¿Es una planta o un animal? La anémona de mar es una perfecta combinación de ambos reinos, y es por eesto que llama nuestra atención, así como también por su tamaño y sus colores. En este artículo te contaremos datos realmente interesantes sobre una especie marina diferente al resto.
Anémona de mar: características
Este depredador marino con apariencia de flor colorida, habita en las profundidades de los océanos. Entre las 1 200 especies que existen actualmente, las más ‘populares’ pertenecen al género de los heteractis y son famosas por sus largos tentáculos.
El cuerpo de la anémona de mar es cilíndrico y se apoya en el fondo marino a través de un pie llamado disco pedal. Este le permite enterrarse en la arena y no arrastrarse por la acción de las corrientes.
Vive en áreas de mareas bajas de todas las latitudes, incluidas la Antártida y el Ártico. Para evitar secarse cuando queda expuesta al aire, repliega sus tentáculos y llena de agua sus cavidades.
En cuanto a su sistema nervioso, es bastante primitivo y solo puede realizar ciertos procesos –entre ellos la homeostasis– y movimientos. Sus nervios y músculos son más simples que en los demás animales, pero más complejos que en los corales.
Con respecto a la reproducción de las anémonas, puede ser sexual o asexual y con sexos separados o ejemplares hermafroditas; todo depende de la especie. En cualquier caso, los huevos se expulsan por la boca una vez que han sido fertilizados.
Sistema de presa y defensa de las anémonas de mar
La boca de este animal marino, en forma de hendidura, está ubicada en el centro del cuerpo y rodeada de tentáculos dispuestos en anillos concéntricos, siempre múltiplos de seis. Estos poseen células capaces de producir neurotoxinas paralizantes, usadas ya sea como defensa o ya sea para conseguir alimento.
Para detectar la presencia de la comida emplean una especie de ‘pelos’ ubicados en los extremos de los tentáculos, los cuales lanzan el veneno en el momento oportuno. Las presas son animales pequeños que nadan en las inmediaciones, aunque también pueden alimentarse de los productos de las algas o de los ‘regalos’ que reciben de los peces.
La relación de las anémonas y los peces payaso
La simbiosis en los animales es realmente asombrosa, y este es uno de los ejemplos más representativos. El famoso pez payaso –de color naranja y blanco, como el de la película Buscando a Nemo– es una de las pocas especies inmunes al veneno de la anémona, junto con la damisela.
Ambos viven unidos porque se ayudan entre sí: el pez puede esconderse de los depredadores entre los tentáculos de la anémona, y esta última recibe comida por parte de sus coloridos ‘amigos’. Ademas, la anémona se beneficia del servicio de limpieza del disco oral a través del movimiento de las colas de los peces.
¿Se puede tener una anémona de mar en el acuario?
Si bien puede parecer una buena idea tener esta especie en una pecera, sobre todo de agua cálida, debido a que la anémona de mar vive mucho y no es demasiado delicada en cuanto a cuidados, lo cierto es que puede alterar la vida del ecosistema marino artificial.
Debes saber que depende de una población estable de peces payaso o damisela para sobrevivir y que puede ser un depredador peligroso para los demás habitantes del acuario. Apenas se acerquen a la anémona serán envenenados y devorados.
Aunque es verdad que una anémona de mar es algo exótico, y quedaría más que bien en una pecera, solo sería viable en caso de tener una buena cantidad de peces que permitan la simbiosis y le ayuden a sobrevivir.