A lo largo de la historia de la humanidad, algunos animales han cobrado gran relevancia debido al papel que han jugado en ciertos momentos. Cerdos, monos y perros ocupan un lugar importante y transcendental en varios sucesos históricos. Y si no lo crees, lee alguna de estas historias.
¿Un galgo ocasionó la Reforma anglicana?
Aunque no sepas nada de historia es probablemente que sí sepas quién fue Enrique VIII. Sí, aquel que entre muchas otras cosas, decapitaba a sus esposas. Pues este rey inglés, también es responsable de uno de los eventos más importantes en la historia del cristianismo: la separación de la Iglesia Católica y la formación de la Iglesia Anglicana.
Según el profesor de psicología, Stanley Coren, nada de esto habría sucedido si no hubiera sido por el exceso de protección que Thomas Wolsey, arzobispo ingles de la Iglesia Católica, tenía hacia su perro.
Wolsey fue el encargado de negociar la nulidad del matrimonio de Enrique VIII con Catalina de Aragón para que se pudiera casar con Ana Bolena. Pues bien, la historia cuenta que en esa reunión se produjo un suceso que incomodó al Papa y que según dicen algunos, fue determinante para que la Iglesia Católica se separara de Inglaterra.
El protagonista, el perro galgo de Wolsey, llamado Urian. Cuentan que cuando llegó el momento en que Wolsley debía besar los pies del Papa, Urian, para proteger a su amo saltó sobre el Santo Padre y lo mordió. Clemente estaba furioso por el incidente, puso fin a la reunión y se negó al divorcio de Enrique, quien finalmente decidió romper lazos con Roma e iniciar la llamada Reforma anglicana, pero bueno, el resto de los acontecimientos sí los puedes chequear en los libros de historia.
El perro que salvó a Napoleón
¿El poderío de Napoleón hubiera existido si un perro no le salva la vida? Dicen que en 1815, cuando Napoleón se exilia a la isla de Elba, debió a travesar una gran tormenta en el mar. En el medio de ella, Napoleón cae al agua. Cuenta la leyenda que un perro de raza Terranova se sumergió en el bravío mar para salvarlo. Aunque suene algo fantasioso, lo cierto es que los perros de esa raza se destacan justamente por ser grandes rescatistas, quizás esa haya sido la razón por la que estaba en el barco en ese momento.
Como ya saben, después de sobrevivir al accidente, Napoleón regresó a Francia, inició la guerra de los cien días y su campaña militar para recuperar el poder. La etapa final de esta campaña fue la famosa batalla de Waterloo, donde la carrera de Napoleón como conquistador ,llegó a su fin.
El cerdo que originó la democracia europea
Esta historia es una cadena de acontecimientos. Presta atención. Resulta que el rey Felipe de Francia, un día había salido a recorrer la orilla del río Sena en uno de sus caballos. En medio de su paseo, de repente, un cerdo negro salió corriendo dentro de un montón de estiércol, el caballo se asustó y Felipe cayó al suelo muriendo en el accidente.
Tras la muerte de Felipe, quien asume el trono es su hermano Luis VII de Francia, que participó en las Cruzadas y que se había preparado para ser monje. Pues bien, Luis se casó con Leonor de Aquitania, pero ella decidió separarse y casarse con Enrique II de Inglaterra, quienes fueron padres de Juan I de Inglaterra entonces se vio obligado a firmar la Carta Magna, que luego se convirtió en la base de toda la democracia en Europa.
Estos acontecimientos se dieron debido al nuevo matrimonio de Leonor, el cual no habría sucedido si no fuera por la Segunda Cruzada. ¡Lo que logra un animal!.
El mono que causó miles de muertes
¿Un mono ocasionó miles de muertes? Tras la culminación de la Primera Guerra Mundial, los griegos quisieron iniciar una guerra contra Turquía, con la intención de recuperar algunos territorios. En ese momento el Rey era Alejandro I de Grecia, hijo de Constantino I. En el medio del conflicto, Alejandro se encontraba paseando por los jardines reales en Atenas con su perro. Pero el paseo se vio interrumpido porque Alejandro I de Grecia sufrió un accidente, fue atacado por un mono.
Ha habido una cierta confusión en cuanto a los monos, algunos historiadores afirmaban que eran sus mascotas y que estaban atacando a su perro. Otros dicen que eran monos salvajes. En fin, de cualquier manera, el rey fue mordido en la mano, la mano se infectó y Alejandro murió de sepsis.
Después de la muerte de Alejandro, su padre Constantino regresó al trono continuando el avance contra los turcos. El resultado, el ejército griego fue destruido, millones de soldados murieron y Grecia perdió toda la tierra que Alejandro había adquirió. Todo por un mono.