La cefalexina es un antibiótico del grupo de las cefalosporinas, que a su vez forma parte de la familia de los beta-lactámicos. Estos fármacos actúan de la misma manera que la penicilina: inhiben la síntesis de peptidoglicano de la pared celular de las bacterias, y con ello, las matan e inhiben su crecimiento (bacteriolítico). La cefalexina se usa en gatos y perros.
Aunque se trate de un fármaco de uso seguro, es esencial dejar claro que todo tratamiento con cefalexina debe ir avalado por un profesional veterinario. Además, si se interrumpe la dosificación o se hace de la forma incorrecta, se puede predisponer a que el felino sufra futuras infecciones. Si quieres saber más sobre este medicamento, sigue leyendo.
¿Qué es la cefalexina para gatos?
Como hemos dicho, la cefalexina es un antibiótico bacteriolítico, perteneciente al grupo de las cefalosporinas. De forma general, este fármaco se utiliza para tratar infecciones de tipo epidérmico, óseo, pulmonar y renal, tanto en perros como en gatos. De todas formas, su utilización es más común en el ámbito de la piel que en cualquier otra parte del cuerpo.
Tal y como indica el portal VCA Hospitals, este fármaco se vende bajo muchos nombres comerciales: Rilexine®, Keflex® y Vetolexin®, entre otros. Se vende en forma de pastillas orales, tabletas masticables —para perros— y, en algunas regiones, también se puede adquirir como una pasta oral.
¿Cuándo se puede usar la cefalexina para gatos?
Sin duda, la aplicación más útil de este fármaco en el mundo de los felinos es el tratamiento de la pioderma. Este cuadro surge tras la infección de la piel por parte de bacterias del género Staphylococcus. Normalmente, este grupo de microorganismos habitan como comensales en la epidermis del animal, pero pueden aprovechar una herida u otra patología para multiplicarse.
Diversas causas pueden propiciar la pioderma: una lesión mecánica, fallos hormonales, parásitos, depresión inmunitaria, defectos anatómicos, maceraciones en la piel y muchas más. Una vez los microorganismos crecen sin control, aparecen ciertos síntomas en el félido, como los siguientes:
- Excesiva formación de piel muerta en la superficie del animal, sobre todo en la espalda, cerca de la cola.
- Pequeñas elevaciones o granulaciones en la piel, que reciben el nombre de dermatitis miliar.
- Pérdida de pelo en la zona afectada y parches ulcerosos.
- Heridas abiertas con descarga purulenta, solo en los casos en los que la infección se presenta de forma agresiva.
Estudios estiman que la prevalencia de esta condición se sitúa en el 20 % de los felinos que acuden al veterinario por motivos dermatológicos. Dicho de otro modo, es una condición más o menos común, así que la cefalexina tiene un uso inestimable en este grupo de mascotas.
Dosis y posología
La dosis estándar en gatos es de 10 miligramos por libra del animal cada 24 horas, si bien esta escala puede cambiar según tu zona de residencia, la vía de administración y la condición de la mascota. Antes de establecer una ruta de acción, consúltalo con el veterinario. De todas formas, aquí te presentamos unos cuantos consejos a la hora de usar cefalexina para gatos:
- La cefalexina se puede dar con o sin comida. Si tu gato tiene síntomas gastrointestinales tras la ingesta del fármaco con el estómago vacío, prueba a dárselo la próxima vez después de comer. Si aun así no mejora, acude con él al veterinario.
- Las soluciones orales deben permanecer en el refrigerador y no almacenarse por más de 14 días. Es esencial seguir las pautas del veterinario, así que pídele un dosificador o jeringuilla antes de comenzar a tratar a tu gato.
- Si tu félido no acepta el fármaco, acude con él al veterinario. Existen formas de dárselo minimizando el estrés, así que no temas en pedir ayuda.
- El tratamiento no tiene un intervalo fijo. Consulta a tu veterinario cuántas dosis son necesarias y hazle caso si lo prolonga más de lo esperado. Bajo ningún concepto dejes de administrar el antibiótico a tu gato, pues esto puede traducirse en infecciones peores en el futuro.
¿Qué pasa si olvido una dosis?
Si te olvidas de darle la pastilla a tu gato pero su dosis era hace poco, puedes administrarla un poco tarde sin problema. De todas formas, si el félido está cerca de la toma del día siguiente, es mejor que te saltes la dosis previa. Nunca le des 2 pastillas a la vez al animal para compensar.
¿Qué gatos no son aptos para el tratamiento con cefalexina?
Tal y como indica el prospecto del medicamento, ningún fármaco es del todo seguro y siempre puede ir algo mal. De todas formas, solamente se prohíbe de forma terminante la dosificación en un tipo de paciente: aquél que es alérgico a otras penicilinas y fármacos similares. Si no se respeta esta regla, el félido puede desarrollar un shock anafiláctico que acabe con su vida.
Por otro lado, es necesario usar este fármaco con cuidado en pacientes con problemas del riñón.
Efectos secundarios
Todo fármaco presenta una serie de efectos secundarios, pues está afectando de forma local o sistémica alguna de las zonas del animal. A continuación, te presentamos algunos de los efectos secundarios de la cefalexina en gatos:
- Signos clínicos esperables: diarrea, vómitos y pérdida de apetito.
- Pérdida de apetito crónica: puede indicar un fallo hepático en el animal. Es esencial acudir al veterinario en este cuadro.
- Signos clínicos de alergia: fiebre, sarpullidos, problemas para respirar, anemia e irritación epidérmica. Estos signos también justifican una visita a la sala de urgencias veterinarias.
Sobredosis de cefalexina
El síntoma más común de una sobredosis de cefalexina es un vómito prominente por parte del gato. De todas formas, las sobredosis cuantiosas se pueden traducir en daño renal irreversible y problemas en el sistema nervioso a largo plazo. Si notas que tu gato no deja de vomitar y ha tomado más pastillas de las que debe, acude con él a urgencias.
Apuntes finales
La cefalexina es un fármaco muy útil en gatos, pues puede tratar la pioderma y otras condiciones infecciosas más graves. Además, está indicada en casi todos los tipos de félidos, exceptuando aquellos que tengan un historial de hipersensibilidad a las cefalosporinas u otros antibióticos.
De todas formas, este fármaco debe ser administrado con cabeza, constancia y siempre bajo supervisión veterinaria. Si se para la dosificación antes de tiempo, los efectos de la infección pueden ser muy dañinos.
Bibliografía
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Cephalexin, Triangle Animal Clinic. Recogido a 15 de junio en https://triangleanimalclinic.net/storage/app/media/Plumbs/Cephalexin.pdf
- Cephalexin, VCA Hospitals. Recogido a 15 de junio en https://vcahospitals.com/know-your-pet/cephalexin
- Silley, P., Rudd, A. P., Symington, W. M., & Tait, A. J. (1988). Pharmacokinetics of cephalexin in dogs and cats after oral, subcutaneous and intramuscular administration. The Veterinary Record, 122(1), 15-17.
- Crosse, R., & Burt, D. G. (1984). Antibiotic concentration in the serum of dogs and cats following a single oral dose of cephalexin. The Veterinary Record, 115(5), 106-107.
- Thornton, J. R., & Martin, P. J. (1997). Pharmacokinetics of cephalexin in cats after oral administration of the antibiotic in tablet and paste preparations. Australian veterinary journal, 75(6), 439-440.