Las rarezas y curiosidades del mundo marino son habituales, sobre todo entre los peces, a causa de la diversidad de tamaños, formas y colores, hábitats, alimentación, cría y locomoción.
Y lo mejor de todo es que aún quedan muchas curiosidades por descubrir, pues el océano es un mundo inmenso.
Rarezas y curiosidades del mundo marino
Lo que sabemos es una gota de agua; lo que ignoramos es el océano.
–Isaac Newton–
El tigre del océano
Los tigres de mar o barracudas se encuentran en aguas templadas y constituyen con aproximadamente 20 especies diferentes. Son sumamente voraces y disponen de un gran número de dientes muy aguzados.
Los individuos de pequeñas dimensiones suelen agruparse en cardúmenes, pero los más grandes nadan solos.
La barracuda gigante es el miembro de mayor tamaño de esta familia. Puede pesar 50 kilos y alcanzar los 2 metros y medio de longitud.
Existen muchos testimonios de humanos atacados por este pez en aguas turbias, porque el animal confunde el chapoteo con la presencia de un banco de peces. Puede producir graves heridas pues sus mandíbulas son lo bastante fuertes como para seccionar un brazo.
El pez trompeta, otro ejemplo de las curiosidades del mundo marino
El raro pez trompeta no se califica como tal por su escasez, sino por su figura única, con un morro de forma tubular. Por lo demás abunda entre los arrecifes coralinos del Atlántico, donde parecen flotar mientras se dejan arrastrar por las corrientes.
El tiburón más extraño
El pez martillo es otro raro espécimen, con 6 metros de largo y 900 kilos de peso. Es uno de los peces más peligrosos para el ser humano y para casi todos los animales marinos.
Tiene la cola asimétrica, con el lóbulo superior más largo – como todos los tiburones – lo que le permite nadar hacia abajo en dirección oblicua. Pero una de las características que lo diferencia del resto de escualos es su monstruosa cabeza, de más de 1 metro de ancho, en forma de martillo. En cada uno de los extremos de este “martillo” hay un ojo y un orificio nasal.
Si bien no se ha encontrado una explicación clara de la utilidad de esta estos lóbulos craneales, se habla de que pueden actuar como balance, compensando la poca extensión de las aletas pectorales.
¿Los peces tienen alas?
Los peces voladores se llaman así porque dan grandes saltos sobre el agua y se mantienen unos segundos en el aire gracias a sus aletas pectorales. Al cruzar el aire, la presión hace vibrar las membranas de las aletas –que son muy elásticas– y da la impresión de que las agita para volar.
Ejecuta vuelos que duran más de 15 segundos y que le permiten recorrer 50 metros o más.
¿Es verdad que este pez es un guía?
El pez piloto se consideraba en la Antigüedad como guía de los barcos, por su hábito de seguirlos. Pero en realidad se debe a su costumbre de seguir a grandes animales marinos para aprovechar los restos de su caza.
Curiosidades del mundo marino: el pez gatillo no sirve para disparar
El pez gatillo se distingue por la posesión de una espina eréctil antepuesta a la aleta dorsal, provista de un mecanismo complejo semejante al de un gatillo. Generalmente se encuentra en los mares tropicales, en torno a los arrecifes de coral.
Tienen la piel my correosa y recubierta por un resistente caparazón de escamas óseas teñidas de colores vivos.
El pez con la mejor puntería
El pez arquero se llama así por su excelente puntería a la hora de disparar gotas de agua sobre insectos fuera del agua a más de 1 metro de distancia.
El mecanismo que le permite realizar tal hazaña es muy curioso: aplicando el extremo de su carnosa lengua sobre el paladar, forma un tubito que actúa como una cerbatana. Las gotas de agua salen con tanta fuerza que hacen saltar a las arañas de su tela, capturan insectos al vuelo y derriban ranas posadas en la orilla.
La rémora viaja y come gratis
La rémora, pese a que es una nadadora veloz, suele desplazarse utilizando tortugas, rayas o tiburones. Se adhiere a ellos mediante un órgano que tiene en la cabeza y que se origina en la aleta dorsal. Puede desprenderse a voluntad y deslizarse por el superficie del animal “chófer”, aprovechando los restos del alimento que se le escapen.
Nota final
Estas son algunas de las rarezas y curiosidades del mundo marino. Sin embargo, existen muchas otras que vale la pena conocer. Otras, aún están por descubrir. ¿Te animas a viajar a las profundidades?
Bibliografía
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- Pérez Más E. Peces. [Barcelona]: Bruguera; 1978.