Puntos calientes en perros: causas, síntomas y tratamiento

Este problema puede reaparecer si las condiciones son propicias, por lo que es necesario vigilar la piel de la mascota para evitarlo.

¿Cómo tratar los puntos calientes en el perro?

Los puntos calientes, conocidos también como dermatitis húmeda aguda, representan un tipo de inflamación en la piel de los perros. Este padecimiento se presenta como un parche rojo que ocasiona escozor y continúa agrandándose conforme pasa el tiempo. En los casos más graves, la parte afectada comienza a perder pelo y se hace más evidente la dermatitis.

Este problema dermatológico es bastante doloroso para el can, por lo que es necesario acudir con presteza a un veterinario. Por suerte, estas inflamaciones tienen un tratamiento sencillo, aunque si no se atienden rápido pueden derivar en daños más complicados. Sigue leyendo este espacio para conocer más acerca de los puntos calientes en los perros.

¿Qué es un punto caliente?

Un punto caliente es una inflamación súbita de la piel que crece de manera continua. Este problema se observa como un parche rojo que permanece húmedo. El can afectado siente una enorme comezón que lo hace lamerse y rascarse, lo cual solo agrava la situación. Aunado a ello, la zona puede comenzar a producir pus y adquirir un olor desagradable.

Calmar la picazón en perros.

¿Cómo es un punto caliente?

Cuando el problema comienza, aparecen pequeñas regiones rojas debajo de la piel del perro. Conforme el cuadro avanza, la zona se vuelve más húmeda por la presencia de saliva, pus y sangre. Según la gravedad del caso, puede verse como una simple inflamación o pasar a lucir un aspecto desagradable con secreciones malolientes.

¿Cuál es la causa de este padecimiento?

Cualquier irritación en la piel del can es capaz de derivar en un punto caliente. Esto se debe a que son lesiones producidas por el exceso de humedad e irritación que los perros se provocan a sí mismos. Las razas con pelo largo son más susceptibles a desarrollar este padecimiento, ya que su piel tiene menos acceso al aire fresco.

Los puntos calientes suelen ser ocasionados por incidentes tan simples como picaduras de insectos, alergias, malos hábitos del perro o higiene deficiente. Según el Manual Veterinario MSD, algunos casos también pueden ser provocados por infecciones simples o complejas.

¿Cuáles son los síntomas de los puntos calientes en los perros?

Como se mencionaba, los síntomas más fuertes son el escozor, el sangrado y el dolor en la región afectada. Por lo tanto, la mascota tiende a rascarse, lamerse o morderse bastante dicha parte del cuerpo. La forma más sencilla de detectarlo es por medio de una revisión visual de la piel del perro. Si encuentras una mancha roja, es probable que se trate de un punto caliente.

¿Cómo se diagnostica este padecimiento?

El diagnóstico suele ser sencillo para un médico veterinario, ya que basta con ver la zona afectada para saber si se trata de este problema dermatológico. Sin embargo, la parte más importante de este proceso es identificar la causa que originó el punto caliente. Con este fin, se pueden llegar a hacer cultivos y otros análisis clínicos y así descubrir si existe otro padecimiento secundario.

Entre los exámenes más útiles en el diagnóstico de este padecimiento se encuentra la obtención de muestras citológicas. El procedimiento consiste en tomar un raspado de la región inflamada para analizarla al microscopio. Gracias a esto, se puede detectar la presencia de bacterias u hongos que podrían ser los responsables del problema.

¿Cuál es el tratamiento de los puntos calientes en los perros?

El tratamiento de los puntos calientes consiste en ventilar y limpiar la región inflamada. Con esto se intenta disminuir la humedad de la piel y el escozor, aunque en los cuadros avanzados puede ser un proceso doloroso por la presencia de heridas. En caso de que el origen de este padecimiento haya sido provocado por una bacteria, el veterinario puede recetar dosis de antibióticos para combatir la infección.

Además, el profesional de la salud animal suele indicar el uso de medicamentos antiinflamatorios con el propósito de combatir la inflamación y el escozor de la piel. Asimismo, es posible que te recomiende ponerle un collar isabelino a tu mascota, ya que de esta forma se evita que lama y humedezca más la zona.

Los antibióticos solo se pueden usar bajo prescripción veterinaria. Nunca automediques a tu mascota.

¿Cómo puedo prevenir los puntos calientes?

Para prevenir este problema es necesario poner atención en la salud de tu perro, ya que las pulgas, los mosquitos, las alergias o las infecciones son los agentes causales más comunes. Recuerda que puedes usar collares y repelentes para combatir a los insectos parásitos, mientras que las visitas recurrentes al veterinario te ayudarán a identificar posibles alergias.

Algunos canes también suelen lamerse de manera efusiva su pelaje solo por aburrimiento, por lo que es necesario combatir esto con juguetes y ejercicios. Evita a toda costa que su piel se quede húmeda por mucho tiempo, sobre todo si tu mascota tiene el pelo muy largo. De esta manera lograrás disminuir la posibilidad de que aparezcan los puntos calientes en su cuerpo.

Un veterinario con un perro en sus brazos.

Como te puedes dar cuenta, los puntos calientes no son un problema difícil de combatir y no debes temer si tu mascota presenta este padecimiento. No obstante, ten en cuenta que la inflamación avanza bastante rápido, por lo que un caso simple puede convertirse en uno complejo si no se atiende pronto. Acude cuanto antes al veterinario para que tu mascota reciba la atención que necesita.

Bibliografía

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