¿Qué provoca la desobediencia en nuestros perros?
De todos los malos hábitos que pueden tener nuestros perros, la desobediencia es uno de los peores y de los más delicados. Al ser su amigo y su dueño, es de suma importancia que puedan acatar las órdenes que les des. Además, los perros son animales que siguen a su líder de manera natural, por lo que necesitan tener a alguien que los oriente.
El gran problema de la desobediencia en los perros, es que en algunos casos puede dañar seriamente la relación entre ambos. Esto se debe a que él no te tomará en serio y en muchas situaciones hará lo que le plazca, lo cual ocasionará problemas con varias personas u otros perros. Si desconoces por qué ocurre todo esto, aquí te dejamos los motivos principales.
El mal comportamiento en los perros
Los perros no suelen comportarse mal sin razón, pues necesitan algún desencadenante que propicie su desobediencia. De hecho, estos animales tienden a buscar el orden y las reglas. Sin embargo, si no te reconoce como un líder, él intentará sobrellevar ese puesto y es en este instante cuando aparecen los malos comportamientos.
Te podría interesar: Tengo un perro posesivo: ¿qué hacer?
¿Qué se debe hacer para evitar que los perros desobedezcan?
Las razones por las que un perro desobedece a su dueño pueden ser diversas, pues existen varias formas de hacer que tu mascota te pierda el respeto. Para evitarlo, basta con comportarse como un líder que le ofrezca seguridad y guía en todo momento. No obstante, esto no es tan sencillo de lograr. Algunos de los motivos que desencadenan que un perro desobedezca son los siguientes:
1. No recompensarles si te hacen caso
Si bien, existen algunos perros que están más dados a obedecer que otros, lo más común es que ellos no te hagan caso a menos que les des una recompensa que sea de su gusto.
Para ellos esto representa una especie de reconocimiento a su obediencia, por lo que si no los recompensas, es normal que no te hagan caso al percibir que ignorarte es mejor.
Debes ver esta situación como si se tratara de una persona común y corriente que está en su trabajo: cuando se está cumpliendo una orden que se le está dando, lo mejor es ser elogiado y reconocido, por lo que resulta fundamental darle a entender a tu canino que su obediencia tiene mucha importancia.
2. No entender lo que le estás diciendo
Al igual que ocurre cuando le intentas explicar algo a alguien de una forma incorrecta, a tu canino le costará un mundo obedecer alguna orden que le estés dando si lo haces de la manera equivocada, lo cual solo le generará confusión.
Para entender esto, es importante tener en cuenta que si bien una de las mayores virtudes de los canes es su capacidad para entendernos cuando nos comunicamos con ellos, lo que logran captar es más los gestos que nuestras palabras. Por ello, la gesticulación en nuestro lenguaje es la clave para todo.
En pocas palabras, si no se es coherente con lo que se está diciendo–como cuando le pides que se siente con un tono interrogativo–y no existe un lenguaje corporal adecuado, el canino simplemente desobedecerá.
3. Sienten miedo ante una orden
Para nadie es un secreto que lo más recomendable cuando deseas amaestrar a tu amigo de cuatro patas, es recompensar su obediencia y el acatamiento de tus órdenes con algo que les guste. Como por ejemplo, algún tipo de alimento, una caricia, o un divertido paseo al parque. A esto se le llama condicionamiento positivo y es la mejor estrategia de adiestramiento.
Sin embargo, si tiendes a regañarlo de manera frecuente cuando se equivoca o le pegas para corregirlo, lo único que lograrás es hacer que tu perro genere miedo. De hecho, con el paso del tiempo asociará la orden con este temor y comenzará a evitar realizarla.
Si deseas evitar esta situación, lo mejor que puedes hacer es seguir recompensándole en algunas cosas. Mientras que por el otro lado, si lo piensas regañar, solo dile un “no” con firmeza y aléjalo de la zona. No interactúes con él más de lo necesario ni lo mimes. Es más, ignóralo por unos minutos para que entienda que su actuar trae consecuencias. Como ves, la violencia es innecesaria en estos casos.
Solo de esta manera harás que tus órdenes sean siempre una oportunidad de ganarse algo agradable, por lo que los perros nunca serán desobedientes.
