Habitan en las costas y playas tras evolucionar de sus antepasados terrestres, y algunas de ellas incluso no pueden moverse por la arena o las rocas… ¡Solo saben nadar! En el siguiente artículo te contaremos sobre cinco especies de serpientes marinas y todas sus características.
Ejemplos de serpientes marinas
Con apariencia similar a las anguilas y cola en forma de remo, muchas de las serpientes marinas producen los venenos más potentes de toda la familia. Si bien viven en el agua –siempre cálida de los océanos Indico y Pacífico– no poseen branquias como los peces y deben salir a la superficie para respirar. Pueden aguantar hasta cinco horas sumergidas sin problemas.
Algunas de las serpientes marinas son:
1. Serpiente marina amarilla
Se trata de la más famosa de las serpientes marinas, la cual habita en los litorales costeros pacíficos, ya sea en áreas tropicales como subtropicales. Necesita agua cálida para sobrevivir (entre 16 y 30°C).
La serpiente marina amarilla –foto que abre este artículo– puede medir un metro de largo, tiene un cuerpo comprimido lateralmente para nadar sin problemas y su cabeza es estrecha con ojos algo saltones.
El color de sus estrechas escamas –que le dificultan el desplazamiento en tierra– es gris oscuro con líneas amarillas en la cola y vientre del mismo color. Si bien es poco agresiva, su veneno es tóxico para las personas.
2. Serpiente marina de hocico ancho
Su nombre científico es Laticauda colubrina y vive en las aguas tropicales del Indo-Pacífico, donde son capturadas por los pescadores debido a su piel de colores en contraste o como alimento. Su área de distribución es bastante amplia y se pueden ver en grandes grupos cazando jureles gigantes.
La serpiente marina de hocico ancho es de color claro en el vientre, y oscuro y azulado en el dorso, con líneas negras. El hocico es ancho y amarillo, al igual que los lados de la cabeza y encima de los ojos.
Las hembras son más grandes que los machos, pueden alcanzar los 140 centímetros y 90 centímetros, respectivamente. En cuanto a sus hábitos, merece la pena destacar que suelen salir a tierra para beber agua dulce y que no son agresivas con los buceadores, aunque sí muy venenosas.
3. Serpiente marina de cabeza negra
Esta es otra de las especies de serpientes marinas más conocidas, la cual desciende de las terrestres que habitan en Australia, como la de coral (una de las más venenosas del mundo). Además, su toxicidad ‘compite’ con la temida mamba negra, ya que puede ser incluso más mortal.
La serpiente marina de cabeza negra, oriunda del oeste del océano Pacífico, es de gran tamaño: puede medir 260 centímetros. Su cuerpo es amarillo y negro a rayas, a excepción de la cabeza que, como su nombre indica, es completamente negra. Nada velozmente y puede permanecer varias horas sumergidas en el fondo marino.
4. Serpiente marina de labios azules
Pertenece al grupo de las Laticauda y su área de distribución es bastante amplia dentro del océano Índico: India, Sri Lanka, Tailandia, Indonesia, Filipinas, Malasia, Japón, Polinesia e Islas Salomón.
La serpiente marina de labios azules son de tamaño grande, ya que pueden superar los dos metros de largo (la cola mide lo mismo que el cuerpo). Las hembras son de mayor longitud que los machos y una de las principales características de su cara es que presentan fosas nasales laterales. Las escamas son de color azul y negro a rayas, como las demás marinas.
5. Serpiente marina de Nueva Caledonia
La última de las serpientes marinas de esta lista pertenece a la familia Elapidae y se distribuye no solo por el archipiélago de Nueva Caledonia, sino también por las islas de la Lealtad, Nueva Zelanda, las islas Carolinas e India.
La serpiente marina de Nueva Caledonia prefiere las aguas poco profundas cerca de arrecifes de coral, aunque pueden sumergirse hasta 80 metros. De vez en cuando sale a tierra firme, sobre todo las hembras que depositan allí los huevos. Se alimentan de anguilas y pueden formar colonias de hasta 30 individuos.