Bronquitis infecciosa aviar: síntomas y tratamiento

La bronquitis infecciosa aviar es una enfermedad que produce síntomas respiratorios en aves. Tiene una alta mortalidad y solo puede prevenirse con una vacuna.
Bronquitis infecciosa aviar: síntomas y tratamiento
Sara González Juárez

Escrito y verificado por la psicóloga Sara González Juárez.

Última actualización: 21 diciembre, 2021

La bronquitis infecciosa aviar es una de las enfermedades más comunes en aves de suelo, como las gallinas, aunque el virus es capaz de afectar a más especies. Desde su descubrimiento en 1930, aún no se ha podido erradicar de aquellos lugares en los que se hacinan aves, como las explotaciones masivas para la producción de carne y huevos.

Si convives con aves y tienes sospechas acerca de que los síntomas respiratorios que presentan sean derivados de esta enfermedad, no tardes en ir al veterinario. Mientras tanto, aquí puedes informarte de las características, los signos y el tratamiento que existe hoy en día.

¿Qué es la bronquitis infecciosa aviar?

La bronquitis infecciosa aviar es una enfermedad vírica, aguda y muy contagiosa. El virus que la provoca pertenece al género de los Coronavirus y al orden de los Nidovirales. A pesar de que se asocia con el tracto respiratorio, lo cierto es que el agente patógeno se replica también en el sistema digestivo e incluso en el reproductor.

La incubación del virus es de unos 10-14 días, tiempo en el que tardan en aparecer los primeros síntomas.

Esta condición infecciosa afecta principalmente a aves de suelo como gallinas, pavos, codornices y perdices. No importa la edad que tenga el animal, pues se han reportado casos en todas las etapas de la vida. Además, también puede causar estragos en los riñones, los ovarios y afectar al desarrollo de los polluelos (en el caso de que sobrevivan).

Una veterinaria evalúa a una gallina.

Causas de contagio

La vía principal de transmisión son los aerosoles (las microgotas que se diseminan por el aire con la tos y los estornudos) y el contacto con las heces de animales infectados. Las infecciones se favorecen de manera desmesurada en los lugares en los que varios animales conviven juntos. Es de expansión rápida y la tasa de mortalidad es alta.

La bronquitis infecciosa aviar está presente en todo el mundo y existen varios serotipos propios de cada región, como la cepa QX (China), la Massachusetts o la Italia 02, encontrada también en España.

La bronquitis infecciosa aviar no es zoonótica, es decir, no puede transmitirse a los seres humanos. Afecta solo a aves y no a todas las especies. De todos modos, conviene desinfectar las zonas en las que se haya encontrado el virus por seguridad, pues son comunes las infecciones bacterianas secundarias.

Síntomas de la bronquitis infecciosa aviar

Como se decía más arriba, los síntomas de esta enfermedad no se circunscriben únicamente al sistema respiratorio, sino que ataca más órganos, afectando a sus funciones. Los signos clínicos más representativos son los que tienes a continuación:

  • Tos.
  • Secreción nasal y descarga ocular.
  • Estornudos.
  • Dificultad para respirar (el ave abre el pico o tiene ruidos respiratorios).
  • Las aves se agrupan en fuentes de calor.
  • Heces acuosas.
  • Aumento del consumo de agua.
  • Puesta de huevos anormal (huevos sin cáscara, deformes, etcétera).
  • Letargia.

Algunos de estos síntomas son compatibles con otras enfermedades propias de las aves, como el cólera o la viruela. Es por ello que se debe acudir al veterinario de inmediato, en especial cuando se convive con más de un ejemplar.

Diagnóstico

Para obtener un diagnóstico fiable no basta con la observación de los síntomas, ya que es necesario aislar el virus a través de pruebas serológicas para identificarlo. Algunas de ellas son las siguientes:

  • Test ELISA: este test detecta anticuerpos creados frente al virus de la bronquitis infecciosa aviar en el suero sanguíneo.
  • RT-PCR: la reacción en cadena de la polimerasa da resultados bastante fiables a la hora de aislar el virus e identificarlo, pero es una prueba cara.
  • Inhibición de la hemaglutinación (HI): para determinar serotipos.
  • Ensayos de inmunofluorescencia.
  • Virus neutralización.
  • Técnicas de inmunohistoquímica.
  • Microscopía electrónica.
  • Anticuerpos monoclonales.

Salvo las 2 primeras, que son las más utilizadas, el resto son pruebas accesorias para afinar en el diagnóstico de diferentes cepas. Muchas veces, esta concreción es de gran ayuda para el tratamiento.

Tratamiento de la bronquitis infecciosa aviar

No existe un tratamiento específico para la bronquitis infecciosa aviar, sino que este abordaje se orienta a paliar la sintomatología. Por ejemplo, se recomienda aumentar la temperatura de las instalaciones parece reducir la mortalidad del cuadro. También es adecuado reducir la cantidad de proteína brindada en la dieta y añadir electrolitos al agua con el fin de evitar desajustes metabólicos.

Por otro lado, casi siempre se suelen recetar antibióticos, ya que ayudan en el control de las infecciones oportunistas que aparecen durante el curso vírico. De esta forma, se reduce la probabilidad de que el ave afectada muera.

Prevención

La prevención y el control de esta enfermedad se realizan a través de la vacunación. Existen vacunas vivas (con el virus atenuado) o inactivas (virus muerto) dependiendo de la cepa patogénica a tratar y la población de aves en cuestión.

El tema de la vacunación es complejo, pues mientras que algunas vacunas controlan más de una cepa, para otros serotipos no existe ninguna. Por eso es tan necesaria la identificación del virus: en muchos casos podría administrarse una dosis que no proteja al animal adecuadamente.

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Por otro lado, es necesario aislar a los ejemplares infectados a medida que aparezcan. La mortalidad que produce la bronquitis infecciosa aviar es alta, por lo que solo queda paliar los síntomas y confiar en que el animal supere la enfermedad. Siempre se deben desinfectar a fondo todas las zonas y habitáculos de los animales, pues de otra manera el virus no desaparecerá del ambiente.


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