Posibles lesiones en la cola de los perros

Las diferencias anatómicas en la cola de los perros hacen que algunas razas se encuentren más expuestas a presentar distintos problemas. Por pequeña que sea la lesión, la manifestación de dolor puede ser muy alta.

Escrito y verificado por el veterinario Daniel Aguilar.

Última actualización: 09 febrero, 2022

La mayoría de los canes se caracterizan por tener mucha energía y un gran gusto por los juegos. Por desgracia, al realizar estas actividades se encuentran expuestos a sufrir accidentes. Las lesiones en la cola de los perros representan unas de las situaciones más frecuentes y dolorosas que puede padecer un ejemplar de esta especie.

Es bien sabido que el estado anímico de los canes puede identificarse con tan solo observar su postura corporal y algunos movimientos que realizan. Su cola forma parte esencial de este tipo de comunicación y, al presentarse una anomalía, esta y otras funciones pueden verse perjudicadas. Te invitamos a seguir leyendo y que conozcas más en detalle este tipo de lesiones.

Lesiones en la cola de los perros

La cola de los perros se encuentra formada por músculos, nervios y hasta 20 huesos adheridos al ano. Se considera una prolongación de la columna vertebral, y como tal, posee tareas muy importantes. Dada su ubicación y movimiento constante, el nivel de exposición a traumas y heridas puede llegar a ser muy elevado en esta estructura.

Además de ser un indicador de su estado anímico, la cola de tu perro también actúa como una excelente herramienta que le provee de equilibrio al caminar, correr, brincar y nadar. Las lesiones en esta estructura dependerán (entre muchos factores) de la raza y la forma anatómica que caracterice a cada ejemplar. Veamos algunos ejemplos.

Síndrome de cola fría o partida

Como su nombre lo indica, los canes afectados por este síndrome son aquellos expuestos a condiciones climáticas extremas. En estos casos, las bajas temperaturas y la humedad alteran la composición estructural de los tejidos. Sin embargo, no son las únicas situaciones que pueden desencadenar este tipo de lesiones en la cola de los perros.

Los cánidos sometidos a realizar ejercicio intenso sin un entrenamiento previo ni descansos apropiados son proclives de presentar cola fría. El hacinamiento, los baños y el nado en aguas frías también pueden favorecer la aparición de esta condición. Se ha visto que las razas destinadas a la caza y el deporte como el pointer, el setter, el beagle, el golden retriever y el labrador retriever son las más afectadas.

Signología y tratamiento de la cola fría

El diagnóstico de este tipo lesiones en la cola de los perros suele confundirse con una fractura, pero en realidad el cuadro se asemeja más a un esguince (debido al daño muscular que provoca). El signo más evidente de esta patología es una cola flácida, rígida en la base e inmóvil en el tramo restante.

La cola de tu mascota se apreciará como si realmente estuviese fracturada, pero la realidad es otra. Además, la manifestación de dolor suele llegar a ser constante y muy intensa. Evita realizar movimientos bruscos que puedan aumentar las molestias y considera acudir con tu amigo peludo a la clínica veterinaria para que se le realice una revisión detallada.

Para su tratamiento, lo ideal es llevar a cabo los tres siguientes puntos:

1. Reposo estricto.
2. Administración de analgésicos y antiinflamatorios.
3. Aplicación de compresas calientes en la base de la cola.

Sangrado de cola

Este tipo de lesiones en la cola de los perros pueden comenzar como una pequeña herida y terminar siendo un problema mayúsculo. Las infecciones secundarias y las molestias ocasionadas tienen la capacidad de disminuir gravemente su actitud, apetito y calidad de vida en general.

Los canes de raza grande (que poseen colas gruesas y largas) muchas veces se encuentran con dificultades para desempeñar normalmente los movimientos propios de esta estructura. Por tal motivo, no sería extraño que al caminar choquen y tallen su cola contra algunos objetos, causando heridas y úlceras sangrantes.

