A partir del abandono progresivo del medio rural por parte del ser humano, los animales de compañía que se consolidaron por excelencia son el perro y el gato. Si bien las cabras como mascota no fueron en el pasado algo inusual, durante un tiempo sí se consideró así. Ahora encontrarnos con alguien que tenga una cabra como mascota puede no ser algo insólito.
Cada día se suman más personas a la adopción de animales de compañía no tan tradicionales como el perro y el gato, creando nuevas alternativas para muchos animalitos. Los cerditos vietnamitas y los ciervos sika, son algunos de los que lideran la lista de mascotas alternativas.
A pesar de que la cabra es uno de los animales domésticos más conocidos, son pocos quienes estrechan el vínculo afectivo al punto de considerarle mascota.
Las cabras son mamíferos que resultan una buena elección como mascota. Suelen ser animales muy afectivos que gustan tanto de hacer compañía como de sentirse acompañados. Llevan mal la soledad y por eso cuando se sienten solas, suelen ser muy ruidosas. Pero si se encuentran acompañadas no tienen problema alguno.
Lo que no sabías de las cabras
- Las cabras como mascota son capaces de reconocer a sus dueños y desarrollar vínculos afectivos profundos.
- Generalmente suelen ser animales dóciles y cariñosos con las personas.
- Pueden llegar a ser los mejores amigos de los más pequeños de la casa. ¡La energía que tienen ambos les conecta instantáneamente!
- Las cabras son animales curiosos. Les gusta mirarlo todo y acercarse para conocer cosas y lugares nuevos, por lo que son las compañeras ideales para ir de paseo o hacer un poco de jogging por las mañanas.
- Les encanta la hora del baño y lo disfrutan aún más si se les da mimos mientras se les asea.
- Pueden llegar a tener una vida muy larga si se les cuida bien. La edad promedio suele ser entre 15 y 18 años.
En Brasil, por ejemplo, una mujer tiene una pareja de cabras como mascota. Lo más curioso es que se comportan similar a un perro: se acercan a saludar, mueven la cola, lamen, piden cariño, juegan e incluso se sitúan cerca de su ama cuando está por los alrededores de la casa caminando, leyendo o simplemente disfrutando de una taza de café.
Atenciones que requiere una cabra
Las cabras como mascota requieren de ciertos cuidados que hay que tener en cuenta la hora de ver cuánto tiempo y esfuerzo estamos dispuestos realmente a invertir en ello.
Las cabras necesitan ejercicio. Recordemos que son animales que en su hábitat natural tienen la libertad para merodear y recorrer tanto como quieran. En las granjas también tienen espacios o corrales con una extensión de terreno considerable para permitirles caminar y explorar a su alrededor. Este es el tipo de ejercicio al que están acostumbradas y por ello es importante brindárselo a diario.
Otra de las atenciones que incluye tener a una cabra como mascota, incluye los juegos. A las cabras les gusta jugar, que las lleven de paseo con una cuerda y cambiar de lugar cada cierto tiempo. Una vez que se acostumbran a que se les preste atención a una hora determinada del día, esperarán este momento con entusiasmo y harán que quien les preste atención disfrute lo suyo también.
¡Importante! Si no estás interesado en tener crías, lo mejor es llevar la cabra al veterinario y castrarla. Esto también garantizará su salud y bienestar.
Con respecto a su lugar de descanso, a las cabras hay que mantenerlas en un corral cuyo suelo esté cubierto de paja para evitar que se acumule la humedad. ¿Por qué corral específicamente? Porque su naturaleza curiosa necesita ser contenida a veces para evitar que se escapen y deambulen por lugares indebidos.
En ese sentido es importante el corral, puesto que va a impedir que puedan sufrir un accidente al salir a un sitio nuevo sin nuestra supervisión. Del mismo modo, dentro del corral deben poder contar con un espacio tanto para la luz solar como para la sombra.
Generalmente, las cabras suelen atraer a las moscas y otros insectos similares, por lo que hay que mantenerlas aseadas para evitar que puedan enfermarse y ser portadoras potenciales de las enfermedades para el resto de quienes conviven con ellas. De la misma forma, en caso de presentar alguna herida, es importante mantenerla limpia y desinfectada para evitar complicaciones.
Lo mejor de las cabras como mascota
Como hemos mencionado anteriormente, las cabras son animales que les gusta mucho la compañía, los juegos y los mimos. La convivencia con ellas es muy amena. Hoy en día aumentan las historias sobre personas que han decidido adoptar cabritos y sus distintas experiencias de vida.
Las anécdotas, aparte de ser positivas, no escapan de tener un toque gracioso y diferente de lo que estamos acostumbrados a diario.
Sin embargo, el gran punto a favor de las cabras, destacado por todos aquellos que han adoptado una, es el hecho de que sus desechos no despiden hedor puesto que se alimentan de pienso vegetal, es decir: alfalfa, cáscaras de frutas y vegetales, y todo aquello verde que se les dé. Además, las heces son duras y fáciles de recoger.