Pikas o liebres silbadoras: hábitat y características

Se dice que se han visto unas cuantas veces, en los altos montes rocosos y de verdes praderas en Tianshan —al noroeste de China—, unas criaturas peludas con cara de oso de peluche. Estos fascinantes animales se esconden entre las rocas y entonan un silbido que, a lo mejor, usan para llamar la atención de sus compañeros. Por ello, se conocen como liebres silbadoras.

Hoy te traemos toda la información que debes saber sobre un mamífero muy pequeño, en ocasiones conocido como Pika y, en otras culturas, bautizado como liebre silbadora. ¿A qué se debe esta peculiar característica de silbar? En las siguientes líneas respondemos a esta pregunta y muchas más.

Qué son las Pikas o liebres silbadoras

Las liebres silbadoras son unos mamíferos pequeños que viven en las montañas. Están englobados en el género Ochotona, un grupo de mamíferos lagomorfos de la familia Ochotonidae. Estos bellos animales tienen la apariencia de un pequeño ratón y de un conejo, por su hábil y rápido movimiento.

Su particular chillido que entona de vez en cuando es el que le da su apodo de liebre silbadora al animal. Se le puede encontrar en algunas zonas de Asia y en Europa existe una sola especie (Ochotona pusillus). Otras tantas especies se encuentran en Norteamérica.

Características de las liebres silbadoras

Vamos a ver por qué las liebres silbadoras no son ratón ni conejo, sino un animal entre medias de ambos mundos. Estas son algunas de sus características:

• Las Pikas tienen un tamaño de 12 a 30 centímetros, con un peso de 100 a 300 gramos.
• Tienen un pelaje suave y abundante con distintos colores —dependiendo de la especie—.
• Sus orejas son redondas y sus ojos también. Estos animales presentan una cara con el hocico corto, estrecho y una boca parecida a la de un ratón.
• Este lagomorfo presenta extremidades pequeñas tanto en sus patas traseras como en sus manos y tiene una cola muy corta —tanto que cuesta verla—.
• La función del silbido que emiten las Pikas es múltiple. Utilizan diferentes tonos para avisar de la presencia de depredadores, con el fin de comunicarse o para reproducirse.
• Estos animales difícilmente se dejan ver y, además, muchas de las especies que se engloban en este taxón están en peligro de extinción.

Hábitat de las liebres silbadoras

Las liebres silbadoras se pueden encontrar en zonas montañosas rocosas y de clima frío. Sin embargo, hay especies que se ubican en áreas boscosas. Ya sea en las rocas o en el bosque, su objetivo es crear su hogar; allí se ocultan en madrigueras poco profundas, para depositar sus alimentos y almacenarlos.

Son criaturas que viven en comunidad, ya que colaboran con todas las demás Pikas en la recolección de alimentos y en el trabajo de hacer guardia frente a depredadores, como aves rapaces y mamíferos carnívoros. Estos animales se alimentan de hojas de arbustos, vegetales secos y semillas.

Un detalle curioso sobre la territorialidad de las liebres silbadoras es que pueden ser agresivas entre ellas, en ocasiones con la finalidad de robar alimento. Tienen la costumbre de almacenar la comida en su madriguera para alimentarse en época de invierno, cuando los recursos escasean.

Los Pikas en las montañas

Cuando las liebres silbadoras construyen sus madrigueras, curiosamente están mejorando la calidad del suelo. A la hora de hacer sus necesidades, su excremento proporciona material orgánico y, como consecuencia, buen desarrollo en el crecimiento de vegetales en la zona.

Si la Pika se siente amenazada en algún momento, se esconde en su madriguera y espera allí hasta sentirse segura. En las temporadas invernales, la liebre silbadora aprovecha su habilidad para moverse fácilmente por la montaña para refugiarse bajo las rocas, y así se protege de las bajas temperaturas.

Las liebres silbadoras están en peligro

Estos tiernos animales son muy esquivos. De hecho, se han visto muy pocos ejemplares de algunas especies y, por ende, no se conoce demasiado sobre su comportamiento. Algunas especies de Pikas están en vías de desaparición, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

Las liebres silbadoras se encuentran en peligro de desaparecer, ya que su entorno natural se ha encogido en un 71 %. Esto se debe al cambio climático y también a un desplazamiento forzado, por parte de la creciente población en las montañas donde habita este peludo animal.