Todo sobre el camarón esqueleto
El camarón esqueleto es un peculiar invertebrado que presenta una “piel” transparente, lo cual permite ver su “esqueleto”. Gracias a esta característica, los ejemplares pueden confundirse en su ambiente y pasar desapercibidos por sus depredadores.
El término “camarón esqueleto” no hace referencia a una especie única, sino que se le llama así a toda la familia Caprellidae. No obstante, existe un integrante nuevo en este grupo cuyo nombre científico es Liropus minusculus, por lo que el siguiente espacio tratará a fondo a este ejemplar. Sigue leyendo este artículo y conoce más acerca del curioso camarón esqueleto.
Hábitat y distribución
El primer ejemplar conocido de esta especie fue encontrado a 30 metros de profundidad en una caverna en la costa de la isla Catalina, California. Sin embargo, se cree que podría distribuirse a lo largo del noreste del océano Pacífico. Esto contrasta demasiado con el resto de la familia Caprellidae, ya que la mayoría de sus parientes viven en el Atlántico o en el mar Mediterráneo.
Gracias a su apariencia, el camarón esqueleto pasa desapercibido ante gran parte de sus depredadores, por lo que tiende a quedarse expuesto sobre rocas y plantas. Además, comparte su hábitat con varios animales invertebrados marinos como hidrozoos y briozoos, con quienes se mimetiza para parecer un filamento más de su cuerpo.
Características físicas del camarón esqueleto
Como se mencionaba, la característica principal de este peculiar camarón es que exhibe un cuerpo traslúcido que deja observar un tipo de filamento parecido a un “esqueleto”. Cabe resaltar que esta estructura no representa sus huesos, pues los artrópodos carecen de estructura ósea y presentan exoesqueletos. Por lo tanto, el “esqueleto” que se observa es en realidad un truco visual para mimetizarse con el entorno.
Asimismo, el camarón esqueleto tiene un tamaño reducido, ya que mide tan solo entre 2.1 y 3.3 milímetros de longitud. Esto significa que es casi invisible para los humanos. No obstante, su cuerpo mantiene la típica forma de “C” que se observa en los camarones de consumo habitual. De hecho, debido a su apariencia traslúcida, también son conocidos como camarones fantasmas.
El cuerpo del camarón esqueleto mantiene la misma estructura de otros anfípodos, la cual consiste en 13 divisiones o bloques denominados metámeros. En cada una de estas secciones contiene dos pares de patas que usa para nadar, pero las primeras dos se encuentran modificadas en forma de garras para atrapar y cazar. Mientras que sus últimos pares de patas están diseñados para fijarse en el sustrato.
Comportamiento
Contrario a lo que se podría pensar, el camarón esqueleto es un depredador nato que se mantiene atento para atrapar a sus presas. Gracias a que su cuerpo pasa desapercibido en el entorno, lo único que debe hacer es esperar de manera paciente a que sus víctimas se acerquen, casi como si parecieran una mantis. Por ello, pasan demasiado tiempo inmóviles sobre las rocas o la vegetación marina.
Alimentación del camarón esqueleto
En general, el camarón esqueleto destaca por tener una alimentación omnívora, la cual consiste en una gran variedad de microorganismos más pequeños que él. Entre los más populares se encuentran las diatomeas, los detritos, algunos gusanos, varios tipos de protozoarios e incluso algunas larvas de crustáceos.
Reproducción
De manera desafortunada, debido a que el camarón esqueleto fue reportado en el 2013, no existe mucha información acerca de su reproducción. A pesar de ello, se cree que pudiera seguir el mismo patrón de apareamiento de sus parientes más cercanos. Esto significa que su ciclo reproductivo se lleva a cabo justo después de la ecdisis (muda), ya que solo en este momento es posible que el macho fecunde a la hembra.
Este tipo de organismos fertilizan sus huevos de manera externa. Sin embargo, la hembra captura a los huevos y los resguarda en una pequeña “bolsa” que presentan en su vientre. En cuanto eclosionan, las crías tienen la apariencia de un adulto, pero con un tamaño mucho más reducido.
Si bien es cierto que se desconoce aún mucha información acerca del camarón esqueleto, es fascinante observar cómo se ha adaptado a su ambiente. Sus características le han permitido convertirse en un feroz depredador a pesar de su tamaño, lo cual es una ventaja en el océano. Este es un ejemplo perfecto sobre lo maravillosa que es la naturaleza y su capacidad para generar especies tan increíbles.
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