Aquel gran perro peludo blanco con machas que lleva un barril al cuello es el San Bernardo. ¿Recuerdas la película Beethoven? El protagonista de aquel filme es un perro de esta raza. Si aún no la conocías, aquí podrás familiarizarte con sus principales características.
Los San Bernardo ya eran conocidos antes de las películas de los años 90. La raza gozaba de fama especialmente por su uso en las labores de rescate en zonas montañosa. Este hermoso can es un descendiente del mastín de los Alpes. Aquel perro se cruzó con otros perros de gran tamaño como el gran danés o el terranova. Conozcamos los orígenes del San Bernardo con más detalle.
Orígenes
Este perro desciende del mastín original que los romanos introdujeron en Los Alpes. Los monjes los adoptaron para ayudar a las personas desaparecidas en la montaña por las nevadas. Debido a las historias de viajeros salvados por estos perros, la raza se volvió conocida a nivel internacional con el paso del tiempo.
Estos perros han salvado cientos de vidas en los Alpes y otras montañas. Los viajeros de estas zonas de alta montaña pronto descubrieron que estarían más seguros con perros de ayuda. Son capaces de sacarles de una situación peligrosa con su fuerza y tenacidad.
Estándar de la raza
Los primeros documentos sobre la raza del San Bernardo datan de finales del siglo XIX. En la ciudad de Basilea, la raza de volvió tan popular que se fundó el Club Suizo del San Bernardo. Poco después, este perro se convirtió en un icono nacional y se le reconoció como oriundo de territorio suizo. Este fue el paso que estableció un estándar para la raza.
Es un perro alto, robusto y con los huesos muy fuertes, pero con una mirada tierna y compasiva de color marrón.
Características: ¿Cómo es el San Bernardo?
El San Bernardo es conocido por su pelo abundante, así como por ese característico pequeño barril que siempre lleva colgado al cuello donde llevan aguardiante según la leyenda. Los perros de la raza San Bernardo tienen unas características muy notorias. Su pelaje es fácilmente distinguible y tiene un corazón tan grande como su tamaño.
A menudo circulan mitos entre los perros de gran tamaño pero el San Bernardo es tan bueno como parece a primera vista, solo tienes que ver esos ojos sinceros con los que te mira. Su principal motivación es ayudar a las personas que tengan problemas.
Aspecto físico
El San Bernardo es un perro alto, robusto y con los huesos muy fuertes, pero con una mirada tierna y compasiva de color marrón. Tiene un cuello grueso, una espalda ancha y la cola larga. De aspecto noble, los perros de esta raza tienen un porte firme y fuerte. A pesar de su tamaño, su apariencia es completamente amistosa.
Sus piernas son rectas y fornidas y sus pies muy grandes. Con respecto a su pelo, hay dos tipos de San Bernardo: uno el que tiene el pelo liso y otro con pelo largo. Si eliges a uno de estos perros recuerda que tendrás que aprender algunos trucos para recoger los pelos que dejen por casa.
Los colores predominantes combinados con blanco son: marrón rojizo, anaranjado y atigrado. Sobre todo llevan esos matices en el lomo, alrededor de los ojos y las patas traseras. Tienen el pelo corto cerca del rostro y más largo en el resto del cuerpo. La espesa cola de estos perros acaba en blanco.
Cuidados especiales
Debido a su fortaleza, este no es un perro que necesite demasiados cuidados especiales. Pero sí hay que tener en cuenta algunos detalles. Necesita una buena cantidad de ejercicio diario, tiene que mover esos potente músculos para empezar la jornada con buen pie. Si quieres un San Bernardo en casa, deberás poder darle esa actividad regularmente.
Además, por ser tan grande, necesitará espacio para moverse y para que pueda estar a gusto. También babea mucho, por lo que debes tener la fregona siempre a mano (no es broma). Un perro grande necesita cuidados acorde a su envergadura. No es precisamente como recoger lo que pueda dejar por allí un caniche.
Se le debe cepillar a diario y mantener una higiene continua en la que habrá que prestar especial atención a los ojos y la boca. No olvides que un perro de este tamaño y características necesita mucho alimento. El coste de mantenerlo también será elevado. El San Bernardo será una genial opción, especialmente si tienes niños en casa.
Comportamiento y carácter
El carácter del San Bernardo es tal como su apariencia demuestra. Es uno de los perros más nobles que se conocen, es amigable, cariñoso, adora a los niños y tiene una cualidad innata en su personalidad: es protector. Es una de las mejores elecciones cuando hay niños en casa.
Estaría dispuesto a salvarlos de cualquier situación aún cuando esté arriesgando su propia vida. Es por eso que fue el elegido para proteger a los viajeros en una de las zonas más peligrosas de la montaña. Se les introdujo en el monte St. Bernhard que da nombre a la raza.
Con los niños, se convertirá en su compañero de juegos, en su amigo, en su vigilante, en su protector y en aquel que le dará “un abrazo” cuando lo necesite. A pesar de que su gran tamaño pueda intimidar, no te preocupes, el San Bernardo es un cachorro grande.
Es un perro ideal para tener en cualquier tipo de casa. Sí es cierto que el espacio podría escasear en una vivienda muy pequeña, por eso busca espacios abiertos para ejercitarse. Su carácter es tranquilo y nada destructor a diferencia de otros perros. Es un un magnífico defensor de sus seres queridos.
Si eliges un San Bernardo recibirás mucho cariño, lealtad y amistad con este gran compañero. Quizá sea como Beethoven y te dé muchos momentos de diversión. Además, os hará sentir protegidos, tanto a ti como a los más pequeños de la casa en todo momento.