Las hormigas son insectos aparentemente inofensivos, sociales y arduos trabajadores, pero ante una amenaza pueden tornarse agresivas y defenderse. Para ello utilizan diferentes estrategias, aunque las que más nos preocupan son las potentes mandíbulas y el aguijón funcional que presentan algunas especies. ¿Conoces cuál es la hormiga más peligrosa del mundo?
Las hormigas o formícidos son insectos que comparten el orden Hymenoptera con abejas y avispas, por lo cual algunas constan de aguijones capaces de inyectar veneno (al igual que sus parientes). En las próximas líneas te presentamos a la hormiga más peligrosa del mundo y otros ejemplares destacados por el riesgo de su picadura o su mordedura.
Características de las hormigas
Las hormigas son insectos pequeños con un cuerpo dividido en 3 secciones. Tienen una cabeza (con ojos, un par de antenas y el aparato bucal), un tórax (con 3 pares de patas) y un abdomen (con un aguijón venenoso en algunos ejemplares).
Estos insectos son cosmopolitas, por lo que es común que nos encontremos con algunos de ellos incluso en nuestros hogares tanto en el día como en la noche. Las hormigas no son peligrosas, pues solo se concentran en las diversas faenas que tienen que cumplir para su colonia y no tienen interés en atacar mientras forrajean.
Sin embargo, si se sienten intimidadas, las hormigas pueden defenderse empleando sus mejores atributos: sus mandíbulas y su aguijón. A continuación te presentamos algunos detalles de estas partes tan importantes para la defensa de estos himenópteros.
Las mandíbulas de las hormigas
Las mandíbulas están formadas por dos piezas duras de ubicación lateral que conforman el aparato bucal (junto con otras partes como el labro, la maxila y el labium). Son segmentos articulados a la cabeza de manera estratégica, lo cual les brinda mucha movilidad. Así, les permiten a estos insectos realizar diversas funciones (masticar, cortar, sujetar y moldear, entre otras).
El aguijón
Algunos formícidos están dotados de un aguijón en la parte posterior del cuerpo (el abdomen). Esta pieza punzante se origina a partir del ovopositor, el cual se ha modificado para ser útil en la defensa y en la caza. En la mayoría de las hormigas se encuentra atrofiado o ausente, sin embargo ciertos ejemplares puede inyectar veneno.
En algunos casos el aguijón también se utiliza para desprender feromonas de rastro.
¿Cuál es la hormiga más peligrosa del mundo?
Ahora sí, sin más preámbulos veamos cuál es la hormiga más peligrosa del mundo. La ganadora del título y que obtuvo el récord Guinness por ello es la hormiga bulldog, una especie del género Myrmecia. Aunque todos los integrantes de este grupo son agresivos, la que más destaca es Myrmecia pyriformis.
Esta es una hormiga australiana que pertenece a la subfamilia Myrmeciinae. Tiene un comportamiento bastante agresivo en el que no solo emplea su aguijón para defenderse. Para cazar y para ahuyentar depredadores también utiliza su fuerte mandíbula y, por si fuera poco, ejecuta su ataque varias veces consecutivas.
A pesar de la agresividad que demuestra, el veneno de la hormiga bulldog no es tan tóxico para el ser humano como podría parecer. La gravedad de la picadura radica en el tipo de reacción que desencadena en ciertas personas, en especial en caso de los alérgicos.
Para algunos seres humanos un encuentro con este insecto resulta fatal, aunque sea solo con una picadura. Como ejemplo de casos con desenlaces trágicos tenemos los presentados en Australia durante el periodo de 1980 a 1999, con una cifra de 6 muertes debidas a reacciones alérgicas derivadas de la picadura. Por ello, la hormiga bulldog se considera la más peligrosa del mundo.
Otras hormigas peligrosas del mundo
No solo las hormigas del género Myrmecia son perjudiciales para el ser humano, pues existen otros ejemplares que también pueden provocar una visita a urgencias. Entre ellos se encuentran los siguientes.
Hormiga bala
La hormiga bala o Paraponera clavata (subfamilia Ponerinae) es otra especie peligrosa con la que no nos queremos topar, ya que además del gran tamaño que presenta (2,5 centímetros) ocasiona una picadura muy dolorosa. Dicha picada se caracteriza por infligir el peor dolor según la escala de Schmitdt (que va del 1 al 4), una percepción intensa semejante a la que produce un disparo.
Solenopsis
Las hormigas del género Solenopsis (subfamilia Myrmicinae) se conocen como hormigas de fuego, coloradas o rojas, debido al color de la mayoría de ellas (aunque también existen oscuras). Son un grupo dotado de aguijones con veneno y potentes mandíbulas.
Estas hormigas pican y muerden a la vez, pero su picadura es la que causa mayor preocupación debido a que su veneno posee un compuesto con actividad necrótica, lo que quiere decir que ocasiona daños en el tejido afectado. Además, esta resulta dolorosa y genera una cavidad en la superficie de la piel que se llena de pus (pústula).
Los casos derivados de picaduras de hormigas de fuego que más se complican se dan en personas con reacciones alérgicas a los componentes del veneno.
Diacamma
El género Diacamma también se encuentra incluido en la subfamilia Ponerinae y se caracteriza por ser un grupo que carece de reina. Todas las obreras son potencialmente reproductoras, pero una subyuga a las demás. Son hormigas depredadoras y, al igual que los otros formícidos mencionados, presentan mandíbulas fuertes y un aguijón venenoso para atrapar a sus presas.
La picadura de esta hormiga en los seres humanos es muy dolorosa. Como ejemplo del género tenemos a la especie Diacamma rugosum, también llamada hormiga bala asiática, cuya lesión causa una sensación de dolor intenso y penetrante (equivalente a la de un proyectil).
Odontomachus
Otras ponerinas nocivas son las del género Odontomachus, las cuales cuentan con unas mandíbulas trampa que se cierran de forma fuerte y veloz ante las presas. Además, tienen un aguijón que las hace aún más temibles.
Se han documentados varios humanos con cuadros clínicos graves derivados de la picadura de estas hormigas. Por ejemplo, la especie Odontomachus bauri o bachaco negro ocasiona picazón, ardor, pápulas, malestar e hipotensión cuando introduce su aguijón en la piel de su víctima y esta es hipersensible.
Pachycondyla
No podíamos terminar esta lista sin mencionar a este género de formícidos que producen reacciones alérgicas fuertes y a veces también fatales. Dos especies importantes son Pachycondyla sennaarensis u hormiga samsum y Pachycondyla chinensis u aguja asiática, ambas responsables de cuadros graves de anafilaxia en África y Asia.
En resumen, los formícidos son insectos tranquilos, pero si se perturban pueden resultar muy agresivos. Las especies de mayor preocupación son las que poseen un aguijón venenoso con compuestos que generan diferentes tipos de reacciones en los seres humanos. La hormiga más peligrosa del mundo es Myrmecia pyriformis, pero existen otras especies de importancia en la salud pública de las que también hay que cuidarse.
Bibliografía
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