Mucha gente se pregunta si un pájaro entiende a otras aves de especies que no sean la suya, y lo cierto es que esto no estaba del todo estudiado. A pesar de ello, acaba de ser comprobado en una especie conocida como la ratona australiana azul.
Un pájaro entiende a otras aves: la ratona australiana azul
La ratona australiana azul es un pequeño pájaro que vive en el sureste de Australia y en Tasmania. Se ha demostrado cómo esta especie es capaz de entender las llamadas de alerta de otros pájaros de la zona.
Este ave es sedentaria y bastante territorial, y posee un dimorfismo sexual muy llamativo: los machos poseen poderosos tonos azulados y negros, mientras que las hembras son pardas y, de hecho, recuerdan a pájaros como el ruiseñor.
Parece que este pájaro entiende a otras aves, pero posee otros comportamientos peculiares: por ejemplo, aunque son monógamos y forman parejas, son aves promiscuas que se reproducen con otros pájaros que no son su pareja.
De hecho, la ratona australiana azul no solo es un ave que se reproduce fuera de su pareja estable, y es que también cuida de esas crías que tiene fuera de la pareja.
Este pájaro entiende a otras aves
Este pájaro entiende a otras aves y sus alarmas, aunque estas no se encuentren en su rango de visión, al igual que no importa si ve al depredador, lo que es especialmente impactante al darse cuenta de que comprenden el significado.
El estudio, publicado por la Universidad Nacional de Australia, permite comprobar que este pájaro entiende a otras aves de forma similar a como nosotros entendemos idiomas extranjeros.
Según los autores del trabajo, se trataría de un aprendizaje social por el que este pájaro entiende a otras aves sin necesidad de experiencia directa, únicamente escuchando las alarmas sin necesidad de ver al depredador.
Esto es importante, ya que estudios anteriores habían mostrado este mismo comportamiento pero realizando observaciones en las que el pájaro que entiende a otras aves de su entorno también ve al depredador motivo de la alarma. Incluso se ha visto como las aves se comunican con humanos, gracias a los pájaros que ayudan a buscar miel.
Esta estrategia la realizan otros seres vivos: aprender de los demás es más sencillo que aprender de la experiencia directa, y sobre todo menos arriesgado, sobre todo cuando dicha experiencia es hacer frente a un depredador.
Para comprobarlo, se diseñó el siguiente experimento: ejemplares de ratona australiana azul fueron entrenados en ausencia de cualquier depredador, a través de grabaciones, lo que permite comprobar la naturaleza del aprendizaje de estas aves en libertad.
¿Para qué sirve este comportamiento?
Las utilidades de estos descubrimientos son más interesantes de lo que pudiera parecer: muchas aves en peligro de extinción son criadas en cautividad para luego ser liberadas en la naturaleza.
Uno de los principales problemas de estas aves es que cuando son liberadas al medio no reconocen a depredadores como las aves rapaces, por lo que cuando estas llegan no huyen y son capturadas.
Entender las alarmas de otras aves permitiría a estos pájaros criados en cautividad la posibilidad de huir, lo que aumentaría sus posibilidades de supervivencia. En España, aves como el arrendajo o los cuervos son especialistas en alarmar al resto de aves sobre la presencia de depredadores.
Aunque, curiosamente, los córvidos son unas de las aves que más depredan sobre la pequeña ratona australiana, junto a los zorros, gatos y ratas negras, que en Australia son extendidas especies exóticas invasoras. Es por ello que especies de todo el mundo se podrían beneficiar de este tipo de aprendizaje, que podría estar presente en otras especies animales.