Los gatos recién nacidos dependen por completo de sus madres, ya que ellas se encargan de su alimentación, su limpieza y sus cuidados. La leche es un componente esencial en su dieta y aporta las defensas necesarias para los primeros días de vida. Por esta razón, en caso de que su progenitora no pueda amamantarlos como es debido, se les puede ofrecer a los gatos bebés un tipo de leche casera especial para ellos.
Está de más decir que la leche de vaca no es adecuada para los mininos, pues es un tema que se ha desmitificado desde hace mucho tiempo. Además, cualquier alimento debe acoplarse a sus requerimientos nutricionales para evitar hacerles daño. Si quieres conocer algunas recetas de leche casera especial para gatos bebés, sigue leyendo este espacio.
¿Qué aporta la leche a los mininos?
La madre produce dos tipos de leches durante la lactancia. La primera es denominada calostro y solo aparece después del parto. Su consistencia es más espesa y contiene proteínas, vitaminas, lípidos y anticuerpos que permitirán proteger al pequeño. Gracias a esta leche, los gatitos adquieren defensas para enfrentar a los patógenos de su vida diaria, pues su sistema inmunitario aún no termina de desarrollarse por completo.
El calostro se produce entre las primeras horas posteriores al parto (24-36 horas). Al pasar este tiempo, aparece la leche madura que alimentará a las crías por el resto del período de lactancia. Su composición es similar a la del calostro, aunque las concentraciones de proteínas y lípidos son menores durante los primeros días. Además, la calidad de la leche también varía con respecto a la dieta de la madre.
La leche no solo aporta los nutrientes para el desarrollo normal del felino, sino que también estimula la maduración de algunos sistemas y órganos internos. De hecho, la lactancia cumple un papel crucial desde el nacimiento hasta el destete, por lo que los ejemplares no pueden prescindir de este proceso.
No obstante, algunos gatitos pueden sufrir la pérdida de su madre a muy temprana edad, lo que les impediría disfrutar de los beneficios de la lactancia. Por esta razón, se han diseñado algunas alternativas de leche casera para gatos que suplen la falta del amamantamiento.
Recetas de leche casera para gatos bebés
Los gatos bebés no pueden ser alimentados por cualquier tipo de leche, ya que la composición nutricional de esta sustancia cambia entre cada especie. Es por ello por lo que la leche de vaca nunca debe ser una opción, pues la cantidad de lactosa que contiene podría ocasionarles serios problemas intestinales a los pequeños.
En promedio, la leche materna de los gatos aporta 1.2 kilocalorías por mililitro, por lo que se debe buscar un producto que provea un aporte calórico similar. Entre las mejores opciones en el mercado se encuentran la leche evaporada y la leche de cabra. Sin embargo, al no estar preparadas especialmente para los gatos, se necesitan mezclar otros productos para complementar sus nutrientes.
La leche casera para gatos bebés es en realidad una mezcla de diferentes ingredientes, los cuales intentan igualar a la leche materna. Aunque carecen de rigor científico, algunas han demostrado mantener la salud de los ejemplares sin problema. Las siguientes recetas son las más famosas y útiles para alimentar a los felinos.
Ingredientes receta 1
La siguiente receta es una de las más sencillas para preparar, ya que usa leche evaporada que es fácil de encontrar en casi cualquier comercio. Los ingredientes son los siguientes:
- Leche evaporada: 90 mililitros.
- Yogur natural (sin azúcar): 120 mililitros.
- Yemas de huevo (sin la clara): 3-4 yemas.
- Agua: 90 mililitros.
Ingredientes receta 2
La leche de cabra se caracteriza por poseer una baja concentración de lactosa. Es por ello por lo que se le suele utilizar como un componente principal en la elaboración de leche casera para gatos. Si te es fácil conseguir este tipo de leche, podrías utilizar los siguientes ingredientes para complementarla:
- Leche de cabra: 250 mililitros.
- Yogur natural (sin azúcar): 150 mililitros.
- Yema de huevo (sin la clara): 1 yema.
Ingredientes receta 3
Las leches comerciales formuladas para consumo humano no suelen ser adecuadas para alimentar a los felinos. No obstante, las versiones “deslactosadas” diluidas con agua pueden ser una alternativa más al preparar leche casera para gatos. Para ello, tendrás que combinar los siguientes ingredientes:
- Leche sin lactosa: 250 mililitros.
- Mantequilla: 1 cucharada.
- Yema de huevo (sin la clara): 1 yema.
- Miel: 1 cucharada.
¿Cómo se prepara la leche casera para gatos?
El proceso para preparar la leche casera es bastante sencillo, ya que solo se necesita mezclar todos los ingredientes a fuego lento en una olla. Se calentarán lo suficiente hasta que comience a hervir la mezcla y se le dejará reposar por algunos minutos. Como resultado, se obtendrá un líquido con consistencia semi espesa.
La leche casera puede mantenerse en la nevera durante 2 días como máximo. Sin embargo, para cada toma se necesita calentarla a baño maría hasta alcanzar los 38 grados centígrados. Posterior a ello, lo único que se necesita para administrársela a los gatitos es un biberón o una jeringa estéril.
¿Cuántas veces al día se le necesita administrar la leche casera a los gatos bebé?
El estómago de los gatos bebés es bastante pequeño, por lo que no son capaces de succionar mucha leche en una toma. Por esta razón, lo normal es que consuman entre 10 y 20 mililitros de leche cada 2 o 4 horas. A pesar de esto, los mininos son los que regirán su propio horario y llorarán para indicar que tienen hambre.
Alimentar a los gatos bebés es una tarea demandante que necesita de un gran compromiso, ya que no se les debe dejar sin comer por más de 5 horas. Además, recuerda que este proceso es fundamental y cualquier error durante el mismo podría ocasionar consecuencias serias y fatales.
La leche casera no siempre es buena
Aunque es cierto que la leche casera ayuda demasiado para alimentar bien a los gatos bebés, no siempre se recomienda utilizarla. Ten en cuenta que la preparación de este alimento es muy rústica y carece de medidas exactas. Por lo tanto, los valores nutricionales pueden variar demasiado.
Para evitar problemas a largo plazo, se recomienda acudir con un veterinario para que determine si existe algún problema nutricional con los pequeños. Asimismo, te orientará con el uso de otros suplementos que sean necesarios. Esto no solo te servirá para mantener la salud y la nutrición de los felinos, sino que te dará la seguridad de que haces un buen trabajo como nodriza.
En los casos más difíciles, el profesional podría recomendar cambiar la alimentación por las fórmulas lácteas comerciales que existen para gatos bebés. Estas suelen ser las más adecuadas porque se balancean de manera específica para complementar su dieta, aunque también es cierto que son bastante caras. Por esta razón, solamente se utilizan cuando son necesarias y la leche casera no es capaz de solventar la nutrición.
Bibliografía
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