¿Se puede tener una nutria como mascota?
En internet abundan los vídeos sobre animales exóticos viviendo en hogares particulares y teniendo comportamientos graciosos o llamativos. Esto, lejos de tomarse como un mero entretenimiento, ha motivado el aumento de la búsqueda de estas especies para mantenerlas en cautividad. De entre todas ellas, la idea de tener una nutria como mascota es una de las más populares.
La legalidad de la tenencia de nutrias en el hogar varía según la región en la que te encuentres. Es posible que esté prohibido, permitido o que se necesite ser participante de algún proceso específico, como un programa de rescate. En este artículo podrás ahondar en esta cuestión tan debatida y presente en los últimos años. No te lo pierdas.
¿Una nutria es un animal doméstico?
Lo primero debe ser siempre centrarse en el propio animal, más que en la legalidad de su tenencia. La comparación para poner en perspectiva estos casos es universal: especies como el perro y el gato, que llevan miles de años conviviendo con el humano, versus especies salvajes recluidas en un hogar.
Una nutria no es un animal doméstico. Aquellas especies que se consideran como tal han pasado por un proceso de domesticación, es decir, que el humano las ha adaptado de forma artificial al estilo de vida que nosotros llevamos.
Cuando se trata de especies exóticas, como la nutria, este proceso no se ha realizado. Por tanto, se trata de un animal salvaje que no está adaptado a la vida en un hogar. Esto resulta en un gran malestar para él, tanto a nivel físico como mental. A menudo, estas experiencias terminan con la muerte del ser vivo o con su abandono.
Los perros, por ejemplo, llevan a sus espaldas miles de años de cruces selectivos que les han dotado de facilidad para comunicarse con las personas y formar un vínculo afectivo.
¿Es posible tener una nutria como mascota?
Una vez dicho esto, el otro factor a tener en cuenta es el legal. La tenencia estará permitida o prohibida en función del estado de conservación de la especie y del nivel de regulación de la fauna salvaje de cada región.
En España, por ejemplo, es ilegal tener una nutria como mascota. Por tanto, para encontrar una es necesario recurrir al mercado negro, lo que a su vez implica perpetuar el maltrato animal y el tráfico de especies.
En otros países sí está permitida la tenencia de este mustélido. En Estados Unidos, por ejemplo, las nutrias son legales en estados como Nevada, Florida o Nueva York. En Colombia, por el contrario, se prohíbe tenerlas en hogares particulares debido a la enorme presión que sufren desde la década de los años 50 por el comercio con sus pieles.
El Código Penal de este país castiga con pena de prisión el tráfico de especies, sus partes y derivados que estén protegidas.
¿Una nutria vive bien en un hogar?
La respuesta es que no. Aun con los cuidados más medidos y bienintencionados del mundo, las nutrias no son animales que se adapten bien a la vida en cautividad. Por tanto, a pesar de los esfuerzos por recrear su hábitat, es muy probable que aparezcan problemas de salud o de conducta derivados de su encierro.
Por otro lado, las nutrias no tienen un comportamiento adecuado para tratar con humanos. Si bien son capaces de acostumbrarse a interactuar con nosotros, también se vuelven agresivas durante la época de celo o se muestran territoriales. Manejar un animal salvaje en cautividad es un trabajo para profesionales y solo debe hacerse dentro de programas de conservación.
¿Qué hago si me encuentro una nutria herida o enferma?
Es fácil que el impulso de ayudar a un animal herido te lleve a querer cogerlo y curarlo o llevarlo a un veterinario. Sin embargo, cuando se trata de fauna salvaje, este comportamiento puede ser más perjudicial que beneficioso. Además de las enfermedades que se pueden transmitir en ambas direcciones, lo más probable es que la nutria trate de defenderse si la tocas y te lleves alguna lesión.
Por tanto, lo mejor para ti y para ella será llamar de inmediato al centro de recuperación de fauna más cercano y dar el aviso. Durante el tiempo que tarden en llegar los profesionales, asegúrate de que no la pierdes de vista: de esta forma darás tiempo muy valioso a sus rescatadores.
Los peligros del tráfico ilegal de especies
Cuando una persona recurre a la cría ilegal o al mercado negro para obtener un ser vivo, ten por seguro que ha sido extraído de su medio natural o ha nacido en un lugar que dista mucho de cumplir las normas en cuanto a bienestar. El resultado de conseguir tener una nutria como mascota implica hacerse con un animal que arrastra diversos problemas de salud física y mental.
El tráfico ilegal de especies mueve entre 10 000 y 20 000 millones de euros cada año, una cifra equiparable a la del tráfico de drogas y solo superada por la venta ilegal de armas.
Por otro lado, recurrir a este negocio es perjudicar a la biodiversidad mundial. Aunque en principio este desequilibrio de los ecosistemas no tiene un efecto visible, en los últimos años ha tenido consecuencias más que relevantes en cuanto a la expansión de pandemias y los fenómenos metereológicos anormales.
Todo el mundo se enternece cuando ve una nutria. Esto no es malo en absoluto: es un sentimiento que nace del amor y la empatía. Sobre lo que se debe tener control no es el cariño por los animales, sino las acciones que tomamos al respecto. Si eres un amante de estos mustélidos, recuerda que ese amor se manifiesta mucho mejor luchando por darles la libertad que se merecen.
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