No es nada fuera de lo común encontrar a un ciempiés merodeando en zonas verdes de los hogares, es decir, en jardines o huertos. Por eso, no nos extraña que la picadura de ciempiés en perros sea más habitual de lo que muchos se imaginan. Además de esto, lo que pocos tutores saben también es que dicha picadura puede ocasionar problemas a los animales, en mayor o menor medida.
Si bien es cierto que la toxicidad de la mordedura de un ciempiés no es letal en muchos casos, la herida provocada sí que puede evolucionar hasta convertirse en algo más grave. Que las consecuencias sean más peligrosas o no dependerá de diversos factores que se explicarán en este artículo.
Síntomas de la picadura de ciempiés en perros
Los ciempiés son artrópodos pertenecientes al subfilo Myriapoda que a su vez se encuentran englobados en la clase Chilopoda. Este taxón cuenta con varios órdenes y más de 3300 especies, muchas de ellas completamente inofensivas para canes y seres humanos. Por ejemplo, los escutigeromorfos (escutígeras) viven en los hogares húmedos, no poseen mordeduras potentes y huyen del conflicto.
Normalmente, los ciempiés más peligrosos (las escolopendras, en las que fijaremos nuestra atención) pican cuando se sienten amenazados. En el caso de los perros esto es bastante habitual, ya que a muchos les gusta perseguirlos e, incluso, comérselos, algo que puede llegar a ser bastante grave.
Cuando un ciempiés pica a un perro, los síntomas pueden ser variables según algunas condiciones. Entre dichos síntomas, el principal será la inflamación alrededor de la mordedura o de la zona por completo. Suele ser habitual que estos artrópodos piquen en el hocico, las orejas, las patas y el abdomen.
Según la cantidad de toxina inoculada, el perro puede mostrar apatía, debilidad, falta de apetito, fiebre y dificultad para respirar. Por otro lado, cuando el ciempiés acaba devorado por el can, su picadura puede ocasionar gangrena en los tejidos de la boca o en las almohadillas de sus patas.
Algunos de los síntomas accesorios más raros derivados de este evento son los siguientes:
- Inflamación de los nódulos linfáticos (algo bastante extraño).
- Ansiedad y agitación generalizadas, las cuales pueden derivar en autolesiones y otras complicaciones.
- Ampollas con líquido en la zona exacta de la mordedura.
- Pérdida de movilidad en la extremidad afectada.
Revisa las heces del animal para ver si son diferentes a lo habitual, ya que esto puede dar pistas de si el can ha ingerido una escolopendra.
¿La picadura de ciempiés es peligrosa para perros?
Por norma general, el peligro de una picadura de ciempiés en perros no suele ser elevado. Como indican los expertos, lo más normal es pasar una inflamación dolorosa que irá disminuyendo poco a poco, sin prolongarse mucho más de 48 horas.
Sin embargo, hay varios factores que pueden empeorar los síntomas y que estos supongan un verdadero peligro para el animal. Principalmente, son tres las condiciones que se deben tener en cuenta:
- El número de picaduras: si el ciempiés pica varias veces al can, el veneno introducido con sus mordeduras será mayor, por lo tanto, la intoxicación también.
- La especie de ciempiés: la picadura de los ciempiés terrestres pequeños no suele afectar gravemente a los perros. Sin embargo, existen otras especies que sí pueden perjudicarlos. Es el caso de la Scolopendra viridicornis o la Otostigmus scabricauda. La especie europea Scolopendra cingulata también porta toxinas nada desdeñables.
- La sensibilidad del animal: hay ciertas características que pueden hacer que a un perro le afecte más que a otro la picadura de este invertebrado, como pueden ser su edad, si sufre alguna alergia, si padece enfermedades del corazón o si tiene afecciones respiratorias.
- La edad del ciempiés: los ciempiés jóvenes que no han llegado a su estadio adulto son bastante menos proclives a morder, pues sus mandíbulas no se han desarrollado lo suficiente y las toxinas que inoculan son menos potentes. Por otro lado, un ejemplar bien crecido de una especie agresiva no dudará en enfrentarse al perro si se acerca demasiado.
