La endogamia es la producción de descendencia mediante el apareamiento de ejemplares que están estrechamente relacionados genéticamente. No solo se considera cuando se reproducen padres con hijos, pues la consanguineidad se extiende en muchos rangos de parentesco, algunos de ellos lejanos. Por desgracia, la endogamia afecta mucho al golden retriever.
Dado que las leyes de la herencia tienen una base matemática, es posible cuantificar la tasa de endogamia en cualquier cruce de perros relacionados entre sí. Como verás en líneas posteriores, esta reproducción poco ética y mal regulada para dar lugar a las «razas puras» termina pasando factura en los animales a largo plazo.
¿Qué es la depresión endogámica?
Cada gen que forma parte del ADN de un organismo contiene, de forma típica, 2 alelos diferentes, uno de la madre (A1) y otro del padre (A2). Cada uno de ellos puede ser dominante (A) o recesivo (a): el primero se expresa por encima del segundo, así que los caracteres recesivos solo se manifiestan cuando ambos alelos son iguales (aa).
Si un gen concreto presenta los 2 alelos dominantes (AA), estamos hablando de un homocigoto dominante. Si un gen concreto presenta los 2 alelos recesivos (aa), estamos hablando de un homocigoto recesivo. En el caso de que el individuo tenga un alelo dominante (A) y otro recesivo (a), se dice que es heterocigoto (Aa).
Esta introducción es necesaria para comprender la depresión endogámica, pues la reproducción entre parentales promueve la homocigosis a lo largo del tiempo. Cuanto más se reproduzcan a familiares entre ellos, más probabilidades hay de que se hereden rasgos recesivos perjudiciales, como mutaciones cancerígenas, por ejemplo.
La depresión endogámica se define como la pérdida de adaptación de una población debido a la falta de variabilidad genética.
Los efectos de la endogamia
No es casualidad que las razas puras de mascotas sean las más delicadas. Esto se debe a que, con el fin de seleccionar rasgos concretos, se descuidan otros parámetros necesarios para la supervivencia del animal. La depresión endogámica tiene diferentes efectos:
- Trastornos de fertilidad.
- Debilitamiento del sistema inmune.
- Más probabilidades de desarrollar cáncer.
- Problemas del desarrollo a nivel mental y físico.
La endogamia en el golden retriever
El golden retriever es un ejemplo viviente perfecto de lo que la endogamia puede provocar. A continuación, te presentamos 2 problemas específicos de esta raza, probablemente debido a las altas tasas de consanguineidad a la que se le ha sometido históricamente.
1. Cáncer
Hasta el 60 % de los perros de esta raza desarrollan cáncer, sobre todo de tipo hemangiosarcoma y linfoma. No se sabe del todo la causa, pero sí se conoce que esta es enteramente genética, pues las cifras de neoplasias en el golden retriever duplican a las presentadas en el resto de canes.
Como hemos dicho previamente, la endogamia es la más que probable causante de este evento. Los genes con mutaciones portadoras del cáncer se transmiten de padres a hijos y, como existe poca variabilidad genética en la raza, hay muchas posibilidades de que alguno de los parentales los presente.
2. Infertilidad
Un estudio científico publicado en el año 2019 demostró que la depresión endogámica ha reducido el tamaño de las camadas de los golden retriever. Para probar esta realidad, se tomaron muestras genéticas de 93 hembras de esta raza completamente sanas que ya se habían reproducido en otras ocasiones.
Después de análisis estadísticos en base al coeficiente de endogamia, se demostró que las hembras que son un 10 % más endogámicas que el resto paren a un cachorro menos por camada. Así pues, se confirma que la fecundidad en esta raza se ve mermada por los múltiples cruces entre familiares que se han realizado a lo largo de la historia.
¿Qué se puede hacer ahora?
Para evitar estos problemas, lo más adecuado sería poder localizar a los genes causantes de enfermedades y «aislarlos». Si un macho o una hembra concretos presentan una mutación genética que favorece la aparición de un cáncer, este ejemplar nunca debería poder reproducirse ni dar lugar a descendencia.
El problema, como imaginarás, es que todavía no se conocen estos genes deletéreos. Por ello, a día de hoy, la única opción es continuar investigando y evitar la reproducción entre familiares, ya sean cercanos o lejanos. Adquirir solamente perros de criadores prestigiosos que realicen análisis genéticos a los animales es el primer paso para lograrlo.
Por desgracia, la endogamia en el golden retriever —y en otras razas— es un tema muy delicado. No se puede prohibir la tenencia de un ejemplar por su linaje genético, pero está claro que las malas prácticas por parte de criadores tienen consecuencias. Al final, los que sufren los efectos de la cría selectiva son los propios animales.
Bibliografía
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