción para estimular este comportamiento en nuestro compañero. También podemos utilizar tierra, arena, hojas o ropa vieja para cambiar el sustrato.
La jaula de nuestro hurón y las salidas de esta deben ser compatibles con las 12-14 horas diarias de oscuridad que necesita esta especie. No podemos permitir que el enriquecimiento ambiental en hurones vulnere una de las necesidades más importantes dentro de los cuidados básicos del hurón.
Para cumplir estas horas de sueño lo ideal es el uso de hamacas y de nidos lejos de la luz solar. Dejar que se entretengan con pantalones viejos también puede servir tanto para proporcionarles un nuevo lugar para dormir como para que los exploren.
A los hurones les encanta excavar, y las piscinas de bolas de plástico pueden ser una gran opción para estimular este comportamiento en nuestro compañero. También podemos utilizar tierra, arena, hojas o ropa vieja para cambiar el sustrato.
Enriquecimiento sensorial
El comportamiento de los hurones tiene un gran componente exploratorio. Ello hace que el estimular el mundo a su alcance mediante diversos estímulos sensoriales se antoje fundamental.
Así, este tipo de enriquecimiento ambiental en hurones se basa principalmente en el uso de olores. Este será el sentido más importante de la especie, y enriquecer la variedad de aromas que percibe a lo largo del día será un gran estímulo.
Por contra, los juguetes de colores llamativos no tendrán por qué llamarle la atención. El uso de aceites aromáticos, especias o incluso colonias con las que impregnar algún objeto, puede ser una gran forma de llamar su atención. Lo ideal es ir probando con distintos olores, pues a cada animal pueden llamarle más la atención unos que otros.
Enriquecimiento alimenticio
Aunque la mayoría de hurones comen pienso en su cuenco, esta no es la forma ideal de alimentarlos. Existen numerosos juguetes en el mercado para otras especies que son aptos para los hurones, como los Kong, de uso para perros y gatos.
Pero siempre podemos fabricarlos en nuestra propia casa de forma casera, aunque se deben usar materiales que no sean tóxicos, como el cartón. El uso de pelotas con agujeros o rollos de cartón puede ser perfecto para elaborar dispensadores de pienso paraque nuestra mascota se esfuerce para conseguir su comida.
Cambiar el tipo de alimento de nuestro hurón también puede funcionar. Darle un poco de carne de pollo hervida será una nueva experiencia para él, y deberá desgarrar los pedazos a diferencia de cuando come pienso.
El uso de pelotas con agujeros o rollos de cartón puede ser perfecto para elaborar dispensadores de pienso que hagan que nuestra mascota deba esforzarse para conseguir su comida.
Enriquecimiento social
Los hurones son animales muy sociables. Es por ello que lo ideal es que tengamos más de un hurón, para que se entretengan cuando no estamos con ellos. Aún así, debemos socializarlos con nosotros, pues pueden volverse ariscos.
Siempre que sea posible, pasaremos bastante tiempo con nuestro hurón. Los peluches no son un sustituto ni de sus compañeros humanos ni de otros hurones, si bien pueden ser juguetes interesantes. El enriquecimiento social, tanto con su especie como con la nuestra, siempre es la mejor forma de evitar el estrés y la infelicidad de nuestra mascota.