Hay que tener especial cuidado con las especies incluidas en el género Scolopendra. Algunos de los artrópodos aquí englobados pueden superar los 30 centímetros de longitud y presentar unas forcípulas enormes. Ciertas escolopendras tienen el dudoso mérito de provocar las picaduras más dolorosas del mundo, aunque no suelan ser letales para los seres humanos.
¿Cómo actuar ante una picadura de ciempiés en perros?
Cuando se haya detectado una picadura de ciempiés en un perro, lo principal es lavar la herida con agua y jabón neutro. Luego, se puede secar con una gasa estéril y aplicar un poco de frío en la zona para bajar la hinchazón y la molestia. Para ello, se deben emplear un par de cubitos de hielo, pero nunca directamente sobre la piel —siempre envueltos en una bolsa y cubiertos por un paño fino—.
También puedes aplicarle a tu can antihistamínicos de receta libre y de uso oral, pero siempre que te los haya indicado el veterinario con anterioridad.
En el caso de que se empiecen a detectar síntomas más graves —como que la zona se inflama más de la cuenta o que el perro vomita o tiene problemas respiratorios—, habrá que acudir inmediatamente a un centro veterinario. Si se ha visto al ciempiés, lo ideal es que se le tome una foto como prueba para el profesional, ya que así sabrá con más certeza cuál ha sido el causante.
El veterinario procederá a una limpieza más exhaustiva de la herida, así como a administrar los medicamentos necesarios para su mejora. Con las especies más letales, cada segundo de acción es vital para aumentar las probabilidades de supervivencia del cánido.
¿Cómo evitar las picaduras de ciempiés en perros?
Si se desea evitar el contacto de los ciempiés con los perros, lo primordial es conocer por qué lugares es más frecuente que se muevan este tipo de artrópodos. Los ciempiés suelen buscar zonas con poca luz para esconderse, pero también les gustan los sitios con humedad.
Por eso, en las viviendas suelen encontrarse en los patios, sobre todo si hay áreas verdes cercas –huertos, jardines, jarrones con plantas— y, en el interior, en los baños. También es muy común que merodeen en pilas de madera muerta o de piedras.
Teniendo en cuenta estos aspectos, para evitar la presencia de ciempiés, así como sus picaduras y las de otros insectos que perjudiquen a mascotas y personas, es aconsejable mantener una buena ventilación del hogar para que no se acumule humedad en el interior. Vigila los rincones de tu casa si vives en una vivienda baja localizada en una área intertropical.
Además de esto, los ciempiés suelen verse atraídos por aquellos pequeños animales de los que se alimentan, por lo que si la vivienda y sus alrededores se encuentran libres de ellos, su presencia será menor. Evita que se acumulen moscas y otros insectos dentro de tu casa, pues esto puede atraer a depredadores.
Por otro lado, ten en cuenta que también pueden haber escolopendras en los parques y bosques. Vigila muy bien a la mascota cuando pasee por estas zonas para detectar a tiempo cualquier acercamiento hacia estas u otros invertebrados peligrosos para el can, como la oruga procesionaria. El mejor tratamiento siempre es la prevención.
Bibliografía
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Mordeduras de ciempiés y milpiés. Recogiendo el 5 de julio en https://www.msdmanuals.com/professional/injuries-poisoning/bites-and-stings/centipede-and-millipede-bites
- Scolopendromorpha. Recogido el 5 de julio en https://es.wikipedia.org/wiki/Scolopendromorpha
- Ph.D., R. B. C., Moore, W., & Shuster, S. M. (2016). Invertebrates (3rd ed.). Sinauer Associates Is an Imprint of Oxford University Press.
- Is Centipede Bite Poisonous To Dogs? Recogido el 5 de julio en https://zooawesome.com/home-pets/is-centipede-bite-poisonous-to-dogs/
- Centipede bite. Recogido el 5 de julio en https://en.wikipedia.org/wiki/Centipede_bite