Conoce todo sobre el dragón de mar foliáceo

Este dragón de mar es casi imposible de detectar entre las algas. Aquí podrás averiguar cómo se camufla y el resto de aspectos de su biología.
Conoce todo sobre el dragón de mar foliáceo
Sara González Juárez

Escrito y verificado por la psicóloga Sara González Juárez.

Última actualización: 08 enero, 2023

Es posible que lo primero que pienses al ver a este animal es que se ha creado a partir del dibujo de alguien con mucha imaginación. Y es que el dragón de mar foliáceo es un experto en camuflarse en su entorno, pues su cuerpo imita a la perfección la vegetación que le rodea.

Te encuentras ante uno de los animales más fascinantes que existen. Si quieres saber más sobre su biología, aquí encontrarás una ficha completa que te permitirá hacerte una idea precisa de cómo se relaciona con su ambiente y su manera de sobrevivir en este planeta. No te pierdas nada, pues empezamos.

Taxonomía y características

Phycodurus eques.

El dragón de mar foliáceo (Phycodurus eques es un animal perteneciente a la familia Syngnathidae, en la que se incluyen los dragones marinos como él, pero también los peces pipa y los caballitos de mar. Es el único miembro de su género, el Phycodurus.

El nombre que tiene hace referencia a su morfología, que le da el aspecto de ser una de las algas del entorno. Las largas, complejas y flexibles protuberancias que tiene su cuerpo cumplen únicamente la función de fundirle con el entorno, ya que suele vivir amarrado a la vegetación del fondo marino. Sus colores varían del marrón al verde oliva, también para esta función.

Suele medir unos 30 centímetros. Además de su boca en forma de tubo, también presenta espinas afiladas a ambos lados del cuerpo, las cuales constituyen una defensa de último recurso contra los depredadores.

Hábitat del dragón de mar foliáceo

El dragón de mar foliáceo habita las costas sureñas de Australia, desde las islas Abrolhos hasta el oeste de Victoria. También ha habido avistamientos en el estrecho de Bass y en Tasmania.

Suele frecuentar los arrecifes rocosos en los que crecen algas marinas. Se localizan en aguas de hasta 50 metros de profundidad, cerca de la costa, y alrededor de bancos de arena. A pesar de que son capaces de moverse distancias de hasta 5 hectáreas, lo cierto es que son muy lentos y se agotan rápidamente, por lo que su rango geográfico queda algo limitado.

Alimentación

Este dragón de mar es carnívoro y usa inteligentemente su poca capacidad de movimiento. De hecho, suele quedarse quieto entre las algas, dejándose mecer por las corrientes para fundirse con el entorno. De esta manera es capaz de acechar a sus presas, consistentes en camarones, plancton y larvas de peces.

Para atraparlas realiza un movimiento de succión con su boca, expandiendo una articulación en la parte inferior del hocico. Así, las presas se absorben de manera inmediata sin tener tiempo para reaccionar.

Comportamiento del dragón de mar foliáceo

Se trata de una especie que suele moverse en solitario o en parejas, dependiendo de la época del año. Es un nadador muy lento, que necesita largos descansos tras cada nado y que corre riesgo de morir cuando lucha contra fuertes corrientes durante demasiado tiempo.

Su actividad se divide en cortos períodos, sin preferencia por la noche y el día, ya que los entornos que frecuenta suelen carecer de abundancia de luz.

Pasa la mayor parte del tiempo entre la vegetación donde se camufla, ya que esta le proporciona refugio y escondite para esperar a sus presas al mismo tiempo. Cuando un depredador le encuentra, a menudo se sorprende con las espinas mencionadas anteriormente, lo que le da una oportunidad de sobrevivir.

Reproducción

Cuando buscan pareja, los machos compiten violentamente entre ellos por las hembras. El cortejo es largo y consiste en una sincronía a la hora de nadar por parte del macho y, si es aceptado, también por la hembra.

La hembra pone hasta 250 huevos, a veces hasta 300, mientras que el macho desarrolla una serie de ovipositores en su cola. En ellos se depositarán los huevos y se incubarán durante unas 4 semanas. La eclosión dura varios días, en los que las tandas de crías nacen y se marchan para garantizar la supervivencia del máximo número de ellas posible, aunque la tasa es solo de un 5 %.

Los recién nacidos son totalmente independientes y capaces de cazar, por lo que no existen cuidados parentales en esta especie.

Estado de conservación del dragón de mar foliáceo

Phycodurus eques.

A pesar de que se le consideraba en estado de casi amenazado (NT), desde 2016 se le ha categorizado en preocupación menor (LC) en la lista roja de la IUCN. No obstante, su número sigue decreciendo año tras año, ya que es una especie muy sensible a la degradación del hábitat por su limitada capacidad de movimiento.

Las actividades humanas han afectado negativamente con sus consecuencias, en especial con las aguas residuales y las capturas accidentales de la pesca. El problema es que estos acontecimientos, así como las molestias del buceo recreativo, se quedan en anécdotas y no se registran de manera oficial.

A pesar de que se han protegido varias áreas en su distribución y se ha incluido la especie en la Ley de Conservación de la Biodiversidad y Protección del Medio Ambiente de Australia, aún queda mucho trabajo por hacer, pues no se encuentra protegida a nivel internacional ni comercial. ¿Conseguiremos que el dragón de mar foliáceo siga poblando nuestros arrecifes?


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Pollom, R. 2017. Phycodurus eques . La Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN 2017: e.T17096A67622420. https://dx.doi.org/10.2305/IUCN.UK.2017-2.RLTS.T17096A67622420.en . Consultado el 04 de enero de 2023 .
  • Connolly, R. M., Melville, A. J., & Preston, K. M. (2002). Patterns of movement and habitat use by leafy seadragons tracked ultrasonically. Journal of Fish Biology61(3), 684-695.
  • Martin-Smith, K. M., & Vincent, A. C. (2006). Exploitation and trade of Australian seahorses, pipehorses, sea dragons and pipefishes (family Syngnathidae). Oryx40(2), 141-151.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.