Los mapaches forman parte de los animales más carismáticos del reino animal, lo cual se debe a su tierno aspecto, su curiosa apariencia y su peculiar manera de comportarse. Aunado a ello, el mapache es un mamífero que suele cuidar su alimentación, lo que le ha llevado a desarrollar hábitos tan raros como el de “lavar” su propia comida.
Un mapache es todo aquel mamífero que pertenezca al género Procyon, el cual incluye en la actualidad a 3 especies distintas. Cada una de ellas tiene ciertos aspectos físicos particulares, pero comparten gran parte de sus hábitos alimenticios. Continúa leyendo para saber cómo se alimentan estos fascinantes animales.
¿Cómo es un mapache?
Los mapaches tienen un aspecto peludo y compacto, con tallas que sobrepasan los 45 centímetros de largo y pesos entre 4 y 12 kilogramos. Además, el ejemplar típico porta una cabeza ancha (con orejas separadas) que se asemeja a la de un oso. De igual forma, el mapache presenta patas traseras planas (plantígradas) características de los úrsidos.
En cuanto a su coloración, estos vertebrados mantienen un pelaje gris-plateado en todo su cuerpo, aunque lo que más les caracteriza es el típico antifaz negro que rodea sus ojos. Además, hacen gala de una cola larga y anillada, un rasgo especial que veces genera confusión con su pariente el rintel (género Bassariscus).
Asimismo, las patas delanteras de este organismo cuentan con dedos y zarpas ágiles que le sirven para manipular diversos objetos. Gracias a sus manos, es capaz de abrir puertas, frascos y contenedores, por lo que suele ser bastante curioso. Por si fuera poco, los mapaches son muy hábiles con sus extremidades, lo cual les facilita la obtención de alimento en casi cualquier entorno.
Los mapaches son animales habilidosos, diestros y muy inteligentes.
Alimentación del mapache
La alimentación del mapache es omnívora y oportunista, puesto que se adapta bien a los recursos que existen en su ambiente. Además, se le considera un cazador versátil y con gran destreza para correr, nadar y trepar. En consecuencia, la suma de estas habilidades son la razón por la cual el mapache es capaz de invadir otros hábitats, lo que ocasiona que sea considerado como plaga en algunos países.
Aunque son capaces de comer casi cualquier cosa, los ejemplares de las especies englobadas en el género Procyon tienen preferencia por algunos tipos de comida. Los elementos más habituales que componen su dieta son los siguientes:
- Vegetales: semillas y frutas.
- Insectos: en su mayoría grillos, hormigas, escarabajos y chapulines.
- Crustáceos: cangrejos de río.
- Aves: algunos semilleros, gorriones, palomas y tórtolas, además de sus huevos.
- Peces: de pequeño o mediano tamaño, siempre de agua dulce.
- Mamíferos: roedores.
- Moluscos: gasterópodos y bivalvos.
- Reptiles: lagartijas y geckos pequeños.
Debido a que estos animales conviven en zonas urbanas con los humanos, también son capaces de alimentarse de los restos de comida. Esto explica por qué se les suele encontrar en los botes, los contenedores y las bolsas de basura de los núcleos poblacionales escarbando a altas horas de la noche. A veces incluso roban la comida de perros y gatos si esta se localiza en el patio.
Este comportamiento, en conjunto con su actividad nocturna, es el culpable de que la sociedad perciba a los mapaches como unos “ladrones”.
¿Los mapaches lavan su comida?
En algunas ocasiones, los mapaches sumergen varias veces en agua el alimento que consiguen. Contrario a lo que se piensa, este movimiento no parece servir para “lavar” ni remojar la comida, sino que es una forma de explorar y cazar presas bajo el agua. A pesar de ser un comportamiento poco común, dicha acción les sirve a estos mamíferos para llamar la atención de sus víctimas y capturarlas.
De todas formas, los mapaches también pueden realizar este curioso movimiento sobre arena o nieve, por lo que no es necesario que exista un cuerpo de agua. Esto parece indicar que la acción de “lavar” no está dirigida por completo a ser un método de caza y existen discordancias, ya que no atraen a los seres que se encuentran bajo tierra con un acto así.
Por otro lado, algunos zoólogos de la Universidad de Kyoto creen que esta técnica sirve para eliminar sustancias dañinas (como suciedad o toxinas) de la superficie del alimento. Así pues, puede que el acto sirva tanto para higienizar la comida como para atraer presas en el medio acuático.
¿Puedo tener un mapache como mascota?
A pesar de que pueda parecer buena idea, el tener un mapache como mascota no es una buena elección. Aunque son bastante adaptables a diferentes hábitats, el comportamiento de estos animales es bastante independiente y poco hogareño. Querer mantener a uno de estos mamíferos en el hogar solo le generará estrés a él y pondrá en peligro la integridad del tutor.
Además, debido a su mal manejo y a la irresponsabilidad de algunas personas, los mapaches se consideran invasores en varias regiones del mundo. Por ello, algunos países como México y España han prohibido su tenencia como mascotas. Al final, estas prohibiciones buscan darle una vida digna a los organismos y evitar que se transformen en un problema ecológico.
Tener un mapache es ilegal en la mayoría de regiones del mundo.
El mapache es un animal con una alimentación adaptable que le permite ser exitoso en casi cualquier ambiente disponible. Aunque esto es un beneficio directo para estos mamíferos, también los convierte en un peligro potencial para el ecosistema, ya que pueden invadir hábitats ajenos al suyo. Estas especies están muy bien adaptadas para la vida salvaje, pero no para una existencia doméstica restringida.
Bibliografía
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