¿Son saludables las semillas de girasol para las aves?

Es sencillo pensar que las semillas de girasol podrían generar una buena fuente de alimento para las aves domésticas. Sin embargo, es importante conocer los riesgos de su exceso. Si la dieta de tus pájaros se basa solo en este alimento, podrías generar en su organismo diferentes problemas de salud que acortarían su vida.

La monodieta de semillas de girasol provoca en los pájaros problemas metabólicos, digestivos y hepáticos, además de diarrea y el más común de todos, sobrepeso debido al alto contenido de grasa que contienen este tipo de alimentos. Por esta razón, se recomienda utilizar estas semillas solamente como premios en entrenamiento.

Aves y semillas

Los pájaros pequeños —como loros y pericos—, son los más propensos a sufrir de sobrepeso a causa del consumo de semillas de girasol. Sin embargo, las aves grandes —como las guacamayas o las aratingas—, sí requieren más grasa en su dieta, por lo que podrías incluir una pequeña cantidad dentro de su menú.

Las semillas de este tipo son ricas en vitamina E, vitamina B6, B1 y algunos oligoelementos como cobre, fósforo, selenio, magnesio y fibra, minerales que al mismo tiempo pueden ser perjudiciales en exceso para muchos tipos de aves, en especial si no se ejercitan o están en jaulas muy pequeñas. Del mismo modo, son pobres en vitamina A.

En cuanto al cuidado que debe tenerse con este alimento, podemos citar los siguiente: si por ejemplo se tiene a un loro acostumbrado a comer solamente semillas de girasol, podría rechazar otros alimentos y de cierto modo manipular a su dueño para que le regrese su platillo favorito. Por lo tanto, las semillas pueden generar una especie de adicción en ciertas aves.

¿Qué semillas garantizan una dieta óptima en las aves?

Generalmente, las aves que no son domésticas o no están en cautiverio suelen consumir una variada cantidad de semillas, frutas, verduras y hojas que les aportan los nutrientes necesarios para su metabolismo. A continuación, te mostramos una lista de semillas que pueden complementar la dieta de los pájaros:

• Semillas de alpiste: son ovaladas, de forma puntiaguda y de color amarillo. Tienen un contenido elevado de almidón y muy poca grasa, razón por la que se recomienda mezclarlas con otras que sí contengan una cantidad considerable.
• Semillas de lino: son especialmente útiles para darle brillo al plumaje del ave, por lo que son recomendadas para la época de muda de plumas y en pequeñas dosis ayudan a la digestión. Son de color oscuro y aplanadas.
• Semillas de avena: en primer lugar, no deben dárseles las de consumo humano. Las que son aptas para aves son de color amarillo y son ideales para aquellas que están en época de crianza, porque ayudan al metabolismo.

Entre otro tipo de semillas se encuentran las de cáñamo, que mejoran su capacidad reproductora gracias a que contienen aceites y vitamina E. Muchas semillas aseguran nutrientes importantes en la dieta de las aves debido a su estado embrionario, pues contienen brotes vegetales que se traducen en una fuente natural de proteínas que mejoran el metabolismo.

Efectos secundarios

Dentro de las anomalías mencionadas anteriormente, podía sumársele una posible presencia de agentes patógenos o microorganismos que surgen si no se conservan las semillas en un lugar seco y limpio. Por otro lado, algunos efectos secundarios del consumo en exceso de las semillas de girasol son los siguientes:

• Hipocalcemia: es una enfermedad que nace del bajo contenido de calcio que tienen estas semillas. Esta aumenta la posibilidad de presentar fracturas debido a una debilidad ósea, además de sufrir convulsiones, debilidad muscular o parálisis.
• Hipovitaminosis A: es frecuente en aves como yacos y amazonas, donde genera hiperqueratosis en pico y patas o infertilidad.
• Picaje: las alteraciones nutricionales que surgen el exceso de grasa producen problemas de picaje y posible automutilación.

Por lo anterior, debes tener en cuenta que si tu ave ya está acostumbrada al consumo frecuente de semillas de girasol, poco a poco puedes ir reduciendo la cantidad para minimizar los riesgos en su salud. Algunos consejos para lograr tu meta son los siguientes:

1. Llenarte de paciencia, porque no es una tarea sencilla.
2. Agregar otras semillas que aporten los nutrientes necesarios en la dieta del ave.
3. Variar las frutas que puedan despertar su apetito, así evitarás que muera de inanición y que pueda cambiar sus hábitos alimenticios.

Las semillas de girasol son unos excelentes premios para las aves domésticas, pero no se debe abusar de ellas. Su alto contenido en grasas hace que solo se contemple su consumición de forma ocasional.