Todas las heridas atraviesan un proceso de cicatrización en el que el prurito (comezón) casi siempre está presente. Para evitar que tu mascota empeore el estado de su herida al intentar lamerse, el uso de collares isabelinos tendrá un excelente resultado.

Con el fin de obtener un pronóstico favorable en este tipo de lesiones, una atención médica temprana será la respuesta. Desde la realización de técnicas de limpieza y desinfección de la zona afectada hasta la colocación de un vendaje adecuado (en caso de necesitarlo), el profesional veterinario se encargará de todo.

Fracturas

La fractura de la cola se considera la lesión más frecuente que padecen los canes. Los principales motivos por los cuales se presenta esta situación resultan muy diversos:

• Atropellos.
• Pisotones.
• Pinzamientos con puertas y objetos pesados.
• Movimientos de latigazo de la cola contra superficies duras.

Todas las lesiones en la cola de los perros traen consigo muchas molestias. No obstante, las fracturas de la cola se consideran como unas de las situaciones físicas más apremiantes, ya que el dolor ocasionado es muy elevado. En consecuencia, las actividades fisiológicas básicas como orinar y defecar se vuelven difíciles tareas para el can afectado.

Zonas de lesiones en la cola de los perros

La cola de los perros puede fracturarse en cualquier segmento. La hinchazón de la zona dependerá de la altura a la que se presente la lesión. Normalmente, la recuperación suele demorarse cuando la fractura se localiza cercana a la base, debido a que en este lugar recae el peso del resto de la cola.

Con menor frecuencia, la punta de la cola también es candidata a sufrir fracturas. El dolor generado por esta lesión incitará a tu mascota a intentar morder dicha zona. Para evitarlo, limita los movimientos de su cabeza con el uso del collar isabelino.

Razas más propensas a fracturas

Todas las razas de canes se encuentran expuestas a sufrir fracturas en la cola. A pesar de ello, los perros con mayor probabilidad de padecer este tipo de lesiones como consecuencia de sus características morfológicas son los siguientes:

• Galgo.
• Springer spaniel.
• Lurcher.
• Whippet.
• Cocker spaniel.

¿Qué hago si mi perro se rompe la cola?

Lo primero que tienes que hacer es alejar a tu mascota de cualquier lugar riesgoso en el que pueda seguir lastimándose. Posteriormente, y con mucho cuidado, intenta revisar su cola para notificar toda anormalidad física. En caso de haber una lesión expuesta, procura limpiar la zona afectada y dirígete rápidamente a un especialista.

Con el fin de clasificar a las fracturas entre otras lesiones en la cola de los perros, es posible utilizar diversas pruebas diagnósticas. Ya sea que se tome una placa radiográfica o bien una tomografía computarizada, el objetivo será siempre el mismo: encontrar el sitio de la lesión y el tipo de fractura presente en el can.

En muchas ocasiones las fracturas de la cola no necesitan de tratamientos específicos. Aun así, es aconsejable la administración de analgésicos y antiinflamatorios con el fin de reducir el nivel de estrés del paciente. La cola tiene la capacidad de sanar por sí sola (de forma natural) siempre y cuando la afección no sea grave.

Amputación de la cola del perro

La amputación de colas y orejas en los canes con fines estéticos es un tema de gran controversia en la sociedad. Si bien en este artículo te hemos mencionado algunas de las funciones que provee la cola en el funcionamiento y el equilibrio del cuerpo de tu mascota, aún existen ciertos lugares en los que (ilegalmente) se siguen realizando este tipo de prácticas.

Cuando una de las lesiones en la cola de los perros se presenta y atenta contra su vida, la única persona con la facultad de tomar la decisión de amputarla es el médico veterinario. Solo en contadas ocasiones se decide tomar este camino, y siempre siguiendo un protocolo anestésico y quirúrgico preestablecido.

Ahora que has leído estas líneas, cuentas con las herramientas necesarias para actuar adecuadamente en el momento que observes algún signo anormal en la cola de tu mascota. Aunque la mayoría de cuadros tienen un pronóstico favorable, de ti depende que la recuperación sea pronta.