4. Falta de estabilidad mental
Los perros también son susceptibles a cambios drásticos en sus emociones y su estabilidad mental, por lo que la desobediencia podría deberse a estos factores. Claro está, dicha situación es un poco más rara, pero se evidencia porque no solo comienza a desobedecerte, sino que todo su comportamiento cambia.
Visto de otra forma, el can no se encuentra estable y es propenso a tomar una conducta agresiva, subversiva o temerosa. En estos casos, es poco probable que los dueños sean capaces de controlarlo, por lo que tendrás que acudir con un veterinario para saber cómo lidiar con ello.
5. Falta de constancia
No ocurre en todos los casos, pero existen algunas personas que creen que su perro aprenderá un truco con solo unas cuantas repeticiones. Como te podrás imaginar, esto es un fatal error, pues los canes aprenden por medio de repetir varias veces una misma acción.
Si no existe constancia en el adiestramiento de la mascota o te olvidas de reforzar su aprendizaje, lo más probable es que te desobedezca. Claro está, no es un problema del can, sino que simplemente no conoce las órdenes que le dictas y no sabe qué hacer.
6. Falta de liderazgo: la razón principal de desobediencia en los perros
Este es un problema muy delicado que muchos dueños sufren y no desean aceptar. Tanto es así que adjudican la desobediencia de los perros a cualquier otra razón, y cuando todo está normal, lo culpan a él.
En numerosas ocasiones el canino toma la decisión de no hacer caso y hacer lo que le plazca porque no te reconoce como su líder. Aunque no lo parezca, esto es algo de suma importancia en la relación que consigas crear con tu perro, ya que si no te ve como tal, asumirá que él es quien manda.
Debes internalizar el hecho de que si esto te ocurre es por tu culpa, puesto que cuando se trata y se cuida responsablemente a uno de estos pequeños animales, ellos te lo reconocen no solamente brindándote todo su cariño, sino también asumiendo que eres la máxima jerarquía.
¿Por qué esto es así? Porque los perros solo conseguirán tenerte el respeto que mereces si les tratas bien, les proteges y sobre todas las cosas, les impones un orden y unas reglas que no puedan romper.
¿Se puede corregir a un perro desobediente?
De manera afortunada, en la mayoría de los casos, la desobediencia no es un problema que deba temerse. De hecho, es fácil corregir esta conducta, aunque hará falta un profundo compromiso y bastante constancia para lograrlo. Lo único que tendrás que hacer es seguir un entrenamiento con ayuda del refuerzo positivo, lo cual consiste en enseñarle trucos y premiarlo solo cuando logre ejecutarlos bien.
¿Qué pasa si no puedo entrenarlo?
En caso de que por cualquier razón no se pueda entrenar de manera personal al perro, se puede tomar la alternativa de llevarlo a una escuela de obediencia. Estos centros de aprendizaje necesitan tener todo lo necesario para ayudarle a tu mascota a controlarse. Por ello, suelen ser una opción algo cara para la mayoría de los dueños.
Como podrás darte cuenta, existen varias opciones para lograr que tu perro no desobedezca las órdenes, aunque todo depende de ti. Recuerda que un perro sano siempre debe ver en sus dueños a un líder, ya que esto les da tranquilidad y reduce su nivel de estrés. De lo contrario, pondrás en riesgo su salud y su estabilidad mental. Trata siempre de cuidar y procurar todos los aspectos de su vida, no solo la parte física.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- International Association of Animal Behavior Consultants. (2019) Manual de entrenamiento canino. IAABC.
- Elgier, Á. M., Jakovcevic, A., Mustaca, A. E., Bentosela, M., & Barrera, G. (2009). Problemas de comportamiento en los perros domésticos (canis familiaris): aportes de la psicología del aprendizaje. Revista de Psicología, 18(2), ág-123.
- Bradshaw, J. W., Blackwell, E. J., & Casey, R. A. (2009). Dominance in domestic dogs—useful construct or bad habit?. Journal of Veterinary Behavior, 4(3), 135-144.
- Greenebaum, J. B. (2010). Training dogs and training humans: Symbolic interaction and dog training. Anthrozoös, 23(2), 129-141.