Cómo convertirse en guardaparque

Antes de pensarlo, hay que tener claro que es por vocación, ya que el desempeño de la tarea puede ser más arduo de lo que se imagina; además, es requisito indispensable tener la formación específica
Cómo convertirse en guardaparque

Escrito por Yamila

Última actualización: 22 marzo, 2018

Un guardabosque tiene muchas responsabilidades dentro de un área natural específica. Además de cuidar de la flora y de la fauna, su objetivo es enseñar a los visitantes sobre el lugar, evitar los incendios e investigar la biodiversidad. Si quieres saber cómo convertirse en guardaparque sigue leyendo este artículo.

Convertirse en guardaparque: ¿es realmente para mí?

Según la definición, un guardaparque es una persona que se encarga de la protección y preservación de todos los aspectos en áreas silvestres, históricas o culturales. Además, proporcionan actividades de interpretación y recreación para todas las edades y son un nexo entre las comunidades locales y los visitantes.

Antes de tomar la decisión de ser guardabosque, debes tener en cuenta cuáles son sus obligaciones y tareas. Algunos se dedican a la ciencia y la investigación: recolectan muestras de plantas, huesos, materia fecal o cualquier otro elemento que permita analizar a una o varias especies del lugar.

Otros están enfocados a la educación, por lo que reciben a los visitantes y les explican sobre el ecosistema, las formaciones geológicas, la geografía y la ecología.

También podemos encontrar a los guardaparques-policías, los cuales prestan servicios para evitar incendios forestales o defienden en caso de tratarse de áreas remotas, por ejemplo, para combatir la caza furtiva.

Cómo llegar a ser guardabosques

Durante el desarrollo de sus funciones pueden transportarse en embarcaciones, a caballo, en vehículos de tracción en las cuatro ruedas y, por supuesto, a pie.

Ahora bien, no todo es ‘acción’ en la vida de un guardaparque, ya que también debe encargarse de lo administrativo, la venta de entradas o de herramientas útiles para la estancia de los visitantes o incluso limpiar las áreas de acceso común.

A su vez, al convertirse en guardaparque una persona trabaja en condiciones desfavorables; frío, calor, nieve, lluvia… Puede ser una tarea muy ardua, pero al mismo tiempo gratificante y maravillosa.

No todos saben sobre el trabajo que da cuidar un parque nacional o una reserva natural. Para que esos sitios mantengan su estatus de ‘paraísos’ y puedan ser disfrutados por todos, alguien debe encargarse del mantenimiento.

Un guardabosques se dedica en cuerpo y alma a la protección del área, no le importa pasarse noches sin dormir cuando se trata de apagar un incendio o de avistar el comportamiento de un animal en peligro de extinción.

Reservas naturales protegidas

Tips para convertirse en guardaparque

La personalidad del guardabosque está basada en el amor y respeto por la naturaleza, en ser un líder carismático o en no considerar su trabajo como tal, por lo cual estará en su puesto en las vacaciones, las fiestas o los feriados y fines de semana. Algunas recomendaciones para convertirse en guardaparque son:

1. Estar familiarizado con los parques del país

El sistema de parques nacionales es similar en todo el mundo, aunque la legislación cambia según el país o la provincia/estado. Es muy importante tener conocimiento de las leyes y reglas que giran en torno a esta tarea.

2. Estudiar (y graduarse)

Solo con ser ‘amante de la naturaleza’ no es suficiente para convertirse en guardaparque. Es necesario estar cualificado para esta tarea tan compleja y valiosa. En las universidades locales se dicta la carrera de guardabosque (en España se accede al puesto mediante oposiciones del Estado), que luego puede ser complementada con alguna especificación: por ejemplo, ecología, conservación, administración pública, etc.

3. Buscar contactos en el parque deseado

No siempre es fácil conseguir empleo de guardabosques en el área o parque que deseamos. Si nos gusta el bosque o la montaña, quizás haya puestos disponibles en áreas costeras o selváticas.

Al principio puede que debamos aceptar trabajos en zonas más alejadas o que no nos agraden, o incluso realizar actividades más monótonas. Pero todo esto sirve para generar experiencia y luego poder aplicar en posiciones más interesantes.

Si por ejemplo tienes un parque cerca de tu hogar y quieres trabajar en él, lo mejor que puedes hacer es contactar con los encargados del lugar. Cuando te conozcan, y sepan que has estudiado para ser guardabosque, quizás te consigan un puesto.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.