Los gatos de raza persa son muy populares. Sus distintivos rostros aplanados, su pelaje largo y ‘lujoso’, así como, su naturaleza cariñosa, impulsan este favoritismo.
Sin embargo, como todas las razas de gatos con pedigrí, la raza persa en general tiende a ser más propensa a ciertos tipos de afecciones de salud hereditarias.
La seborrea felina es frecuente en la raza persa
Se sabe que los gatos persas heredan un trastorno llamado seborrea idiopática. Esta enfermedad de la piel conduce a la sobreproducción de una sustancia aceitosa y cerosa por las glándulas de la piel.
Aunque es común en la raza persa, la seborrea puede afectar a otras razas de gatos y, por lo general, de la misma manera: la piel se enrojece e irrita, lo que provoca rasguños y un mayor daño del tejido.
La seborrea en los gatos tiende a afectar la piel a lo largo de la espalda y alrededor de los ojos y oídos. También causa irritación en aquellas áreas donde la piel se pliega, como en las axilas, alrededor de las piernas y en la cara, pies y cuello.
Causas de la seborrea felina
En la forma primaria –también llamada idiopática o desconocida– de la enfermedad hereditaria, se desconoce la causa de la seborrea. En el caso de una seborrea secundaria, la causa puede deberse a un problema subyacente, que puede incluir:
- Infecciones micóticas
- Parásitos
- Alergias
- Problemas dietéticos
- Desórdenes endocrinos
- Obesidad
Infección micótica en gatos de raza persa
También se conoce como tiña o infección por Microsporum canis. Se cree que los gatos persas están predispuestos a infecciones fúngicas en la piel y a formas de la enfermedad que tienden a ser más graves y persistentes de lo habitual en otros gatos.
Las lesiones cutáneas varían de leves a graves. La predisposición a esta infección parece estar relacionada con su pelo largo. El pelaje anormalmente largo del gato persa se debe a que es homocigoto para un gen mutante que determina este crecimiento.
Parásitos que afectan a los gatos de raza persa
Todos los gatos pueden contraer parásitos como pulgas, piojos, ácaros y garrapatas e, independientemente de la raza de gato que poseas, es importante proteger a su gato contra tales amenazas.
Pulgas
Es importante tener en cuenta que los gatos persas tienden a ser más sensibles que la mayoría a desarrollar alergias a las pulgas. Generalmente, el felino se vuelve alérgico a la saliva de las pulgas, que resulta en una reacción alérgica localizada en cada picadura. Esto puede ser muy irritante y provocar que el gato desarrolle llagas y abrasiones por rascado.
Ácaros
Los ácaros del oído tienden a establecerse en los gatos persas y pueden ser difíciles de tratar. Si bien generalmente se restringe a las áreas alrededor de las orejas, también pueden extenderse alrededor de la cabeza y el cuello.
Procesos de alergias cutáneas
Las alergias en los gatos pueden ser causadas por una gran cantidad de sustancias diferentes, desde ingredientes alimenticios hasta polen y sustancias comunes que pueden estar presentes en su hogar.
El gato persa tiende a ser un poco más propenso a sufrir alergias que la mayoría de las otras razas, por lo que es importante establecer su dieta y solucionar cualquier problema.
Si tu gato se rasca en exceso para tratar de obtener algo de alivio, esto puede provocar el desarrollo de puntos calientes y llagas, que conllevan riesgo de provocar infecciones secundarias y otros problemas.
Tratamiento de estas afecciones cutáneas
Cabe señalar que, como no es posible curar la seborrea idiopática, el tratamiento se centrará principalmente en controlar la afección. Mantén a tu mascota limpia y bien hidratada. Esto ayudará a controlar la condición y reducirá las posibilidades de que se desarrollen infecciones secundarias.
Las enfermedades subyacentes de la piel en los gatos de raza persa, generalmente, requieren tratamiento. Esto incluye el recorte del pelaje, la administración prolongada de medicamentos orales y el lavado frecuente con champú, lo cual es estresante para muchos gatos.
Dadas estas circunstancias, es lógico pensar que el cruce de la raza para obtener un gato con longitud normal del pelaje resolvería o mejoraría el problema.
Bibliografía
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